El acusado confund¨ªa la existencia de Dios con la necesidad de ser perdonado

Los graves problemas de conciencia que sufr¨ªa Jorge R. se fueron transformando en una idea obsesiva de matar. Era la ¨²nica forma de ser perdonado, dado "el claro confusionismo que tiene entre la existencia de Dios, su juicio y la necesidad de ser perdonado".

En su cabeza no paraba de repetirse que no era lo mismo desear matar que matar. "Con esta presi¨®n baj¨® al metro [el pasado 4 de octubre] y de forma impulsiva empuj¨® a una muchacha [Miriam Alonso] que se encontraba en el and¨¦n a la v¨ªa. Se trataba de una persona a la que no conoc¨ªa y contra la que no le un¨ªa ni rencores, ni odios, ni venganzas o relaci¨®n hist¨®rica al-guna", a?ade Garc¨ªa-Andrade.

El cambio de actitud tambi¨¦n se vio acompa?ado de un notable incremento de peso. Pas¨® de 87 kilos a 110. "El paciente tambi¨¦n refiere que ser¨ªa bueno que se le matase a ¨¦l para as¨ª perdonar a quien le matara", concluye la Cl¨ªnica M¨¦dico Forense.

Los tres grupos de especialistas coinciden en el diagn¨®stico. Jorge R. sufre esquizofrenia de tipo paranoide. Este trastorno se caracteriza por la aparici¨®n de ideas delirantes y alucinaciones. A ello se unen conductas impulsivas que escapan al control de la personalidad.

Y tambi¨¦n llegan al mismo final: Jorge no puede ser imputado por el ataque a Miriam Alonso, ya que "no existe relaci¨®n entre el delito imputado y el trastorno psicopatol¨®gico, ya que ocurre dentro de la trama delirante del imputado". "Lo anterior conlleva una limitaci¨®n completa de su capacidad de autocontrol en relaci¨®n con los hechos", finaliza el informe.

Garc¨ªa-Andrade solicita que el paciente sea recluido en un centro psiqui¨¢trico con vigilancia y no internado en una prisi¨®n como ocurr¨ªa en el siglo XIX. Y a?ade: "Las pastillas no lo son todo. No son las ¨²nicas formas de controlar la peligrosidad de estos enfermos".

Jorge R. est¨¢ ingresado desde el pasado 6 de octubre en el centro penitenciario Madrid V, en Soto del Real.