Barcelona avanza, Terrassa y Manresa no tanto

En la primera convocatoria de la Ley de Barrios, Barcelona consigui¨® colocar dos proyectos de rehabilitaci¨®n. El de Santa Caterina-Sant Pere, en el Casc Antic de la ciudad, y el de Roquetes, en el distrito de Nou Barris. Ambos proyectos disponen de un presupuesto de 25,6 millones de euros, que aportan a medias el Departamento de Pol¨ªtica Territorial y el Ayuntamiento. El consistorio no ha sido r¨¢cano en la inversi¨®n de este dinero: durante 2005 ha gastado 4,2 millones, lo que supone el 16%. Barcelona tiene, no obstante, un ventaja sobre otras poblaciones: puede invertir y sus arcas se resienten menos de la espera hasta que recibe el ingreso del Gobierno catal¨¢n.

En el caso de Santa Caterina, el proyecto trata de culminar una reforma que dura ya m¨¢s de una d¨¦cada. En este barrio, donde viven unas 15.000 personas, las viviendas son viejas y escasean los equipamientos y las zonas verdes. El a?o pasado, el Ayuntamiento ejecut¨® varios proyectos: arregl¨® "microespacios ajardinados" en algunos "rincones del barrio", lanz¨® campa?as para impulsar el comercio y compr¨® suelo para futuros servicios p¨²blicos. Entre los logros del pasado ejercicio se cuenta el conjunto de equipamientos Pou de la Figuera, que no obstante se ejecutar¨¢ tambi¨¦n durante 2006.

En el barrio antiguo de Manresa viven personas mayores e inmigrantes extracomunitarios

El proyecto de Santa Caterina trata de culminar una reforma que se inici¨® hace una d¨¦cada

De los 14,6 millones de presupuesto destinados a Santa Caterina, se han gastado por ahora 2,9 (19%). Frente a las escasas actuaciones impulsadas en 2005, el Ayuntamiento ha multiplicado las previsiones para este a?o. Se llevar¨¢n a cabo 10 proyectos. Entre ellos, la puesta en marcha de un espacio multifuncional en el edificio La Penya y la fase final del centro c¨ªvico del convento de Sant Agust¨ª.

Menos dinero se ha invertido en Roquetes, una zona muy poblada (11.000 habitantes) cercana a la ladera de Collserola. El d¨¦ficit de este barrio est¨¢ sobre todo en su parque de viviendas, v¨ªctima de un urbanismo sin control. El proyecto mejorar¨¢ el espacio p¨²blico y dotar¨¢ al barrio de equipamientos. Hasta la fecha se han efectuado las siguientes actuaciones: la creaci¨®n del centro de atenci¨®n Ton i Guida, el impulso del Ateneo Popular y el Parque Pla de Fornells, y la urbanizaci¨®n de las calles de la Artesania y de Llovera.

En Roquetes se han invertido por ahora 1,3 millones, lo que supone el 11% del presupuesto destinado al barrio: 11 millones de euros. La lista de proyectos para 2006 es, como en el caso de Santa Caterina, mucho m¨¢s extensa. Hay 22 actuaciones previstas. Entre las de mayor envergadura se cuentan la creaci¨®n de un parque urbano y la rehabilitaci¨®n de edificios para adaptarlos a las exigencias medioambientales: eficiencia energ¨¦tica, instalaci¨®n de placas solares, ahorro de consumo. Tambi¨¦n se pondr¨¢ especial ¨¦nfasis en mejorar la movilidad y suprimir las barreras arquitect¨®nicas. Seg¨²n las previsiones del Ayuntamiento, en 2006 se gastar¨¢n otros 5,4 millones en Nou Barris.

En Manresa, la inversi¨®n que se ha llevado a cabo del plan de barrios se encuentra en estos momentos en el 7% del presupuesto previsto, aunque se han iniciado el 30% de las iniciativas programadas. Los 16,6 millones de euros del plan de barrios que recaen en la ciudad de Manresa tienen como finalidad actuar en la mejora urban¨ªstica y social de los sectores de Escodines, Vic-Remei y Barri Antic, la parte m¨¢s degrada en lo que respecta a las viviendas y donde se han acumulado los principales retos sociales de la ciudad: en ellos viven un alto porcentaje de gente mayor y el grueso de la inmigraci¨®n extracomunitaria, en unas edificaciones que a menudo no re¨²nen condiciones.

El plan, en el caso de Manresa, es ejecutivo desde hace siete meses, cuando se firm¨® el acuerdo definitivo entre el consistorio y el Departamento de Pol¨ªtica Territorial, con lo que el Ayuntamiento justifica el nivel de inversi¨®n alcanzado hasta la fecha. El programa se debe ejecutar en su totalidad antes de 2008.

