El aprendizaje de Evo Morales
El presidente boliviano comienza a afrontar las dificultades de gobernar
El sue?o de ser presidente de Bolivia del l¨ªder cocalero Evo Morales, convertido ya en realidad, empieza a perder parte del deslumbre inicial ante la complejidad del poder. Tal vez por ello, la primera lecci¨®n aprendida en estas cuatro semanas en el Gobierno, tanto por Morales como por sus colaboradores, es que las cosas no son iguales cuando se est¨¢ dentro, o como dice el dicho boliviano, "otra cosa es con guitarra".
As¨ª lo ha entendido la ciudadan¨ªa, que ten¨ªa grandes expectativas por las medidas prometidas en la campa?a electoral por el primer presidente ind¨ªgena de Bolivia y que se dejan para m¨¢s tarde, ante una cautela pol¨ªtica asumida tambi¨¦n por sus colaboradores. No en vano, el Gabinete, integrado equilibradamente por despose¨ªdos, l¨ªderes sindicales y profesionales, son todos debutantes en las labores de gobierno en el pa¨ªs menos desarrollado de la regi¨®n.
Adem¨¢s de la reducci¨®n de sueldos del Ejecutivo, que se ha hecho extensivo al Legislativo, el presidente Morales ha enviado al Parlamento un proyecto de ley para la convocatoria de una Asamblea Constituyente, como muy tarde en junio, con el mandato de definir la nueva Bolivia.
El proyecto, que en principio iba a ser considerado con otros dos m¨¢s de la anterior legislatura, ya ha motivado protestas porque muchos sectores sociales desean hacer aportaciones al futuro texto constitucional. Este proyecto ha despertado viejas querellas y disputas regionales, con posiciones dif¨ªcilmente reconciliables en un asunto muy relacionado: el referendo auton¨®mico, un proyecto respaldado por las ¨¦lites de Santa Cruz, la provincia de mayor poder econ¨®mico del pa¨ªs.
Algunos de los analistas consultados consideran que Morales prefiere dejar que sea la Constituyente la que defina los grandes cambios en la estructura econ¨®mica, pol¨ªtica y social del pa¨ªs.
Los hidrocarburos
De momento, en la estrat¨¦gica ¨¢rea de los hidrocarburos (en la que exist¨ªa la promesa electoral de su nacionalizaci¨®n) las negociaciones con las empresas petroleras extranjeras se desarrollan en un clima de cordialidad, seg¨²n el ministro Andr¨¦s Soliz Rada, conocido antes de llegar al Ejecutivo por su animadversi¨®n a las multinacionales. El ministro desminti¨® la existencia de una supuesta conspiraci¨®n de las petroleras para derrocar a Evo Morales.
El Gobierno prepara nuevos reglamentos para "mejorar la fiscalizaci¨®n" de los hidrocarburos (es decir, el incremento de las tasas) y para revisar los precios y los costos del gas, seg¨²n el presidente de Yacimientos Petrol¨ªferos Fiscales Bolivianos, Jorge Alvarado, que en m¨¢s de una ocasi¨®n destac¨® la predisposici¨®n de las empresas petroleras a reanudar su programa de inversiones en cuanto concluyan las negociaciones de los nuevos contratos.
Morales se ha movido mejor en su campo. El octavo congreso de productores cocaleros de Chapare le ha ratificado como su m¨¢ximo l¨ªder -aunque ello contraviene la actual Carta Magna y los estatutos sindicales- y ¨¦l ha consolidado su vieja pelea para que cada familia tenga un cato de coca en los lugares vetados por la ley antidroga. Ya no es cada familia, sino cada uno de los 45.000 afiliados a las seis federaciones del tr¨®pico quien podr¨¢ cultivar 1.600 metros cuadrados.
Morales anunci¨® que se revisar¨¢ la ley antinarc¨®ticos, una de las m¨¢s duras, pues niega el principio de inocencia, y comenzar¨¢ una campa?a internacional para sacar a la hoja de coca de la lista de estupefacientes que tiene la Convenci¨®n de Viena. Aunque ya sabe que "otra cosa es con guitarra", lo que le gusta es emular a sus amigos Hugo Ch¨¢vez y Fidel Castro en la extensi¨®n de sus discursos. Ya pronunci¨® uno de cuatro horas y media de duraci¨®n.
![El presidente boliviano, Evo Morales, durante el congreso de cocaleros en Cochabamba, el pasado d¨ªa 11.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/RL4DHZVWMYFZJ7OJY6RPXBUID4.jpg?auth=06df419ea2397f18ba74e55f53293d14127c87998b995049977eaf27a8c24dec&width=414)
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