Arquitectura de participaci¨®n y negocios
LA EXPRESI?N Web 2.0 naci¨® de la voluntad de atraer el inter¨¦s de los inversores en la web tras la explosi¨®n de la burbuja tecnol¨®gica. Invita a preguntarse "si hay algo detr¨¢s". Claro que s¨ª. Lo dif¨ªcil es definirlo. Pocas de las t¨¦cnicas son nuevas, los acoplamientos lo son. Ese "algo" tiene que ver con la participaci¨®n de la gente y lo que Tim O'Reilly, padrino de la f¨®rmula, califica de "arquitectura de participaci¨®n", una propuesta comercial y pol¨ªtica. O'Reilly concibe Web 2.0 como una "plataforma. No tiene una frontera, m¨¢s bien un coraz¨®n gravitacional" (un principio alrededor del que gravitan las partes). El poder de atracci¨®n de la plataforma es su capacidad para servir de intermediario a la circulaci¨®n de datos proporcionados por los usuarios y no por las empresas.
"El secreto de los que han pasado con ¨¦xito a la nueva era es que han adoptado el poder de la 'web' para aprovechar la inteligencia colectiva"
"El poder de atracci¨®n de la plataforma es su capacidad para servir de intermediaria a la circulaci¨®n de datos proporcionados por los usuarios y no por las empresas"
"Google est¨¢ en el espacio entre navegador y motor de b¨²squeda y el servidor de contenidos", dice O'Reilly. Pasa igual con la publicidad. En vez de buscar acuerdos con los sitios importantes, Google permite que cada uno venga a servirse en su sitio. Consecuencia: adem¨¢s de los grandes, hay publicidad en sitios poco visitados. Permite rentabilizar la "larga cola", la multiplicidad de los chicos que, juntos, constituyen una fuente de entradas. La novedad es que los usuarios hacen el grueso del trabajo. Por ejemplo, en BitTorrent, red que permite intercambiar r¨¢pidamente v¨ªdeo gracias a su estructura P2P, aportan hasta sus recursos ya que el proceso usa las computadoras de los participantes.
"Hay una arquitectura de participaci¨®n impl¨ªcita, una ¨¦tica de cooperaci¨®n incluida", escribe O'Reilly, que ilustra uno de los puntos claves de la evoluci¨®n de Web 2.0: "el servicio mejora a medida que m¨¢s gente lo usa".
El secreto de los gigantes que han pasado con ¨¦xito a la nueva era "es que han adoptado el poder de la web para aprovechar la inteligencia colectiva". Aprendieron a crear y a beneficiarse de los efectos de redes. Ah¨ª es donde todos se encuentran (y lo que saca de quicio a m¨¢s de uno): la arquitectura de participaci¨®n es vista como un valor de sociedad ("la arquitectura es pol¨ªtica", escribi¨® hace 15 a?os Mitch Kapor en una reflexi¨®n sobre Internet). Tambi¨¦n tiene valor econ¨®mico.
Los buenos negocios de hoy alientan la participaci¨®n de los consumidores. El ¨¦xito de Google radica en el uso de enlaces establecidos por otros entre s¨ª. El crecimiento de eBay se debe a la interactividad. Amazon vende productos que se pueden encontrar en otro sitio, pero supo "transformar en ciencia el compromiso de los usuarios".
Esos sitios manejan monta?as de datos que proveemos. Hasta tal punto que O'Reilly sugiere el uso de la palabra infoware. Lo define as¨ª: "El software tradicional incrusta peque?as cantidades de informaci¨®n en una masa de software; el infoware incrusta peque?as cantidades de software en una masa de informaci¨®n".
Dos ideas sintetizan lo que est¨¢ en juego con Web 2.0. Seg¨²n el ensayista Paul Graham, los hilos comunes de lo que hemos visto en estos dos art¨ªculos son "la naturaleza inherente de la web que emerge desde debajo de los modelos rotos impuestos durante la burbuja". Para el consultor Ken Yarmosh se trata de "una tentativa para construir una web alrededor de la gente y no alrededor de la tecnolog¨ªa".
Vuelta a los or¨ªgenes, apertura a la gente. Parece funcionar vista la efervescencia actual en Silicon Valley. Hoy, los proyectos de ¨¦xito son de emprendedores menores de 30 a?os. Solo quienes conocieron Internet desde la cuna parecen capaces de operar esta transici¨®n esperada hacia la web por lo que es y no en funci¨®n de modelos comprobados en otros campos. De cierta manera, Web 2.0 ser¨ªa el equivalente de lo que ocurri¨® en la d¨¦cada de 1960 cuando se pas¨® de la radio con im¨¢genes a la televisi¨®n.
O'REILLY: sociedaddelainformacion.telefonica.es/jsp/articulos/detalle.jsp elem=2146 INFOWARE: www.oreilly.com/catalog/opensources/book/tim.html MITCH KAPOR: blog.kapor.com/?p=29 PAUL GRAHAM: www.paulgraham.com/paulgraham/web20.html KEN YAMROSH: www.technosight.com/blog/why-web-20-matters-to-your-business-first-steps/ BITTORRENT: Bittorent.com
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