Zapatero encarga a las fuerzas de seguridad y al CNI la verificaci¨®n del alto el fuego de ETA

El presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, ha encargado a las fuerzas de seguridad del Estado y al Centro Nacional de Inteligencia (CNI) que verifiquen si el "alto el fuego permanente" decretado por ETA a partir del pasado viernes tiene car¨¢cter "total y definitivo". Adem¨¢s de constatar la ausencia de atentados y de actos de violencia callejera, lo que resulta m¨¢s evidente, los servicios de informaci¨®n ya est¨¢n midiendo la actividad de la banda en materia de reclutamiento, instrucci¨®n, aprovisionamiento y financiaci¨®n. Este ¨²ltimo es, seg¨²n los expertos, "el punto m¨¢s delicado".

"El Gobierno trabaja ya en constatar que estamos ante un alto el fuego permanente que signifique el fin definitivo y total de la violencia", dijo el martes Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, tras reunirse con el l¨ªder del PP, Mariano Rajoy. El primer encargo del presidente a los servicios de informaci¨®n del Estado ha sido, precisamente, verificar el alcance y el grado de cumplimiento del anuncio de ETA. La expresi¨®n "alto el fuego permanente", utilizada por la banda en los dos comunicados difundidos los pasados d¨ªas 22 y 23 de marzo, es lo bastante ambigua como para admitir distintas interpretaciones.

Los expertos dan por sentado que el anuncio incluye el cese de las "acciones militares"; pero no necesariamente de la violencia callejera (kale borroka) y las extorsiones econ¨®micas (impuesto revolucionario) a empresarios.

A pesar de ello, las fuentes consultadas no creen que se produzca un repunte de la violencia callejera, como sucedi¨® durante la tregua de 1998-1999, m¨¢s all¨¢ de alg¨²n incidente aislado, ya que el Gobierno ha dejado claro que condiciona el inicio de las negociaciones al cese de toda forma de violencia y no ser¨ªa l¨®gico renunciar a los atentados y poner en peligro el proceso con actos de puro gamberrismo.

En su opini¨®n, la izquierda abertzale apostar¨¢, al menos a corto plazo, por la movilizaci¨®n de masas. El primer test ser¨¢ la manifestaci¨®n del s¨¢bado en Bilbao, convocada incluso antes de hacerse p¨²blico el alto el fuego.

1,5 millones al a?o

El "punto m¨¢s delicado", en opini¨®n de los expertos, es la extorsi¨®n a empresarios y profesionales. Zapatero ha insistido hasta la saciedad en que el proceso que se inicia ahora ser¨¢ largo y puede durar incluso "varias legislaturas". ETA, si se disuelve formalmente, s¨®lo lo har¨¢ al final. ?C¨®mo se mantendr¨¢ mientras tanto?

Adem¨¢s de los m¨¢s de 500 presos, sin duda el grupo m¨¢s numeroso, los expertos consideran que ETA cuenta con unos 150 militantes en Francia y un centenar en Suram¨¦rica, la mayor parte instalados en M¨¦xico.

Para sostener este complejo, agregan las fuentes consultadas, ETA requiere unos ingresos aproximados de 1,5 millones de euros al a?o. Para ello dispone de empresas legales en varios pa¨ªses, incluida Espa?a, como demuestran algunos de los sumarios instruidos por la Audiencia Nacional, pero la mayor¨ªa de los fondos proceden de la extorsi¨®n.

Seg¨²n datos facilitados por la agencia Vasco Press, las finanzas de ETA han estado en n¨²meros rojos en los dos ¨²ltimos a?os, lo que le ha obligado a consumir buena parte de sus reservas. En 2001, obtuvo casi 150.000 euros mensuales con el impuesto revolucionario, pero la recaudaci¨®n cay¨® espectacularmente en 2004, coincidiendo con la dr¨¢stica reducci¨®n del n¨²mero de atentados. Los expertos consideran que la campa?a de ataques a empresas realizada por ETA en v¨ªsperas del anuncio de la tregua no s¨®lo iba dirigida a demostrar su capacidad operativa, sino tambi¨¦n a "hacer caja".

?Qu¨¦ ocurrir¨¢ ahora? Las fuentes consultadas creen que la banda intentar¨¢ cobrar las cantidades pendientes, especialmente de quienes pactaron el fraccionamiento o aplazamiento de sus pagos. Est¨¢ por ver si mandar¨¢ nuevas remesas de cartas o amenazar¨¢ a los que no paguen. La experiencia demuestra que, sin actividad terrorista, la eficacia de la coacci¨®n se ve muy mermada.

Seg¨²n un estudio de Mikel Buesa, catedr¨¢tico de Econom¨ªa aplicada de la Universidad Complutense de Madrid, el 55,3% de los ingresos del entramado etarra en el periodo 1993-2002 proced¨ªa de subvenciones p¨²blicas, y s¨®lo el 21,7% de la extorsi¨®n. Pero el cese del fuego ha llegado tras la ilegalizaci¨®n de Batasuna, que ha dejado a dicha organizaci¨®n fuera de las instituciones democr¨¢ticas y sin los fondos derivados de sus resultados electorales. Su esperanza es que se le permita volver a los ayuntamientos y diputaciones tras las elecciones de mayo de 2007, aunque sea con una nueva marca, pero a¨²n falta m¨¢s de un a?o para ello y no tiene garant¨ªas de lograrlo.

Recorte de gastos

En cualquier caso, los expertos creen que ETA tendr¨¢ que aplicarse un "severo plan de ajuste econ¨®mico" para recortar gastos. Ello supone que se reducir¨¢, o casi desaparecer¨¢, el reclutamiento de nuevos terroristas, por lo menos de los ilegales que pasaban a la clandestinidad y quedaban a sueldo de la banda.

Tampoco es previsible que haya una gran actividad en materia de captaci¨®n de informaci¨®n, ya que ¨¦sta quedar¨ªa desfasada cuando la banda quisiera hacer uso de ella, como de hecho ha ocurrido en algunos atentados m¨¢s recientes contra empresas.

Pero este letargo, advierten los expertos, incluir¨¢ la actividad m¨ªnima indispensable para mantener la capacidad de la banda de volver a actuar, si el proceso fracasara. Si hay entrega de armas, reflexionan las mismas fuentes, s¨®lo ser¨¢ al final del proceso. Mientras tanto, ETA intentar¨¢ mantener en estado de uso sus arsenales estrat¨¦gicos, de los que se sospecha que conserva uno o dos en Francia.

La banda tambi¨¦n intentar¨¢ evitar las deserciones, de forma que eventuales salidas de presos o regreso de exiliados, especialmente quienes no tienen causas pendientes por delitos de sangre, se hagan "bajo control" y de manera ordenada.

La cohesi¨®n y la disciplina son condiciones indispensables para evitar el riesgo de descomposici¨®n. Por eso, el alto el fuego vino precedido de la ejemplar expulsi¨®n de algunos de los presos m¨¢s significados, como Pakito, tras la filtraci¨®n de una carta que criticaba a la direcci¨®n de la banda. "ETA no es un bloque monol¨ªtico, pero tampoco hay fisuras", sostienen los expertos.

Una escisi¨®n es lo ¨²nico que no conviene ni a los terroristas ni al Estado de derecho.