"Nuestro estilo pausado nos desgasta menos"

Rodolfo Arruabarrena (Marcos Paz, Argentina; 1975) es tranquilo y silencioso, como reci¨¦n llegado del campo a la ciudad. Lo observa todo con la iron¨ªa de un superviviente en el crecimiento vertiginoso del Villarreal. Marc¨®, "por casualidad", los dos goles que han llevado al club castellonense, que ma?ana visitar¨¢ al Arsenal, a una cima s¨®lo imaginada por su presidente, Fernando Roig.

Pregunta. Dicen que es el m¨¢s listo de la plantilla.

Respuesta. No s¨¦ por qu¨¦.

P. Porque sigue en primera l¨ªnea en un equipo que ha cambiado mucho en seis a?os.

R. He respondido a la confianza de los t¨¦cnicos. Nadie te regala nada. Quedamos tres o cuatro del primer ciclo. Cada curso tienes nuevas responsabilidades. Uno quema etapas y se va adaptando a todo.

P. Un superviviente.

R. No; no hemos vivido ninguna tragedia. Me compraron en Segunda, en 1999, y cuando llegu¨¦, en junio de 2000, ya se hab¨ªa ascendido a Primera. En la primera temporada fuimos s¨¦ptimos. Sufrimos en la segunda y la tercera. Y en las dos ¨²ltimas peleamos arriba.

P. Se mete en pocos charcos.

R. Doy mi opini¨®n, pero no soy de meterme en problemas extrafutbol¨ªsticos o de fuera del vestuario. Dentro, s¨ª. He discrepado de los t¨¦cnicos, pero sin ponerme en contra. Hacemos el mismo trabajo.

P. Menotti, Bilardo, Passarella, Bielsa, Bianchi...

R. He aprendido mucho de Bianchi. M¨¢s como persona, cosas m¨¢s all¨¢ del f¨²tbol.

P. ?Qu¨¦ le pas¨® en el Atl¨¦tico?

R. A la larga, son los jugadores los que llevan al ¨¦xito al entrenador.

P. ?Se parece el Boca Juniors suyo a este Villarreal?

R. S¨ª. A los dos nos gusta el bal¨®n. Y compartimos a Riquelme, nuestro eje. All¨ª ten¨ªamos a Palermo como rematador y aqu¨ª los delanteros son m¨¢s din¨¢micos.

P. ?Est¨¢ Riquelme mejor?

R. Ha crecido en experiencia y f¨ªsico. Hace mayor desgaste, trabaja m¨¢s. Se echa el equipo al hombro. Sabe lo que quiere y lo busca.

P. ?Es de los cinco mejores?

R. S¨ª. Espero que lo pruebe en el Mundial. Los otros son Eto'o, Henry, Ronaldinho y Messi.

P. ?Qu¨¦ les cuenta a sus hijos de Maradona?

R. Estuve mucho con ¨¦l. Llegaba a entrenarse con el Ferrari o el Porsche y lo paraba en medio de la cancha. Un d¨ªa apareci¨® en un cami¨®n. Siempre estaba a disposici¨®n del grupo. Y, luego, los jueguitos del entretiempo, como Ronaldinho. ?De d¨®nde sacan eso? Meten la pelota por todos lados. Si uno lo hace, se puede desgarrar.

P. El Villarreal imprime un estilo pausado.

R. Es un ritmo suramericano. Sabemos que hay momentos que debemos tener una pausa y eso nos sirve para no desgastarnos tanto si tenemos el bal¨®n. Llevamos los partidos tranquilos. Se prioriza el bal¨®n y la pausa para elegir.

P. ?Y el Arsenal?

R. Tambi¨¦n le gusta el bal¨®n. Junto al Bar?a, es el que mejor f¨²tbol ha mostrado. La diferencia es que no circulan tanto el bal¨®n. Su meta es buscar a Henry.

P. ?C¨®mo se frena a Henry?

R. Hay que estar bien parado y respaldado por un compa?ero. No lo puede parar s¨®lo uno. Y hay que tapar a sus lanzadores.

P. Su plantel es corto. ?Han soportado demasiado peso disputando dos competiciones?

R. No debemos quejarnos. El jugador es raro: si juega poco, se queja; si mucho, tambi¨¦n. Somos pocos y eso destaca m¨¢s lo que estamos haciendo. Con los resultados, uno se olvida del cansancio.

P. ?Sorprendido del ¨¦xito?

R. Sab¨ªa del proyecto y de la gente que hab¨ªa detr¨¢s, pero no pensaba que fuera a corto plazo. Aprendimos en la Copa Intertoto y la de la UEFA a jugar mi¨¦rcoles y domingo.

P. ?Por qu¨¦ marca siempre en las grandes citas: dos goles en la final de la Copa Libertadores que el Boca gan¨® al Palmeiras en 2000 y dos en esta Champions?

R. Casualidad. Mi virtud es ir a buscarla, pero son rachas. Hac¨ªa tiempo que no convert¨ªa aqu¨ª.

P. Es un buen cabeceador.

R. Me anticipo m¨¢s que otra cosa. En el Boca lo entren¨¦ mucho: encontrar el lugar.

P. ?Qu¨¦ le dijo a Ver¨®n en su tanto al Inter, cuando esperaba el centro de Riquelme?

R. Nos conocemos de los juveniles, hace 15 a?os. Est¨¢bamos golpe¨¢ndonos, ri¨¦ndonos...

P. ?Por qu¨¦ Mancini le orden¨® a ¨¦l, mal marcador, que le vigilara?

R. Porque no marcaban al hombre en los c¨®rners, sino en zona. S¨®lo Materazzi iba a por Sor¨ªn.

P. S¨ª lo marc¨®, con un codazo. M¨¢s all¨¢ del c¨®digo del vestuario, ?habr¨ªa que denunciarlo?

R. Hay organismos para ello. ?l fue de mala fe porque sab¨ªa que Sor¨ªn llegaba en velocidad.

P. Usted anul¨® a Figo. ?Qu¨¦ extremo le ha vuelto loco?

R. En la Champions hemos sido compactos. En la Liga, en su d¨ªa,Sim?o, en un 4-4 ante el Bar?a.

P. ?Son especiales los zurdos?

R. Los t¨¦cnicos, s¨ª. Para la vista.

P. No es su caso.

R. No, yo tengo que laburar. S¨¦ mis limitaciones.

P. Si le califican de cumplidor, ?se mosquea?

R. No; hay que tener una regularidad. Que los delanteros sepan que eres complicado, que no te arriesgas... Esa imagen es buena.

P. ?Le llamar¨¢ P¨¦kerman?

R. He sido cuatro veces internacional. Siempre tienes la ilusi¨®n, pero los que est¨¢n ahora en la selecci¨®n se lo merecen. Argentina siempre tiene posibilidades. Depende de c¨®mo lleguen los jugadores. Los hay que se cuidan antes de un Mundial. Los argentinos, no. Siempre quieren pelear y ganar.

P. ?Es usted el menos argentino de los argentinos?

R. No me gusta el mate y no soy de irme a Argentina en Navidad, pero s¨ª me gusta volver a mi pa¨ªs. Mis or¨ªgenes vascos son remotos. En Bilbao y San Sebasti¨¢n me dicen que mi aspecto es vasco.