"La estrategia del PP con las v¨ªctimas es partidista y de poder"

Ma?ana se cumplen seis a?os del asesinato del dirigente socialista y ex vicelehendakari Fernando Buesa y de su escolta, Jorge D¨ªez. La viuda de Buesa, Natividad Rodr¨ªguez, afronta esa fecha dif¨ªcil y analiza el papel de las v¨ªctimas en un eventual proceso de paz.

Pregunta. ?Cu¨¢l es su estado de ¨¢nimo ante el aniversario?

Respuesta. El mes de febrero es para m¨ª una pesadilla. En realidad, empieza en Navidades, que son muy duras, y ya s¨¦ que hasta que no pasa febrero tendr¨¦ un nubarr¨®n encima. Por muchos a?os que pasen.

P. ?El juicio y condena de los asesinos ha cambiado algo?

R. S¨ª, me alivia, no por venganza, sino porque quiero justicia, por mis hijos y mis nietos, por Fernando, por los amigos, por la sociedad, por todos.

"No fui al congreso de v¨ªctimas de Valencia porque en el anterior, al que asist¨ª ilusionada, me sent¨ª utilizada"

P. No quiso ir a los juicios de los asesinos de su marido.

R. No. Estaba el abogado de la familia y yo conf¨ªo en la justicia. No quer¨ªa hacerme m¨¢s da?o, ni envenenar mis sentimientos. Bastantes malos ratos tengo, as¨ª que me evito m¨¢s y no tengo ning¨²n inter¨¦s en ver a esas personas.

P. ?C¨®mo vive todo el ruido en torno a las v¨ªctimas?

R. Lo vivo mal desde hace tiempo ya. Parece que el enemigo com¨²n de Gobierno y oposici¨®n era ETA s¨®lo mientras gobernaba el PP. No niego lo que hicieron, pero fue con el apoyo del PSOE, que no se olvide. Todo cambia cuando el 14-M pierden las elecciones. Me sabe muy mal que su actitud ahora sea deslegitimar al Gobierno, me parece franca mente sucio.

P. ?Se equivoc¨® el presidente del Gobierno al no acudir al congreso de v¨ªctimas en Valencia?

R. No s¨¦ por qu¨¦ no ir¨ªa el presidente, pero yo tampoco fui. Asist¨ª hace dos a?os y no me gusta que me manipulen. Me desilusion¨® mucho y me sent¨ª utilizada. Las v¨ªctimas no fueron las protagonistas y todo fue a mayor gloria de Aznar y sus ministros. Volv¨ª absolutamente desfondada.

P. Pero los grandes colectivos de v¨ªctimas parecen m¨¢s cerca del PP que del Gobierno.

R. Yo comprendo la rabia acumulada de las v¨ªctimas por muchos a?os de olvido. Otra cosa es lo que hace el PP, hostigar desde fuera esos sentimientos leg¨ªtimos para fomentar la divisi¨®n y tratar de ganar votos. Eso es una estrategia exclusivamente partidaria, trazada en claves de poder, que se explica por su derrota el 14-M y que el PP no va a variar hasta que verifique su resultado en unas elecciones, si antes no hay acontecimientos que la echen abajo, como un final de ETA.

P. ?C¨®mo se sit¨²a ante ese eventual fin del terrorismo?

R. Creo que ETA ha interiorizado ese final y que no tiene marcha atr¨¢s. La clave, por tanto, no es el qu¨¦, sino el c¨®mo y no s¨®lo en relaci¨®n con las v¨ªctimas, sino con la sociedad entera: ETA tiene que salir derrotada, porque si no, no nos vamos a poder mirar a la cara, no podremos construir una sociedad decente. A m¨ª me parece clar¨ªsimo que tiene que haber vencedores y vencidos, esto no se puede acabar en un empate.

P. ?Qu¨¦ papel deben tener las v¨ªctimas en un proceso de paz?

R. Se nos debe o¨ªr y consultar y podemos opinar a t¨ªtulo individual y defender nuestro significado pol¨ªtico. Otra cosa es usurpar la representaci¨®n de un colectivo para apoyar a un partido. Las asociaciones est¨¢n para defender la dignidad y la memoria de todas las v¨ªctimas, no para marcar la pol¨ªtica de los Gobiernos. Y este Gobierno tiene legitimidad para intentar la paz, como la tuvo el del PP y le apoyamos. Es una cuesti¨®n de confianza en el sistema y en que las decisiones de los pol¨ªticos tendr¨¢n siempre un soporte ¨¦tico, m¨¢s a¨²n ante un problema como ¨¦ste.

P. ?Y c¨®mo se da ese papel pol¨ªtico a las v¨ªctimas sin a la vez utilizarlas pol¨ªticamente?

R. Con el Estado de derecho por delante, con el acuerdo del Congreso de los Diputados que exige un cese definitivo de las armas para abrir un proceso de paz. Si eso no fuera as¨ª, yo me sentir¨ªa enga?ada, pero en tanto eso no ocurra, yo tengo que creer que el Estado de derecho y la democracia van a funcionar y que no pueden funcionar en contra de las v¨ªctimas. Que no puede haber ahora un cambalache de paz por presos.

P. ?Cuando dice ahora quiere decir que es cuesti¨®n de tiempo?

R. Estoy convencida de que los sentimientos de las v¨ªctimas cambiar¨¢n una vez nos aseguremos la paz. Primero tienen que dejar las armas y arrepentirse. Despu¨¦s, cuando llevemos a?os sin violencia, hayan entregado las armas, se levanten las escoltas, la gente viva libre, los que se han ido puedan volver y no haya miedo de que te quemen la empresa y tus hijos puedan hablar con naturalidad de todo, entonces, podr¨¢n contemplarse otras cuestiones, sin necesidad de que sea el perd¨®n de las penas, porque impunidad no puede haber. Lo que sienten ahora las v¨ªctimas no ser¨¢ lo mismo despu¨¦s de 10 a?os de paz, pero los terroristas quieren empezar por el final.