Coro acaba con el drama

La tragedia sobrevol¨® Montju?c. Durante casi 13 minutos estuvo el Espanyol virtualmente descendido y adem¨¢s fueron casi los postreros. Era casi perceptible el rumor del llanto de una grada que se llen¨® como nunca para una verbena que acab¨® en tragicomedia, a cuenta del gol del Alav¨¦s que pon¨ªa con un pie y medio en Segunda al Espanyol, al campe¨®n de Copa. Jug¨® mal Espanyol. Pero tuvo el m¨¦rito de que no cej¨® en su empe?o y de que despu¨¦s de estrellar tres balones en los palos, cuando el partido ya conclu¨ªa, en el primero de los tres minutos de tiempo agregado, Coro enganch¨® un bal¨®n en el ¨¢rea y conect¨® el chut m¨¢s importante de su vida, el que le dio la permanencia al Espanyol.

El partido constituy¨® un suplicio para el Espanyol, como lo ha sido toda la Liga en la que el t¨ªtulo de Copa signific¨® un oasis en un infinito desierto futbol¨ªstico. El Espanyol apret¨® las clavijas e intent¨® intimidar a la Real iniciando la presi¨®n muy arriba. No sac¨® nada de una t¨¢ctica que se desvaneci¨® en un santiam¨¦n. La Real se permiti¨® el lujo de actuar con tal aplomo que sus jugadores parec¨ªa que invitaban a los del Espanyol a que embistieran. A la que sac¨® un par de balones en vertical y con rapidez, la Real se plant¨® ante Iraizoz con inusitada facilidad. La desubicaci¨®n del centro del campo del Espanyol era tan clamorosa como la facilidad con la que Nihat especialmente pero tambi¨¦n Viafara le ganaban la espalda a Domi y a los centrales. Un disparo cruzado de Nihat, otro de Viafara, episodios de tembleque de la defensa y la sensaci¨®n de desorden en una l¨ªnea media en la que Costa, Zabaleta y Fredson iban siempre a remolque de Garitano, Viafara y Xabi Prieto dibujaron un feo panorama para el Espanyol. No se sab¨ªa quien tomaba la manija, si Costa o De la Pe?a, ni quien se deb¨ªa ofrecer por los extremos, si Luis Garc¨ªa, Fredson o los laterales.

La Real demostr¨® escasa jerarqu¨ªa en su juego defensivo. Cedi¨® cedi¨® multitud de faltas y c¨®rners, acciones de las que el Espanyol obtuvo poco provecho, pero las ¨²nicas de las que intent¨® vivir porque fue incapaz de hacerlo de otra forma, de enlazar dos pases con alg¨²n sentido. Sergio S¨¢nchez envi¨® un cabezazo al larguero a la salida de un c¨®rner botado por Luis Garc¨ªa.

La inquietud tom¨® definitivamente cuerpo en Montju?c cuando De la Pe?a se lesion¨® a poco para el descanso. Lotina dio entrada a Coro, cuya velocidad le dio alguna chispa al Espanyol. Dos acciones consecutivas de Coro en la frontal le dieron alg¨²n br¨ªo al ataque. En la segunda estrell¨® un bal¨®n en el palo. Lotina tir¨® por la calle de enmedio. Dio entrada a Pandiani y retir¨® a Fredson. Casi toda la artiller¨ªa estaba en el campo. No hab¨ªa ya t¨¢ctica que valiera. Todo era cuesti¨®n de empuje. Nihat lanz¨® una falta que sac¨® astillas del palo. Fue un aviso de la angustia que se cern¨ªa sobre Montju?c. En el minuto 33 de la segunda parte lleg¨® la noticia que cay¨® como una bomba. Hab¨ªa marcado el Alav¨¦s. El Espanyol estaba virtualmente en Segunda. Luis Garc¨ªa envi¨® otro bal¨®n al palo, el tercero. Tamudo repiti¨® el gesto t¨¦cnico de su compa?ero con otro disparo cruzado que pas¨® cerca del palo. Se acababa el tiempo. Iraizoz tuvo que lucirse a¨²n en una acci¨®n ofensiva de la Real. Casi no quedaba esperanza. Hasta que lleg¨® el gol de Coro y lo cambi¨® todo, la tragedia en verbena, el infierno de la segunda en el cielo de otro a?o en Primera. Pero ya sin Lotina, que anunci¨® su marcha anoche.