Los Mossos tienen uno de los ¨ªndices de mujeres m¨¢s elevados de Europa

Los Mossos d'Esquadra tienen uno de los ¨ªndices de mujeres m¨¢s elevados en los cuerpos de polic¨ªa de Europa; el 20%. Este porcentaje los equipara con Suecia y Holanda y quedan a s¨®lo un punto por debajo de Inglaterra. Este ¨ªndice coloca a los Mossos a una distancia considerable con respecto a las otras polic¨ªas espa?olas. En la Guardia Civil hay s¨®lo el 3,28% de mujeres, el Cuerpo Nacional de Polic¨ªa tiene el 7,44% y la Ertzaintza, el 9,08%. Pero el colectivo de mujeres polic¨ªas europeas reclama no s¨®lo m¨¢s presencia, sino adem¨¢s mayor calidad; es decir, m¨¢s mando. Por eso su lema preferido es: Cualidad a trav¨¦s de la igualdad.

Esta es la principal conclusi¨®n a la que han llegado los miembros del comit¨¦ ejecutivo de la Red Europea de Mujeres Polic¨ªa (European Network Policewomen, ENP), que se reunieron la pasada semana en Barcelona. La ENP es una organizaci¨®n no gubernamental fundada hace 17 a?os, cuya sede central est¨¢ en Holanda y en la que se encuentran representados cuerpos de polic¨ªa de 32 pa¨ªses europeos.

"Ser mujer polic¨ªa en Europa no es dif¨ªcil. Las cosas se complican cuando empiezas a ascender dentro del mando y te encuentras frente a una actitud reticente por parte de tus compa?eros varones", asegura Erika Wietinger, de 39 a?os, coronel de la polic¨ªa en Austria, quien desde el pasado mes de diciembre preside esta red de mujeres polic¨ªa, considerada la m¨¢s importante del mundo.

La coronel Erika Wietinger es una de las agentes m¨¢s importantes y con m¨¢s grado de Austria, donde s¨®lo hay otra agente con las mismas estrellas. Pero a pesar de este aparente ¨¦xito su carrera ha estado llena de obst¨¢culos, incomprensiones e incluso desprecios por parte de sus compa?eros varones.

"En m¨¢s de una ocasi¨®n me han recibido con una sonrisa esc¨¦ptica o con un comentario jocoso. Pero con el tiempo he aprendido a resolver con diplomacia y serenidad estas situaciones desagradables. Tengo que reconocer, sin embargo, que la situaci¨®n en mi pa¨ªs ha mejorado de manera considerable en los ¨²ltimos 20 a?os. Podr¨ªa llegar incluso a decir que han desaparecido las actitudes agresivas por parte de los polic¨ªas varones ", afirma la coronel.

Erika Wietinger reconoce, sin embargo, que su ¨¦xito como mujer polic¨ªa le ha supuesto renuncias personales importantes; como no encontrar una pareja o no ser madre, a pesar de que en Austr¨ªa hay una importante legislaci¨®n laboral que ampara a la mujer trabajadora.

Austria, con cerca de 25.000 polic¨ªas, tiene un ¨ªndice de mujeres entre el 10% y el 12%. Pero el n¨²mero de mandos entre ellas es a¨²n muy escaso. Estos hechos contrastan, por ejemplo, con la realidad de otros pa¨ªses, especialmente Andorra, que acaba de incorporarse a la organizaci¨®n hace escasos meses y donde el ¨ªndice de mandos policiales femeninos es uno de los m¨¢s altos.

"En Andorra, dos de los cuatro ¨®rganos supremos de la polic¨ªa est¨¢n en manos de mujeres. En contrapartida, s¨®lo somos 18 mujeres en un colectivo de 200 funcionarios", afirma Rosa Guerris, de 37 a?os, agente de la polic¨ªa en Les Escaldes. Hija de emigrantes espa?oles, llegados a Andorra en la d¨¦cada de 1960, est¨¢ casada con un guardia civil.

Rosa Guerris fue, junto con otras dos compa?eras, la primera mujer polic¨ªa de Andorra. Su ingreso en el cuerpo hace 18 a?os ha supuesto un cambio significativo en la instituci¨®n, a pesar de que en alguna ocasi¨®n la contin¨²an llamando despectivamente con el calificativo de la nena.

Uniforme para embarazadas

El debate feminista en la polic¨ªa andorrana es permanente. Por ejemplo, hace pocas semanas discutieron entre ellas el tipo de uniforme que deb¨ªan vestir las agentes embarazadas. El debate se cerr¨® con una conclusi¨®n decepcionante: las mujeres polic¨ªa vestir¨¢n de paisano durante el tiempo que dure su embarazo. El presupuesto de esta Administraci¨®n no puede soportar el costo de un traje especial para embarazadas, como por ejemplo tiene la Guardia Civil, asegura la agente Guerris.

"Catalu?a es un ejemplo para la mayor¨ªa de los cuerpos policiales europeos; el ¨ªndice de mujeres se eleva casi al 20%, y el 30% de sus mandos somos tambi¨¦n mujeres", afirma Marta Fern¨¢ndez, de 36 a?os, casada, madre de una hija adoptiva de 7 a?os.

Marta Fern¨¢ndez, subinspectora, jefa de la Unidad de Transportes P¨²blicos, con sede en la plaza de Catalunya de Barcelona, dirige un peque?o contingente de 35 agentes. Entre su tropa s¨®lo hay dos mujeres. Marta ingres¨® en los Mossos d'Esquadra en 1992, despu¨¦s de abandonar los estudios de Psicolog¨ªa, iniciar los de Criminolog¨ªa y matricularse en Derecho por la Universidad Abierta de Catalu?a.

Ha tenido como m¨ªnimo cinco destinos diferentes, que le han permitido conocer el pa¨ªs y los problemas policiales a fondo. Ella es la segunda de la red europea de mujeres polic¨ªa.

"Ser mujer polic¨ªa a veces no es f¨¢cil. Tenemos que estar demostrando permanentemente que valemos, mientras que ellos no. Esto supone un desgaste y un esfuerzo importante", se lamenta Marta Fern¨¢ndez. Reconoce incluso que a menudo se ve abocada a adoptar posturas "m¨¢s duras" y "m¨¢s agresivas".