Los disidentes firman la paz

El enfrentamiento entre los grandes constructores con Bernie Ecclestone y la FIA ha concluido. El pacto de la concordia, que asegura el futuro de la f¨®rmula 1, se firmar¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas por las cinco escuder¨ªas disidentes (Renault, Honda, Toyota, McLaren-Mercedes y BMW), que no s¨®lo se han inscrito para participar en el Mundial de 2008, sino que est¨¢n cerrando los ¨²ltimos flecos, b¨¢sicamente econ¨®micos, con el patr¨®n. Ferrari, Williams, Midland, Red Bull, Toro Rosso y Super Aguri han firmado ya hasta 2012.

La cuesti¨®n principal que se dirime es qu¨¦ parte de lo que produce el circo debe repercutir en las escuder¨ªas. El montante del que se habla es de unos 900 millones de euros. Por los derechos de televisi¨®n, la mercadotecnia, los fijos que pagan los circuitos... Hasta ahora, los equipos recib¨ªan el 30% de estos ingresos, unos 270 millones. Pero la cifra les parece corta a los constructores, que invierten cada a?o cantidades entre los 300 y los 500 millones. Su exigencia era alta. Quer¨ªan un reparto del 80%, que no pasar¨¢ del 60%, de los beneficios anuales. Adem¨¢s, pretend¨ªan tener m¨¢s participaci¨®n en la gesti¨®n del negocio, que Ecclestone lleva con mano de hierro. As¨ª, amenazaron hace tres a?os con crear su propio campeonato en 2008, cuando conclu¨ªa el pacto. Ni Ecclestone ni Max Mosley, el presidente de la FIA, parecieron tom¨¢rselos en serio hasta que los disidentes comenzaron sus contactos.

La FIA pretende que los gastos de las escuder¨ªas no superen los 100 millones anuales

Los equipos recib¨ªan el 30% de los ingresos, quer¨ªan el 80% y ahora no pasar¨¢n del 60%

Entonces, Ecclestone dijo basta. Y cuadr¨® incluso a Mosley, que estableci¨® hasta el 31 de marzo para que todos los equipos se inscribieran en el Mundial de 2008. "Tenemos una larga lista de aspirantes. Tan s¨®lo los que hayan firmado podr¨¢n discutir las nuevas normas para ese a?o", argument¨® Mosley. Ese aspecto fue determinante para acelerar los acontecimientos. Todas las escuder¨ªas se sumaron al proyecto de 2008, al que podr¨ªa agregarse Paul Stoddart recuperando el nombre de Minardi.

El presidente de la FIA pretende devolver a la F-1 el esp¨ªritu aventurero. "Debemos reducir gastos y llevarlos a un m¨¢ximo de 100 millones. En estas condiciones, cualquier escuder¨ªa independiente puede ser competitiva. Si no cogemos este camino, corremos el peligro de que los constructores abandonen cuando no lo vean rentable y nos quedemos en la estacada".

Ecclestone comulga con esta filosof¨ªa, aunque es m¨¢s pragm¨¢tico. Sabe que ha creado un gigante que marca la punta tecnol¨®gica mundial y que eso s¨®lo seguir¨¢ siendo posible con la implicaci¨®n de las grandes marcas. Est¨¢ dispuesto a renunciar a parte de su poder y a repartir mejor el dinero. Todos los equipos han firmado un acuerdo por el que se comprometen a realizar 36 d¨ªas de test desde el primero hasta el ¨²ltimo gran premio de este a?o con la condici¨®n de que cuando prueben en circuitos de su pa¨ªs los d¨ªas contar¨¢n como medio y podr¨¢n realizar otros 12 d¨ªas de test aerodin¨¢micos en determinados trazados. Ferrari tiene un permiso especial para proseguir con los test del a¨²n motociclista italiano Valentino Rossi.

Este acuerdo se firm¨® en Bahrein. Y el pasado d¨ªa 24 la FIA convoc¨® ya a expertos de Ferrari, Cosworth y Renault, uno de los disidentes, para discutir las normas que regir¨¢n a partir de 2008: las especificaciones del motor tendr¨¢n una vigencia de cinco a?os, aunque algunos elementos podr¨¢n ser modificados; el cambio de marchas deber¨¢ durar cuatro grandes premios; habr¨¢ un solo fabricante de neum¨¢ticos, y cualquier cambio que deba efectuarse ser¨¢ penalizado con 15 kilos de peso y no perdiendo 10 plazas en la parrilla de salida. Adem¨¢s, el Mundial no podr¨¢ sobrepasar las 20 carreras. Pero las discusiones no han hecho m¨¢s que empezar. Y ahora los fabricantes (GPMA) tendr¨¢n mucho que decir.

Entre los 22 inscritos para 2008 figura un equipo espa?ol, el BCN, que ahora compite en la GP2, la categor¨ªa m¨¢s cercana a la F-1.