La econom¨ªa catalana atrapa el ritmo de crecimiento espa?ol y se sit¨²a en el 3,3%

Cuando a la econom¨ªa espa?ola le va bien, a la catalana le va a¨²n mejor. Eso es lo que ha venido sucediendo hist¨®ricamente, con la excepci¨®n del ¨²ltimo ciclo expansivo, que empez¨® en 1995. Sin embargo, a la luz de los ¨²ltimos datos de coyuntura, ese patr¨®n de comportamiento vuelve a ser una realidad. El producto interior bruto (PIB) catal¨¢n crecer¨¢ este a?o el 3,3%, lo mismo que el conjunto de la econom¨ªa espa?ola. La cifra definitiva puede estar incluso algo por encima: el consejero de Econom¨ªa y Finanzas, Antoni Castells, calific¨® las previsiones de "prudentes" y se marc¨® el objetivo de "superar ligeramente" el crecimiento econ¨®mico del conjunto de Espa?a a lo largo de 2006. "Hay motivos para pensar que esa ser¨¢ la constante durante los pr¨®ximos a?os", dijo.

Catalu?a tiene problemas con el diferencial de precios, la elevada temporalidad laboral y la escasa productividad

Las previsiones pasan por una mejor¨ªa del sector exterior, con un alza de las exportaciones del 5,1% en 2006

El consejero de Econom¨ªa adelanta que presentar¨¢ en breve un paquete de medidas para combatir la inflaci¨®n

Durante el a?o pasado, la econom¨ªa catalana creci¨® tambi¨¦n el 3,3%, una d¨¦cima por debajo de la espa?ola, pero 2,5 veces m¨¢s que la zona euro. Para este ejercicio, Econom¨ªa empieza a vislumbrar un cambio en el patr¨®n de crecimiento: una ligera lentificaci¨®n de la demanda interna -y una desaceleraci¨®n de la construcci¨®n- compensada por una ligera mejora del sector exterior, la industria y los servicios. Castells lanz¨® ayer un mensaje de "moderado optimismo" por la consolidaci¨®n de la etapa expansiva de la econom¨ªa catalana -en la que ha tenido un papel preeminente la llegada masiva de inmigrantes-, y por los cambios en la composici¨®n de ese crecimiento.

El consejero no escondi¨® que a la econom¨ªa catalana le quedan a¨²n "ex¨¢menes pendientes". Los de siempre: un elevado diferencial de inflaci¨®n con Espa?a y Europa; el escaso crecimiento de la productividad, y la elevada temporalidad en el mercado de trabajo. Esos son los tres retos que subray¨® Castells, a los que hay que a?adir el desequilibrio exterior: el d¨¦ficit comercial seguir¨¢ creciendo a lo largo de 2006, pese a que su aportaci¨®n al PIB ser¨¢ menos negativa que el a?o pasado.

Alza de precios

Castells adelant¨® que Econom¨ªa y Finanzas prepara un plan de choque contra la inflaci¨®n. El alza de precios alcanz¨® el 4,3% en febrero respecto al mismo mes del a?o anterior, y el diferencial con Espa?a (medio punto en 2005) y sobre todo con la zona euro (2,7 puntos ese mismo a?o) supone un mazazo para la productividad catalana un ejercicio tras otro. La Generalitat prev¨¦ que la inflaci¨®n se modere en 2006 y se sit¨²e en torno al 3,9% a final de a?o debido al repunte de los tipos de inter¨¦s, la contenci¨®n del consumo de los hogares y a la previsible moderaci¨®n de los precios del petr¨®leo tras la escalada de 2005.

Econom¨ªa y Finanzas no quiso avanzar las medidas del plan de choque, aunque advirti¨® de que el ¨¢mbito de actuaci¨®n del Gobierno aut¨®nomo "es muy limitado", puesto que la pol¨ªtica monetaria est¨¢ en manos del Banco Central Europeo (BCE), mientras que aspectos importantes como la regulaci¨®n del mercado laboral y de los servicios dependen de la Administraci¨®n central. Aun as¨ª, adelant¨® que el plan se basar¨¢ en el estudio que un grupo de expertos realiz¨® en 2005, presentado en julio del a?o pasado.

Inflaci¨®n y comercio

Los expertos identificaron entonces problemas relacionados con la atomizaci¨®n de la estructura comercial, la menor presencia de hipermercados y los altos costes laborales y del transporte, entre otros factores, y lanzaron un paquete de 27 medidas para solucionar problemas estructurales de la econom¨ªa catalana. El informe origin¨® una marejada en el Gobierno aut¨®nomo: el consejero de Comercio, Josep Huguet, asegur¨® que su departamento preparar¨¢ un informe -a¨²n no presentado- para demostrar que el diferencial de precios no se debe a la estructura comercial.

Acompa?ado del secretario general de Econom¨ªa, Andreu Morillas, y la directora general de Programaci¨®n Econ¨®mica, Maria Ant¨°nia Mon¨¦s, el consejero hizo hincapi¨¦ en la mejora prevista para el sector industrial -con un fuerte impuso de la inversi¨®n en este sector- y de la reactivaci¨®n de las exportaciones.

En 2004, las ventas al exterior crecieron el 2,1%, y en 2005 el 4,1%, mientras que este a?o la previsi¨®n sit¨²a el alza de ventas al exterior por encima del 5%. En 2006 las previsiones son a¨²n mejores, lo que permitir¨¢ reducir la contribuci¨®n negativa del sector exterior del 1,9% actual al 1,2%, gracias a la mejor¨ªa de las principales econom¨ªas europeas -Francia y Alemania son los dos grandes compradores de productos catalanes- y la estabilizaci¨®n del precio del petr¨®leo.

A juicio de Castells, los datos demuestran que la econom¨ªa catalana est¨¢ inmersa en un proceso de transformaci¨®n, y que es necesario aprovechar el momento dulce que atraviesa para introducir reformas estructurales que garanticen un crecimiento "sano y estable" en el futuro. Apunt¨® a la necesidad de incrementar el peso de los sectores de alto contenido tecnol¨®gico -cuyas exportaciones crecieron el 19% en 2005- y a aumentar el peso de la inversi¨®n en Investigaci¨®n y Desarrollo (I+D), situada en un magro 1,3% del PIB, frente a una tasa del 1,9% en la zona euro.

La productividad es otro tal¨®n de Aquiles de la econom¨ªa catalana: en 2005 creci¨® el 0,6%, el doble que la espa?ola (0,3%), pero tambi¨¦n lejos de la UE (1%) y de EE UU (1,9%).