La isla
El se?or Marx escribi¨® algunos apuntes de gran inter¨¦s geopo¨¦tico. Por ejemplo, la idea de que la esfera terrestre tiene el centro en todas partes. A veces ese centro elige un lugar de apariencia rec¨®ndita para posarse. Si uno entra en la r¨ªa de Vigo y avanza hacia su vientre se encontrar¨¢ con uno de esos microcosmos. La isla de San Sim¨®n. El centro del universo, en este caso, mide 250 metros de largo por 84 de ancho. Un paisaje de trazo oriental en el occidente atl¨¢ntico.
Por los datos que disponemos, naci¨® de la imaginaci¨®n er¨®tica de las aguas. La primera noticia es un poema de los Cancioneiros, atribuido a un trovador llamado Meendinho, que oculta una voz inequ¨ªvoca de mujer. Es algo muy sutil. M¨¢s que un poema de amor es un poema que te hace el amor mientras lo lees. La isla misma, cercada por las olas, en un cadencioso orgasmo.
Todo lo que ha sucedido en el mundo ha sucedido aqu¨ª. Habitada por Templarios. Convento de Franciscanos. Nido de piratas. Escenario de la batalla por el ¨²ltimo gran tesoro del Imperio espa?ol, en 1702, cuando ingleses y holandeses arrinconaron en la r¨ªa a "la flota m¨¢s rica que se ha confiado jam¨¢s al azar de las olas".
En el siglo XIX fue lazareto de leprosos. En 1936, y mientras dur¨® la guerra, la isla se convirti¨® en campo de concentraci¨®n de prisioneros. Al principio, atestado, 45 cent¨ªmetros por persona. El centro de la esfera, el microcosmos, coincidi¨® con el infierno. La bella isla ocultaba una factor¨ªa de cad¨¢veres. Para el proyecto Memoria recobrada, hemos estado all¨ª con supervivientes. Todos los testimonios coinciden en un recuerdo imborrable. No ten¨ªa que ver con las condiciones infrahumanas, sino con las palabras. Los mandamientos, seg¨²n el siniestro padre Nieto. Los iba enumerando y al llegar al quinto dec¨ªa a los presos: "No matar¨¢s. Pues bien. Ah¨ª vamos a hacer una excepci¨®n". La excepci¨®n con el quinto. Matar por las ideas. El signo atroz de la historia de Espa?a.
Ahora la isla ha vuelto a los brazos de Meendinho. ?Viva el quinto mandamiento!
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