El ex jefe del Ej¨¦rcito afirma que ignora el motivo de su cese
Alonso dice que "es un cambio de conductor, pero no de direcci¨®n"
En el Sal¨®n de Embajadores del palacio de Buenavista, el mismo lugar donde su antecesor le entreg¨® el mando del Ej¨¦rcito de Tierra hace s¨®lo 22 meses, el general de Ej¨¦rcito Jos¨¦ Antonio Garc¨ªa Gonz¨¢lez cedi¨® el testigo a su sucesor, el reci¨¦n ascendido Carlos Villar. No hubo en esta ocasi¨®n palabras de reproche o resentimiento, aunque s¨ª de incredulidad por las razones de su destituci¨®n, que asegur¨® ignorar.
Fiel a su proverbial optimismo, Garc¨ªa Gonz¨¢lez present¨® su pase anticipado a la reserva (tiene 63 a?os, y la edad media de retiro de los generales es a los 65) como el inicio de una nueva etapa en la que podr¨¢ atender mejor a su familia. "S¨®lo puedo sentir agradecimiento y orgullo por haber mandado una organizaci¨®n excepcional y mod¨¦lica, a veces poco reconocida", dijo.
Reconoci¨®, no obstante, que el jueves por la noche, despu¨¦s de que el ministro de Defensa le comunicara su inminente relevo, tuvo momentos de "ansiedad y desaz¨®n", pregunt¨¢ndose por qu¨¦ se le destitu¨ªa, pero "dur¨® muy poco", agreg¨®, porque la raz¨®n no ten¨ªa "ninguna importancia".
Las palabras que, momentos antes, pronunci¨® el ministro Jos¨¦ Antonio Alonso, durante la jura del cargo por parte del nuevo jefe del Ej¨¦rcito, Carlos Villar, no arrojaron mucha luz sobre los motivos.
"Es un cambio de conductor, pero no de direcci¨®n. Me ha parecido oportuno el relevo para recorrer este nuevo tramo del camino, que es distinto del anterior pero persigue la misma meta: unas Fuerzas Armadas cada vez m¨¢s eficaces, profesionales y operativas", afirm¨®.
Alonso tuvo palabras de agradecimiento para el cesado, de quien dijo que ha hecho "una tarea eficaz desde el honor y la honestidad". Villar reconoci¨® a su antecesor como "inspirador, si no autor material de las reformas que han hecho posible la modernizaci¨®n del Ej¨¦rcito en el ¨²ltimo cuarto de siglo". La ¨²ltima de ellas, aprobada el 7 de abril.
No fue posible recoger las opiniones de los generales y mandos asistentes ya que se impidi¨® el acceso de los periodistas a la tradicional copa, aduciendo falta de espacio.
No obstante, la pr¨¢ctica totalidad de los militares consultados asumen con naturalidad el relevo, conocedores de que el jefe del Estado Mayor del Ej¨¦rcito (con rango administrativo de subsecretario) es un cargo de confianza pol¨ªtica, que depende del Gobierno de turno.
Por el mismo motivo, aceptan el nombramiento de Carlos Villar, ascendido para la ocasi¨®n a general de cuatro estrellas. El ministro asegur¨® que su profesionalidad est¨¢ acreditada y "cumple con creces los requisitos para asumir tan alta responsabilidad"; saliendo as¨ª al paso de los que cre¨ªan que su prolongado alejamiento del Ej¨¦rcito supon¨ªa un obst¨¢culo.
El jefe de Estado Mayor de la Defensa, F¨¦lix Sanz, pidi¨® al nuevo jefe del Ej¨¦rcito que, m¨¢s all¨¢ de su capacidad t¨¦cnica, reconocida por todos los oradores, cultive "las virtudes tradicionales" de la milicia.
Villar jur¨® el cargo en la sede del Ministerio de Defensa y tom¨® el bast¨®n de mando en el Cuartel General del Ej¨¦rcito. Al primer acto asisti¨® Jos¨¦ Antonio Alonso y al segundo, el secretario de Estado de Defensa, Francisco Pardo, a quien Villar agradeci¨® su confianza como director general de Armamento y Material, un cargo que ocupaba desde 2001.
No hubo, en ninguno de los discursos, una sola alusi¨®n al caso Mena que, seg¨²n admiten en privado fuentes gubernamentales, fue el detonante del cese de Garc¨ªa Gonz¨¢lez, a quien se le achaca una actitud pasiva ante este brote de indisciplina.
Garc¨ªa Gonz¨¢lez se limit¨® a decir que "hay que mirar al futuro y no distraerse con esas peque?as piedras que te vas encontrando cada d¨ªa y te parecen rocas". Y concluy¨® recordando los versos de Calder¨®n: "Aqu¨ª la m¨¢s principal haza?a es obedecer. Y el modo como ha de ser es ni pedir, ni rehusar".
M¨¢s all¨¢ de sus causas, la principal caracter¨ªstica del relevo fue la celeridad. Como si el Ej¨¦rcito tuviera v¨¦rtigo al vac¨ªo, Villar tom¨® posesi¨®n a las pocas horas de publicarse su nombramiento. El relevo al frente de la Guardia Civil no est¨¢ previsto hasta el jueves.
Quinta del 45
Con 63 a?os, Garc¨ªa Gonz¨¢lez era el mayor de los miembros de la c¨²pula militar. Su sucesor, Carlos Villar, naci¨® en 1945, el a?o que empez¨® la guerra fr¨ªa, igual que los otros componentes de la Junta de Jefes de Estado Mayor (Jujem). Por unos meses, es el m¨¢s joven, pues cumple el 29 de diciembre, mientras que el jefe de Estado Mayor de la Defensa, F¨¦lix Sanz, lo hace el 20 de enero.
Aunque de la misma quinta, Villar parte con desventaja. Los otros miembros de la c¨²pula militar fueron nombrados en 2004 y, cuando se celebren las pr¨®ximas elecciones, en 2008, llevar¨¢n cuatro a?os, el doble que ¨¦l.
Tras ensayar varias f¨®rmulas, se opt¨® por la sustituci¨®n conjunta de los miembros de la Jujem al inicio de cada legislatura para que formen un equipo. El relevo a mitad de partido rompe esta filosof¨ªa y abre inc¨®gnitas de futuro.
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