Una mirada a la propia diversidad

Espa?a tambi¨¦n es, en cierta manera, pa¨ªs invitado en esta edici¨®n de Arco. Por iniciativa de Rosina G¨®mez-Baeza, que lo ha planteado como despedida y como tributo al arte espa?ol, la feria le ha dedicado un espacio espec¨ªfico a trav¨¦s de un programa comisariado, a cargo de Mar¨ªa Corral, que se presenta en un espacio protegido, plegado sobre s¨ª mismo para evitar interferencias con el resto de la oferta galer¨ªstica, en el pabell¨®n 7, a pocos metros del espacio reservado a Austria como pa¨ªs invitado.

"He seleccionado a artistas que aunque son j¨®venes tienen ya una trayectoria interesante a sus espaldas", comenta Mar¨ªa Corral, que advierte de que no se trata de una exposici¨®n tem¨¢tica, ya que el contexto es una feria, por lo que cada artista se presenta en un espacio aparte que se corresponde con el de la galer¨ªa que le representa. "He procurado que se refleje la gran diversidad de opciones del arte espa?ol y los distintos medios en los que se est¨¢ trabajando", a?ade Corral.

Y los hay, efectivamente, de muy distintos. Una de las m¨¢s sorprendentes es la propuesta de Ester Parteg¨¢s, que ha dejado todo el espacio vac¨ªo. La obra casi se corresponde con el t¨ªtulo, ya que consiste en un gran post-it de acero con la leyenda "las cosas m¨¢s importantes no son cosas". Toda una declaraci¨®n de principios. En un espacio vecino otro artista tambi¨¦n utiliza medios poco usuales, en este caso fotocopias, aunque en una obra m¨¢s elaborada a escala gr¨¢fica. Se trata de la instalaci¨®n de Francesc Ruiz The funhouse, y consiste en una serie de fotocopias que reproducen un c¨®mic, con contrastes muy marcados de blanco y negro, casi a lo manga, que juega con el espacio como si los dibujos se reflejaran unos a otros como espejos deformantes. "Hago c¨®mic, pero en el campo expandido del arte", indica Ruiz.

Todo es posible, tambi¨¦n la escritura. A los libros se refiere, por ejemplo, la instalaci¨®n de Alicia Mart¨ªn -una grieta en el suelo que deja ver una acumulaci¨®n de vol¨²menes-, y en cierta manera tambi¨¦n la de Sim¨®n Zabell, que en su obra El a?o de algo, cap¨ªtulo II ha forrado el espacio con folios de un texto que ha escrito ¨¦l mismo de forma que los vac¨ªos en la pared dibujan algunos de los elementos descritos en el texto.

Como no pod¨ªa ser menos, el v¨ªdeo es uno de los medios presentes. Destaca por su hipn¨®tica complejidad la instalaci¨®n de Mabel Palac¨ªn La distancia correcta, en la que mediante dos pantallas y la combinaci¨®n de im¨¢genes rodadas con un actor y cortes de distintas pel¨ªculas cl¨¢sicas plantea una interesante reflexi¨®n sobre la percepci¨®n. "Me interesa plantear hasta qu¨¦ punto podemos mantener distancia con las im¨¢genes", indica la artista.

M¨¢s en la est¨¦tica del v¨ªdeo musical se situar¨ªa el v¨ªdeo del colectivo El Perro, en el que dos chicos recorren en monopat¨ªn la vieja c¨¢rcel, hoy ya abandonada y en desuso, de Carabanchel. Se titula Democracia, como el monopat¨ªn por el que saltan y patinan por las galer¨ªas carcelarias. M¨¢s en la l¨ªnea po¨¦tica y reflexiva sobre el arte y la pintura es el v¨ªdeo de Jaume Pitarch, en el que el artista barre una gran nave industrial levantando tal cantidad de polvo que desaparece casi la visi¨®n del espacio. El v¨ªdeo muestra lentamente c¨®mo el polvo vuelve a depositarse en el suelo, aclarando de nuevo la vista. En una l¨ªnea tambi¨¦n l¨ªrica podr¨ªa situarse el v¨ªdeo de Sergio Prego, que juega con explosiones de humo de colores que redefinen el espacio.

Vicente Blanco combina dibujo y v¨ªdeo de creaci¨®n en una narraci¨®n centrada en espacios urbanos, como hace tambi¨¦n en sus fotograf¨ªas y v¨ªdeos Sergio Belinch¨®n. Por la instalaci¨®n han optado Manu Muniategiandikoetxea y Jacobo Castellano, mientras que Daniel Verbis se centra en una pintura expandida en todas las paredes del espacio. Pierre Gonnord, en cambio, opta por la fotograf¨ªa, con retratos expresivos de personas an¨®nimas con un largo pasado a sus espaldas.