Al¨¦rgicos a la huelga
El padre de una escolar de Ir¨²n relata c¨®mo est¨¢ afectando el paro de limpieza a su salud
Sara tiene los brazos y las rodillas en carne viva y no puede dejar de rascarse. A sus 11 a?os, su problema no son las alergias que le amargan cada primavera, sino la huelga de las 58 trabajadoras de Eulen y Clece, encargadas de limpiar los edificios municipales de Ir¨²n, para exigir su equiparaci¨®n salarial con las funcionarias. "Las aulas de la ikastola est¨¢n tan sucias que se le ha acelerado el proceso. Anda todo el d¨ªa con el baile de San Vito", explica Gorka, su padre.
Gorka y Sara han preferido ocultarse tras un nombre supuesto y no desean ser fotografiados. No quieren "follones" por criticar que las instituciones han enfocado mal el conflicto desde el principio. "Entiendo que no es justo que una cobre 1.000 euros y la de al lado 1.500, pero yo soy obrero y he hecho mil huelgas", dice Gorka. "Este derecho no tendr¨ªa por qu¨¦ chocar con los derechos a la educaci¨®n y la salud, pero est¨¢ pasando y los paganos son los ni?os". Para ir a clase, Sara viste ropa que le cubre por completo piernas y brazos. "Le da verg¨¹enza que sus compa?eros le vean".
Medio centenar de menores padecen ya asma, alergias y problemas de piel
Los centros p¨²blicos de Primaria y la residencia de ancianos Ama Xantalen est¨¢n soportando molestias que superaron hace mucho lo meramente est¨¦tico. Tras 61 d¨ªas de huelga, el polvo se acumula en las aulas; las bolsas de chucher¨ªas, papeles y otros restos de basuras, en patios y pasillos. Ya hay medio centenar de menores con problemas de asma, alergias y afecciones de piel como Sara. El m¨¦dico le ha diagnosticado "dermatitis at¨®pica en flexuras de codos, rodillas y abdomen con importante componente inflamatorio muy pruriginoso" y le ha recetado antihistam¨ªnicos y corticoides. "Crea dependencia y as¨ª no se est¨¢ atacando la causa", se lamenta su padre.
"Decimos que tenemos la mejor sanidad y el mejor sistema educativo de Espa?a y cuando hay un conflicto no lo quieren atajar por una solidaridad mal entendida". Y cita al m¨¦dico, que se neg¨® a incluir en su informe cualquier alusi¨®n al paro como causa de la enfermedad. O algunos docentes: "No se les puede decir a los ni?os 'no recojas ese papel porque fastidiamos a las de la huelga'. Ahora que tanto se habla del problema de los residuos, deber¨ªamos aprovechar para inculcarles que no es limpio el que limpia, sino el que no ensucia. Si siguen as¨ª, a ver qui¨¦n les obliga a ser cuidadosos tras el paro".
Gorka se siente "indefenso" ante la situaci¨®n. La protesta se alarga y nadie le da soluciones. Por eso, ha llegado a proponer, sin ¨¦xito, a la direcci¨®n que cierre el centro y recupere en verano los d¨ªas perdidos. "El problema es que no sabemos lo que durar¨¢ la huelga".
El Ayuntamiento decidir¨¢ la pr¨®xima semana si asume la limpieza de todos los edificios municipales y convoca una oferta p¨²blica de empleo para cubrir las plazas. "No ha sabido encauzar el problema y ahora toma decisiones a la brava".
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