Para toda la familia

Vest¨ªa cazadoras deportivas, pero no eran las t¨ªpicas. Una ten¨ªa un estampado propio de una chaqueta, otra luc¨ªa cordoner¨ªa de h¨²sar, casi siempre una camisa blanca por debajo. Estilo neo-hip-hop para quienes no quieren parecer seguidores de libro. Igual que su m¨²sica, hip-hop para casi todos los gustos, espect¨¢culo m¨¢s all¨¢ de los lugares comunes y una secci¨®n de cuerda conviviendo con un disc-jockey para visualizar, a la postre m¨¢s que para escuchar, c¨®mo Kanye West se sale de los m¨¢rgenes t¨®picos y define un hip-hop abierto al soul, al pop, al funk y al rhythm and blues. La nueva mirada.

Pas¨® por Barcelona dejando claro que ¨¦l s¨ª puede ir m¨¢s all¨¢ y asentar el hip-hop entre el p¨²blico sin filiaci¨®n. Cierto que cuando entraba la cuerda el batiburrillo de sonido era notable, cierto tambi¨¦n que por momentos falt¨® la pegada, contundencia y energ¨ªa de un concierto de hip-hop a secas, pero incluso en eso Kanye West mostr¨® recursos y tir¨® de un espl¨¦ndido Common para dejar a su protegido lucirse con tres temas. Sensacional The light, en b¨¢sica clave gramatical de hip-hop. Uno de los momentos del concierto, sin duda.

El resto los protagoniz¨® un Kanye West plet¨®rico que tiene en sus espl¨¦ndidas piezas la mejor baza. Pronto fundi¨® los plomos a la audiencia con la maravillosa Heard'em say, antesala de un concierto que tuvo marcado acento mel¨®dico, una puesta en escena correcta aunque no imaginativa y la velada promesa de que el hip-hop puede salir de los recintos de la militancia para instalarse en la vida de las personas m¨¢s alejadas de la palabra rimada.