La polic¨ªa entra en competici¨®n

Austria pas¨® de la alegr¨ªa a la verg¨¹enza entre la noche y la madrugada del domingo. Sus saltadores Thomas Morgenstern y Andreas Kofler ganaban por primera vez el oro y la plata para su pa¨ªs desde sus Juegos de Innsbruck, en 1976, pero poco despu¨¦s la polic¨ªa entraba en las habitaciones de los t¨¦cnicos y de diez compa?eros fondistas, seis esquiadores y cuatro biatletas (tiradores) en Pragelato y Cesana San Sicario.

Una veintena de carabinieri, por orden de la Fiscal¨ªa de Tur¨ªn, debutaban as¨ª en la competici¨®n, un hito en la historia ol¨ªmpica, avisados por el propio COI de que tambi¨¦n iba a hacer controles de orina por sorpresa, cuyos resultados se sabr¨¢n en dos d¨ªas. La polic¨ªa buscaba rastros de dopaje, pero sobre todo a un ex t¨¦cnico, Walter Mayer, sancionado por sus pr¨¢cticas sangu¨ªneas en la cita de Salt Lake City 2002.

Ni aparecieron productos dopantes ni Mayer, que est¨¢ en busca y captura porque la ley italiana de 2000 persigue tambi¨¦n a quien "favorezca el uso de productos y sustancias prohibidas". Se ha comprobado que tiene alquilado un apartamento en las proximidades de la residencia austriaca y hay testigos que aseguran haberle visto hace unos d¨ªas antes de regresar a Austria. El fondo austriaco gan¨® con ¨¦l sus primeras medallas n¨®rdicas en los Juegos de Nagano 98, el oro en el relevo por equipos de los Mundiales de 99 y dos medallas ol¨ªmpicas m¨¢s en 2002, cuando se descubrieron sus m¨¦todos. Dos de sus atletas, Marc Mayer, su hijo, y Achim Walter, entraron en la lista de sancionados por transfusi¨®n sangu¨ªnea que completaron con sus variantes de EPO medallistas como el hispano-alem¨¢n Johann Muehlegg y las rusas Larissa Lazutina y Olga Danilova. Mayer dijo entonces que las pr¨¢cticas efectuadas con aparatos en el chalet del equipo austriaco en Utah eran s¨®lo con fines terap¨¦uticos. Pero nadie le crey¨® y su sanci¨®n terminar¨¢ despu¨¦s de los Juegos de Vancouver 2010. La Federaci¨®n Internacional de Esqu¨ª le suspendi¨® primero a perpetuidad y luego a diez a?os, acorde con el COI, pero, a sus efectos, s¨ª est¨¢ libre tras decidir un tribunal civil de Innsbruck el t¨¦rmino de su sanci¨®n en 2005 y que incluso se le indemnizara y se le readmitiera a principios de este a?o.

"Este hombre nos desaf¨ªa", ha llegado a decir Jacques Rogge, el presidente del COI, que tuvo noticias a trav¨¦s de sus informadores-confidentes de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) de que estaba otra vez con el equipo ol¨ªmpico austriaco y que su fotograf¨ªa aparec¨ªa incluso en un cartel de propaganda del de biatl¨®n. Sospechosamente, dos de los mejores fondistas austriacos, Hoffmann y, sobre todo, Botwinov, s¨¦ptimo en los 30 kil¨®metros el d¨ªa 12, se fueron despu¨¦s de la prueba de los Juegos. El Comit¨¦ Ol¨ªmpico de Austria, que, en principio, se quej¨® de que se tratase como delincuentes a su delegaci¨®n, anunci¨® despu¨¦s que investigar¨ªa si Mayer ha estado con el equipo, pues no estaba contratado ni hab¨ªa contactos con ¨¦l. M¨¢s tarde reconoci¨® que hab¨ªa dormido una noche con "sus chicos", pero como particular, y que ya no sab¨ªa d¨®nde estaba. Eso s¨ª, se cur¨® en salud oficial hablando de su "tolerancia cero" ante el dopaje y apoyando la pol¨ªtica del COI y de la AMA.