Una sucursal en cada esquina

A los extranjeros que visitan Espa?a les extra?an dos cosas: el n¨²mero de bares y el de oficinas bancarias. No es sorprendente, porque en Espa?a hay 12 sucursales por cada 10.000 habitantes mayores de 16 a?os, m¨¢s del doble que en la Uni¨®n Europea. Al cierre de 2005 hab¨ªa 42.000 oficinas, pero la m¨¢s sorprendente es que este a?o se ha anunciado la apertura de 1.000 sucursales m¨¢s por parte de bancos y cajas de ahorros.

Al principio de la d¨¦cada, el Santander y el BBVA redujeron su red de oficinas tras las fusiones y la creencia de que Internet quitar¨ªa importancia a la presencia f¨ªsica. Sin embargo, ahora la obsesi¨®n, de cajas y de bancos, es colocar oficinas en todas las esquinas. La raz¨®n es la ca¨ªda de tipos de inter¨¦s de los ¨²ltimos a?os, que ha provocado una reducci¨®n de los m¨¢rgenes de negocio. Para ganar lo mismo que antes es necesario duplicar el volumen de negocio.

A la vez, el boom inmobiliario y la llegada de m¨¢s de cuatro millones de inmigrantes, que en buena parte se han convertido en clientes bancarios, tambi¨¦n calienta esta fiebre. Ahora la obsesi¨®n es ganar, o al menos no perder, cuota de mercado. Las cajas se presentan en esta batalla con 8.000 oficinas m¨¢s que sus competidores. Los bancos les acusan de sacrificar la rentabilidad por ganar m¨¢s clientes aprovech¨¢ndose que no tienen la disciplina de la cotizaci¨®n en los mercados.

No obstante, a la vez que invierten en ladrillos, las entidades son conscientes de que el tel¨¦fono e Internet, en unos cinco a?os, restar¨¢n relevancia a la oficina. Por eso, el riesgo que existe es que si suben los tipos y la morosidad, podr¨ªa ser dif¨ªcil rentabilizar tanta sucursal.