"Los robots no tienen que ser inteligentes continuamente"

Manuela Veloso entrena un equipo de f¨²tbol muy especial que cuenta con varios trofeos internacionales en su haber. Su equipo tiene cuatro jugadores y el campo mide unos pocos metros cuadrados. Los entusiastas seguidores son casi todos cient¨ªficos e ingenieros, no por ello menos apasionados por los pases de pelota, los regates, las combinaciones y los goles. Lo peculiar es que esos cuatro jugadores (ocho, contando con los del contrincante) son robots, con forma de perro, programados por expertos en Inteligencia Artificial (IA). Veloso es profesora de ciencias de la computaci¨®n en la Universidad Carnegie Mellon (EE UU) y el equipo de robots que dirige es uno de los favoritos en los campeonatos que organizan cient¨ªficos de IA de todo el mundo como banco de pruebas. Veloso naci¨® en Lisboa (1957) y lleva m¨¢s de 20 a?os en EE UU dedic¨¢ndose a la investigaci¨®n. Con una conferencia sobre Equipos de robots con percepci¨®n, cognici¨®n y acci¨®n ha inaugurado en Barcelona el ciclo que Cosmocaixa dedica este a?o al 50? aniversario de la IA.

"A menos que un robot sea capaz de ajustarse a las situaciones, es decir, de aprender, nunca podr¨¢ manejar situaciones complejas" "Pienso en m¨¢quinas que uno pueda enviar al supermercado a comprar unas flores o que le puedan sustituir en una reuni¨®n"

Pregunta. ?La IA siempre tiene como referencia la inteligencia humana?

Respuesta. S¨ª, creo que la referencia es la capacidad de actuaci¨®n humana. Nosotros tomamos decisiones inteligentes, pero tambi¨¦n fallamos y rectificamos, o volvemos a fallar.... Lo mismo los robots: no tienen que ser inteligentes continuamente, probablemente cometer¨¢n errores y aprender¨¢n a hacerlo mejor. No me parece que los humanos seamos inteligentes m¨¢quinas pensantes 24 horas al d¨ªa.

P. ?C¨®mo define la IA?

R. Es la ciencia que intenta crear un cuerpo f¨ªsico capaz de pensar, con capacidad de percepci¨®n del mundo, de moverse y de desenvolverse en el entorno...

P. ?Y de qu¨¦ son capaces sus robots futbolistas?

R. Los programamos para que jueguen al f¨²tbol y tienen as¨ª capacidades de percepci¨®n que les permiten detectar objetos espec¨ªficos, como la pelota. Saben d¨®nde est¨¢ la pelota y la porter¨ªa; tambi¨¦n saben d¨®nde est¨¢n sus oponentes y sus compa?eros de equipo, colaboran con ellos, se comunican, y as¨ª se colocan en posiciones correctas para hacer pases, recibirlo o lanzar a gol. Desde el punto de vista cient¨ªfico es muy interesante que sepan trabajar en equipo para alcanzar el objetivo, y cumplen el ciclo completo de percepci¨®n, cognici¨®n y acci¨®n.

P. ?Nadie los dirige cuando est¨¢n jugando?

R. No. Son completamente aut¨®nomos, no hay control remoto alguno. Los programamos antes del juego, pero cuando empieza el partido dependen completamente de s¨ª mismos.

P. ?Son capaces de aprender?

R. Estos pueden aprender en experimentos, por ejemplo, mejoran su velocidad de desplazamiento, pero en el partido no aprenden mucho. Otras m¨¢quinas s¨ª que lo hacen: las programamos para que obtengan una recompensa (una puntuaci¨®n) si logran el objetivo que marcamos, de manera que se van adaptando con las opciones m¨¢s favorables.

P. Desde hace a?os hay m¨¢quinas que juegan estupendamente al ajedrez, incluso contra campeones mundiales. ?Hay m¨¢s inteligencia en el f¨²tbol que en el ajedrez?

R. Ha habido un desplazamiento respecto a lo que se considera que es inteligencia para una m¨¢quina. Jugar al ajedrez es dif¨ªcil, pero la m¨¢quina normalmente no ve el tablero, ni mueve las piezas, es un ordenador que s¨®lo piensa; por supuesto, las elecciones que hace son inteligentes. Pero los seres humanos lo son en muchos otros aspectos. Al buscar una puerta en el aeropuerto, por ejemplo, hay mucho trabajo de procesamiento y de percepci¨®n: mi avi¨®n est¨¢ en la salida 23 y yo encuentro el camino viendo las se?ales, interpretando las flechas, sabiendo que est¨¢ entre la 20 y la 30... A lo mejor no le parece una actividad muy inteligente, pero hay que llegar a la puerta... Y el f¨²tbol exige una planificaci¨®n para la consecuci¨®n de un objetivo, percepci¨®n, planificaci¨®n, etc¨¦tera.

