Los contrastes de Manila protagonizan una exposici¨®n de fotos en Casa Asia

"Manila es una ciudad ignorada y perdida en el tiempo, atrapada entre un pasado colonial y un presente dominado por las contradicciones". El fot¨®grafo Ricky D¨¢vila (Bilbao, 1964) describi¨® as¨ª la ciudad que durante dos a?os ,se convirti¨® en el objeto de su trabajo, que queda plasmado en un libro y una exposici¨®n, abierta en Casa Asia (avenida Diagonal, 373), hasta el 15 de julio. La exhibici¨®n, titulada simplemente Manila, recoge una serie de 30 fotograf¨ªas de gran formato, en blanco y negro, elegidas entre las 176 que conforman el libro hom¨®nimo, ganador en 2005 del premio Photo Espa?a a la mejor publicaci¨®n de fotograf¨ªa del a?o.

"Empec¨¦ el trabajo con un enfoque period¨ªstico, que con el tiempo fue convirti¨¦ndose en una aproximaci¨®n entre po¨¦tica y documental", explic¨® D¨¢vila, quien entre 2002 y 2003 realiz¨® cinco viajes de un mes a la capital filipina, una de las ciudades m¨¢s at¨ªpicas y contradictorias de Asia. "Y tambi¨¦n m¨¢s desconocida para el p¨²blico occidental", a?adi¨® Menene Gras, jefa de cultura y exposiciones de Casa Asia y comisaria del proyecto, producido por esta instituci¨®n con la colaboraci¨®n de la Comunidad de Madrid y el Museo de Arte Contempor¨¢neo Uni¨®n Fenosa (MACUF) de A Coru?a, en cuyas sedes se estren¨® la exposici¨®n. Las impactantes im¨¢genes, donde predomina la figura humana, conforman un polifac¨¦tico retrato de una sociedad enfrentada a una permanente crisis de identidad, generada por la herencia colonial espa?ola, el neocolonialismo estadounidense y el cada vez m¨¢s pujante legado asi¨¢tico.

"De d¨ªa, bajo el sol, la ciudad suda. Se ve pobre, sentimental, lejana... De noche, la ciudad es oscura, mal iluminada, llena de recovecos. Fascina y conmueve, tiene algo inquietante, de arrabal infinito", escribe el fot¨®grafo Alberto Garc¨ªa-Alix, que acompa?¨® a D¨¢vila en uno de sus viajes, en el ¨²nico texto que llevan las im¨¢genes del libro. Tanto ¨¦stas como las de la exposici¨®n se presentan sin t¨ªtulo para dejar espacio a la imaginaci¨®n del visitante, pero la cruda realidad desborda el papel. La inestabilidad pol¨ªtica, la corrupci¨®n, la violencia y las brutales desigualdades, que convierten Manila en una metr¨®polis perennemente al borde de un estallido social, toman forma en las fotograf¨ªas de ni?os de la calle, prostitutas que se ofrecen en peceras a los ojos del cliente, telepredicadores, guardias jurados, boxeadores, vendedores callejeros, travestidos de mirada triste y sumisa, y desenfrenados j¨®venes de la alta burgues¨ªa. "Es una ciudad cacof¨®nica, marciana y nada ex¨®tica. Sin embargo, consigui¨® atraparme y me permiti¨® penetrar hasta su esencia m¨¢s profunda", concluy¨® el artista.