El lento despegue de la Sierra Norte

Por las calles de Madarcos, el municipio de la regi¨®n con menos habitantes (38), s¨®lo corretean dos ni?as, de dos y tres a?os. En este pueblo donde la media de edad supera los 65 a?os y la poblaci¨®n infantil apenas se refleja en la estad¨ªstica, tampoco hay inmigrantes. Tan s¨®lo una posada y dos alojamientos rurales dan algo de vida a la localidad. Aun as¨ª, Madarcos es el pueblo de la Sierra Norte que m¨¢s ha crecido porcentualmente en habitantes en el ¨²ltimo a?o: un 22,5%.

"El a?o pasado ¨¦ramos 31 residentes y ahora somos 38; pero la mayor¨ªa somos de la tercera edad", explica el alcalde de Madarcos, Baltasar de la Vega (PP), de 67 a?os. ?De d¨®nde han salido estos nuevos vecinos? "Era gente que ya viv¨ªa en el pueblo, pero que no estaba empadronada", aclara. Madarcos no tiene inmigrantes "porque no hay casas, ni trabajo". "Aqu¨ª no se pueden quedar", se?ala De la Vega.

Los nuevos vecinos encuentran vivienda barata en los pueblos m¨¢s peque?os

En los 42 municipios que forman la Sierra Norte viven 24.117 habitantes, un 5,5% m¨¢s que el a?o pasado, seg¨²n datos de la Consejer¨ªa de Presidencia. En los ¨²ltimos 20 a?os, la poblaci¨®n de esta zona, conocida tambi¨¦n con la Sierra Pobre, ha aumentado un 62%. Este incremento, con la excepci¨®n de Madarcos, se ha producido, sobre todo, gracias a la llegada de extranjeros. En Venturada, por ejemplo, la poblaci¨®n ha crecido desde 1986 un 393,9% y en Torremocha, un 184,2%.

La poblaci¨®n de la Sierra Norte alcanz¨® a mediados del siglo XX los 20.000 habitantes; pero la emigraci¨®n en d¨¦cadas posteriores despobl¨® algunos municipios y los envejeci¨® demogr¨¢ficamente. Ahora, ciudadanos de Ecuador o Rumania est¨¢n levantado la zona.

Adem¨¢s de Madarcos, hay otros pueblos que tambi¨¦n han crecido en el ¨²ltimo a?o, como Alameda del Valle, con una subida del 16,9%, y Venturada, con un incremento del 16,64%. En La Acebeda, con 60 habitantes y ning¨²n ni?o, van a construir pr¨®ximamente una casa de cultura y juventud. Este pueblo ha aumentado su poblaci¨®n en un 9%. En cambio, Robregordo perdi¨® dos habitantes con respecto a 2004 y ahora tiene 69 residentes.

En cuanto a n¨²mero de habitantes, los cinco municipios m¨¢s poblados de esta zona son Torrelaguna (3.921 vecinos); La Cabrera (2.218); Buitrago de Lozoya (1.856); Bustarviejo (1.810) y Rascafr¨ªa (1.557). La alcaldesa de Rascafr¨ªa, Yolanda Aguirre, asegura que con el nuevo plan urban¨ªstico, que est¨¢ en fase de avance y que ha tenido protestas sonadas por parte de los vecinos, quieren llegar a unos 3.000 habitantes. "Queremos desarrollar turismo rural e industrias relacionadas con el entorno", afirma.

El alcalde de Buitrago de Lozoya, Agust¨ªn Ferrer (PP), aclara que en la localidad viven 1.950 personas, 100 m¨¢s de lo que dice la Comunidad. "Desde 2000 hemos crecido casi un 25% en poblaci¨®n, sobre todo gracias a la inmigraci¨®n", se?ala De la Vega. En Buitrago de Lozoya hay, sobre todo, inmigrantes de Europa del Este.

"Los extranjeros est¨¢n en los pueblos m¨¢s grandes de la Sierra Norte, aunque poco a poco empiezan a llegar tambi¨¦n a los municipios peque?os. Aqu¨ª encuentran vivienda relativamente barata y pueden trabajar en la construcci¨®n, la ganader¨ªa, en restaurantes y hoteles", afirma Ferrer.

El consejero de Presidencia, Francisco Granados, asegura que desde el Gobierno regional, presidido por Esperanza Aguirre, se trabaja "para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos de la Sierra Norte". "Hay pol¨ªticas para consolidar el turismo, la artesan¨ªa, la ganader¨ªa o cualquier actividad econ¨®mica que genere empleo", cuenta. Estas pol¨ªticas se ponen en marcha a trav¨¦s del Patronato Madrile?o de ?reas de Monta?a (Pamam). Los municipios reciben tambi¨¦n dinero del Gobierno regional a trav¨¦s del Plan Regional de Inversiones (Prisma).

Rascafr¨ªa gastar¨¢ el dinero que le ha correspondido del Prisma (un mill¨®n de euros) en el alumbrado p¨²blico, en soterramiento de cableado, renovaci¨®n de pavimento o en la aplicaci¨®n de nuevas tecnolog¨ªas. Buitrago tiene casi un mill¨®n de euros, de los que m¨¢s de la mitad ir¨¢n destinados, seg¨²n su alcalde, a un nuevo centro de formaci¨®n de adultos.

Madarcos, por ejemplo, tiene 200.000 euros para gastar, y lo har¨¢ en turismo rural. A pesar de que es una localidad con menos de 40 residentes, su alcalde no teme que el pueblo termine convirti¨¦ndose en un pueblo fantasma. "Madarcos es peque?o, pero vivimos bien. Cuanto m¨¢s grandes son los municipios, m¨¢s problemas", concluye Baltasar de la Vega.