Desde el pasado d¨ªa 31 de enero, el plan cuenta en Manresa con una herramienta de control: una comisi¨®n de seguimiento integrada por t¨¦cnicos municipales y de la Generalitat, responsables pol¨ªticos de todas las formaciones con representaci¨®n municipal, las asociaciones de vecinos de los barrios incluidos en la reforma y entidades como Cruz Roja, C¨¢ritas, la C¨¢mara de la Propiedad y el Colegio de Arquitectos. Esta comisi¨®n se va a reunir cada seis meses para evaluar el nivel de ejecuci¨®n del programa, en el que participan a partes iguales el Ayuntamiento y la Generalitat.

El Gobierno catal¨¢n tiene la intenci¨®n de ampliar el apoyo a estos barrios incluidos en su plan de ayuda. En el caso de Manresa, se prev¨¦ que el Departamento de Salud lleve a cabo un plan para mejorar el nivel asistencial en la zona y la salubridad, y que Relaciones Institucionales se involucre en programas para fomentar la participaci¨®n ciudadana, Trabajo en programas espec¨ªficos de formaci¨®n ocupacional y Medio Ambiente y Vivienda en l¨ªneas de acceso a pisos.

En Terrassa, las expectativas eran altas. Hace un a?o, el presidente de la Asociaci¨®n de Comerciantes del barrio de Ca n'Anglada, Antonio S¨¢nchez, esperaba que, con los 8,5 millones de euros de la Ley de Fomento de Barrios de la Generalitat, llegase "la revoluci¨®n", "que venga gente joven y que la que hay no se marche", dec¨ªa . Doce meses despu¨¦s del anuncio, el Ayuntamiento ha recibido de la Generalitat de Catalunya 132.194 euros, debido a que las certificaciones de obras, y por tanto los pagos, se hacen dos veces al a?o: octubre y mayo. Para cobrar hay que justificar que se ha realizado la obra. El Ayuntamiento asegura que la cifra corresponde a lo que se hizo hasta el pasado 15 de octubre y que desde entonces se han realizado otros proyectos por los que a¨²n tiene que pasar la "factura", de modo que la cifra es, en parte, enga?osa.

?Qu¨¦ se ha hecho hasta ahora? Seg¨²n el consistorio, se ha organizado el equipo t¨¦cnico, se ha elaborado un calendario y se ha dado a conocer el plan de barrios. La primera fase de la avenida de Barcelona ha llegado a su fin -la reconversi¨®n de esta arteria, con mucho tr¨¢fico, en rambla ya estaba en marcha cuando se anunci¨® el plan de barrios- y se han licitado los proyectos de obras de calles y puentes que tienen que llevarse a cabo entre 2006 y el 2007. El Mercadal, el mercadillo hist¨®rico de la ciudad, se ha trasladado a Ca n'Anglada, se ha puesto en marcha el Banco del Tiempo -consistente en que la gente intercambia habilidades, por ejemplo, clases de cocina por lecciones de piano- y han empezado a actuar los equipos t¨¦cnicos que tienen como objetivo potenciar el civismo y el tejido asociativo, y evitar las situaciones conflictivas. El reto es facilitar la convivencia con mediadores sociales, formaci¨®n, voluntariado y proyectos, por ejemplo, sobre la historia del barrio. Por otra parte, se han realizado y programado un sinf¨ªn de actividades culturales. Otros deberes hechos son un informe de juventud sobre el barrio y un local para los j¨®venes.

La ayuda de la Generalitat es un bal¨®n de ox¨ªgeno para un barrio al que desde hac¨ªa tiempo no se asomaban las gr¨²as, que tiene el 24% de poblaci¨®n extranjera y al que no le gusta recordar que en 1999 le estall¨® en las manos un polvor¨ªn de disturbios racistas. Con un proyecto cuyo coste el consistorio egarense calcula en 20 millones de euros, cuatro barrios -Ca n'Anglada, Montserrat, Torressana y Vilardell- esperan resolver los problemas de convivencia y los urban¨ªsticos generados por los bloques de pisos, levantados a toda prisa, con poco espacio para respirar y muchas patolog¨ªas, y las viviendas construidas por los propios inmigrantes que llegaron a finales de la d¨¦cada de 1950.

Han colaborado en esta informaci¨®n Gerard Bagu¨¦, Gloria Ayuso, Cristina Perales, Llu¨ªs Visa, Enric Badia, Eva Clota, Oriol Aym¨ª y S¨ªlvia Marimon.