Lo cierto y lo veros¨ªmil

Primo Carnera obtuvo el t¨ªtulo de campe¨®n del mundo de los pesos pesados el 29 de junio de 1933. Mussolini celebr¨® el triunfo se?alando que la Italia fascista estaba orgullosa de que un camisa negra fuera el nuevo campe¨®n. Un a?o m¨¢s tarde, el "gigante bueno", como le llamaban sus compatriotas, perder¨ªa el t¨ªtulo frente a Max Baer, un p¨²gil despiadado al que le achacaban la muerte de dos de sus contrincantes. Baer llevaba una estrella de David cosida en sus calzones de boxeador. Al a?o siguiente, Baer no pudo revalidar su victoria, pues perdi¨® de manera inesperada frente a un boxeador que muchos consideraban acabado, Jim Braddock (Cinderella Man).

Philippe Fusaro (1971), que

vive en Estrasburgo, pero es originario de Forbach en Lorena, ha construido en El coloso de barro una historia sencilla sobre el ¨¦xito, el desamparo y las alegr¨ªas fugaces de un boxeador. Lo ha hecho acerc¨¢ndose a uno de sus representantes m¨¢s singulares, el gigante Primo Carnera, quien en los a?os treinta del siglo pasado y con sus m¨¢s de dos metros de altura y 122 kilos de peso, exhibi¨® su mole y la dureza de sus pu?os por los cuadril¨¢teros. Todo esto Fusaro lo cuenta a la manera de un reportaje donde el narrador sit¨²a el escenario y advierte de los antecedentes del protagonista, mientras otras voces, entre las que se incluye la de Carnera, hablan directamente al lector describiendo encuentros, momentos y situaciones en las que intervino el boxeador.

Fusaro certifica con datos y fechas la realidad profesional y los puntos b¨¢sicos de una vida cierta, y es la ficci¨®n la que proporciona la verosimilitud a la persona que fue Carnera, un hombre que asiste a un carnaval perplejo y asombrado de presidir el desfile. Adem¨¢s, en este libro el autor introduce la melancol¨ªa por el lugar de donde uno se ausenta. As¨ª, Carnera ser¨¢ un muchacho sencillo, un desconocido, vencedor, vencido, humillado, idolatrado, actor, hombre querido por sus amigos, pero siempre alguien que desea regresar a Sequals, en Friuli (Italia), el lugar de su nacimiento. Fusaro cuenta con convicci¨®n, de tal modo que esta lectora se fue dejando seducir por una novela, que no una biograf¨ªa, en la que todo es verdad pero todo puede ser falso, y que con sobriedad casi puritana crece en matices y rescata luces a las sombras. Primo Carnera en su ¨²ltimo combate, el que mantuvo con la muerte, aguant¨® bastantes rounds, los suficientes para llegar al 29 de junio, fecha en la que muri¨®. Era 1967 y se cumpl¨ªan 34 a?os desde que obtuvo el t¨ªtulo de campe¨®n del mundo. En el cortejo f¨²nebre todo Sequals estaba presente. Su muerte es un hecho cierto, que la gente sencilla de la tierra que quiso le acompa?ara para darle el ¨²ltimo adi¨®s, resulta veros¨ªmil.