P. As¨ª que sus robots son inteligentes.

R. Lo son en el sentido de que son aut¨®nomos. En cuanto a si toman siempre decisiones inteligentes.... ?Qu¨¦ es una decisi¨®n inteligente universal? Lo importante es que pueden aprender de la experiencia, cometer un error y mejorar. Y estos robots son un banco de pruebas muy bueno para ensayar la actuaci¨®n en equipo, lo que significa que tienen que intercambiar informaci¨®n entre ellos, repartirse tareas y colaborar. El objetivo de la investigaci¨®n es avanzar en el desarrollo de equipos de robots que se desenvuelvan en entornos llenos de incertidumbre, din¨¢micos, cambiantes.

P. ?Qu¨¦ aplicaciones tendr¨ªan?

R. Imagine un grupo de robots ocup¨¢ndose del tr¨¢fico en una ciudad, cada uno cubriendo un ¨¢rea e intercambiando informaci¨®n y decisiones entre ellos. Otro ejemplo ser¨ªa un equipo de rescate coordinando su actuaci¨®n... con robots que incluso tengan capacidades diferentes pero complementarias, o una granja de vacas donde unas m¨¢quinas orde?an y otras est¨¢n capacitadas para transportar l¨ªquidos.

P. ?Es importante el aprendizaje a trav¨¦s de la experiencia?

R. Es uno de los grandes temas, si no la esencia misma, de la IA, porque cuando escribimos programas para los robots basados en lo que pensamos que va a ser el entorno en el que van a desenvolverse, son incorrectos o incompletos. A menos que programes un robot para que sea capaz de ajustarse a las situaciones, es decir, de aprender, nunca podr¨¢ manejar situaciones complejas. Si entendi¨¦ramos perfectamente c¨®mo aprendemos los humanos, c¨®mo pensamos, c¨®mo hacemos las cosas..., tal vez podr¨ªamos programar los robots igual, pero no lo sabemos; nosotros somos m¨¢quinas que aprenden, y ahora estamos haciendo robots as¨ª.

P. ?Ha avanzado la IA tanto como se esperaba hace 50 a?os?

R. Hace medio siglo se pensaba en computadoras gigantescas que podr¨ªan pensar, capaces de jugar al ajedrez y tomar decisiones inteligentes. Hemos progresado mucho en eso, pero tambi¨¦n en hacer m¨¢quinas que se adapten al entorno. Hace medio siglo, el aprendizaje, la incertidumbre y dem¨¢s eran objetivos lejanos y, sin embargo, se han alcanzado muchos logros concretos.

P. Pero los padres de la IA pensaban en m¨¢quinas similares al cerebro humano y ahora parece que los objetivos son m¨¢s compartimentados.

R. Hay investigadores que siguen persiguiendo la integraci¨®n, el concepto de robot humanoide completo. Pero para integrar necesitas desarrollar m¨²ltiples componentes, abarcar lenguaje natural, traducci¨®n, aprendizaje, planificaci¨®n, etc¨¦tera. Muchos nos ocupamos de profundizar en aspectos concretos. Eso lo hace tambi¨¦n, por ejemplo, la medicina, con muchos m¨¦dicos especializados en ¨®rganos concretos y otros que tienen una visi¨®n m¨¢s global del organismo humano.

P. ?Se imagina un robot humanoide capaz de ser un amigo?

R. La exploraci¨®n de las emociones, como el comportamiento amistoso, es un ¨¢rea de investigaci¨®n en IA, y creo que s¨ª, que es posible. La gente se encari?a con estos perros robot, y se podr¨ªan hacer m¨¢quinas que mostrasen un comportamiento amistoso.

P. ?C¨®mo ser¨¢ la IA dentro de 50 a?os?

R. Espero que haya robots con los humanos, ayud¨¢ndoles. Pienso en m¨¢quinas a las que uno pueda enviar al supermercado a comprar unas flores que se le han olvidado, o que le puedan sustituir en una reuni¨®n, robots que sean ayudantes, asistentes... o coexistentes.