Bollywood, como la vida

El mundo, constat¨® Fernando Villal¨®n, se divide en dos: Sevilla y C¨¢diz. Pero tambi¨¦n en quienes no pueden ni respirar sin cine Bollywood y quienes lo consideran deleznable. El descubrimiento en Espa?a del cine popular indio est¨¢ sin duda en el origen de la publicaci¨®n de esta novela, titulada Show Business y editada all¨¢ en 1991, dos a?os despu¨¦s de La gran novela india (Akal, 2002). Si en aquel libro Sashi Tharoor (1956) abordaba la base mitol¨®gica de la vida cotidiana india, en Bollywood opta por la comedia cargada de cr¨ªtica: a ratos tiende a lo esperp¨¦ntico, a ratos al humor insinuado. Lo m¨¢s flojo son las narraciones de supuestas pel¨ªculas tipo Bollywood, aunque esos guiones desaforados no est¨¢n exentos de gracia gui?olesca: un poquito largos, aunque un elemento clave en ese cine es que la cosa sea larga y que las paisas invertidas salgan rentables. Pero en un libro la cosa cae en la reiteraci¨®n. En cambio, Tharoor brilla en la evoluci¨®n del protagonista, Ashok Banjara, un pijo que cae en la industria del cine y trepa a lo m¨¢s alto a base de rodar varias producciones simult¨¢neas y a no saber nunca a ciencia cierta d¨®nde est¨¢ pero ce?irse siempre al perfecto ego¨ªsmo: se nos narra su auge y ca¨ªda. Y sobre todo Tharoor brilla en los personajes colaterales. As¨ª va edificando un buen fresco sobre la India, con grandes logros en lo mal¨¦volo de la cr¨®nica rosa o en lo teatral de un marco pol¨ªtico o religioso que se suele nutrir del endiosamiento de los actores y actrices famosos de Bollywood. La novela es un ejemplo de c¨®mo los escritores indios de hoy son herederos de esa tradici¨®n brit¨¢nica de Sterne, Fielding, Dickens... que viene en buena medida de Cervantes y el Siglo de Oro espa?ol. Y de que Bollywood lleva a cuestas toda la peripecia isabelina.