Espa?a tiene un solo inspector por cada 23.300 trabajadores, la mitad que la UE

En Espa?a hay un inspector de trabajo por cada 23.300 ocupados. En la UE (sin contar los pa¨ªses de la ampliaci¨®n), la media es de uno por cada 12.000 empleados. La falta de medios de control es una de las razones que explican que Espa?a se encuentre a la cabeza en siniestralidad laboral, con 6,6 muertos por cada 100.000 trabajadores, frente a los 4,8 de media europea. Pero existen diferencias entre autonom¨ªas. Catalu?a, Comunidad Valenciana y Navarra son las que m¨¢s han reducido los accidentes desde 2004. En el lado opuesto, Castilla-La Mancha, Castilla y Le¨®n, el Pa¨ªs Vasco o Murcia.

Un mill¨®n de trabajadores sufre cada a?o accidentes en sus puestos de trabajo. De ellos, alrededor de un millar fallecen. El incumplimiento de las normas, la elevada temporalidad y la falta de formaci¨®n explican por qu¨¦ la siniestralidad es especialmente grave en Espa?a. Otra raz¨®n es la falta de control. En Espa?a, con 19 millones de ocupados, hay un solo inspector por cada 23.300 trabajadores.

Medios escasos

"Tenemos pocos medios. Necesitamos el doble de inspectores para llegar a la media europea", afirma tajante Dolors Hern¨¢ndez, secretaria de Salud Laboral de UGT. Un total de 790 inspectores est¨¢n en activo en la actualidad, frente a los 739 de 2003, seg¨²n el Ministerio de Trabajo. Adem¨¢s, hay 828 subinspectores. En el acuerdo para la reforma laboral que se acaba de firmar, el Gobierno y los agentes sociales han acordado incluir el compromiso de aumentar casi un 20% la plantilla, hasta 954 inspectores y 968 subinspectores en 2008.

Algunas comunidades ya est¨¢n desarrollando una norma que permite a sus t¨¦cnicos llevar a cabo acciones similares a las de los inspectores. "Van a poder visitar la obra, y si detectan un incumplimiento de la ley pueden hacer un informe y enviarlo al inspector, para que sancione", dice Hern¨¢ndez. "Hay entre 300 y 400 t¨¦cnicos en Espa?a, con ellos duplicar¨ªamos la plantilla de la inspecci¨®n sin mayor presupuesto", a?ade. Las comunidades con m¨¢s inspectores son Andaluc¨ªa, Catalu?a, Madrid y Valencia, que son asimismo las m¨¢s pobladas.

Aunque sigue en niveles elevados, la siniestralidad laboral se ha ido reduciendo en los ¨²ltimos a?os, seg¨²n destaca Enrique Valenzuela, director gerente de la Asociaci¨®n de Mutuas de Accidentes de Trabajo, integrada en la CEOE. "Es cierto que queda mucho por hacer, pero el ¨ªndice de incidencia ha ido reduci¨¦ndose en los ¨²ltimos 10 a?os, desde la entrada en vigor de la Ley de Prevenci¨®n de Riesgos Laborales", explica. En cuanto a accidentes mortales, la cifra era de 9,7 v¨ªctimas por 100.000 trabajadores en 1996. En 2005, el ¨ªndice se situ¨® en 6,6 muertos.

En la UE-15, esta cifra es de 4,8 muertos. Dolors Hern¨¢ndez opina que la diferencia se debe, entre otras cosas, a la falta de cumplimiento de las normas en Espa?a y la falta de formaci¨®n en prevenci¨®n. "Con repartir un folleto no basta", afirma. Adem¨¢s, la responsable de UGT cree que falta una mayor integraci¨®n de la prevenci¨®n en las empresas (el 90% externaliza los servicios de prevenci¨®n). "La elevada temporalidad, rotaci¨®n y precariedad son tambi¨¦n clave", a?ade. El 33% de los contratos en Espa?a son temporales, lo que supone un r¨¦cord europeo, y un 60% de los accidentes los sufren esos empleados temporales.

Valenzuela puntualiza que es dif¨ªcil analizar las diferencias con la UE, ya que los datos no son comparables: "En Noruega no hay que declarar el accidente para recibir prestaci¨®n, ya que ¨¦sta es universal. En Espa?a, si no lo declaras, no hay prestaci¨®n".

En siniestralidad, tambi¨¦n hay diferencias entre comunidades. Los resultados tienen mucho que ver con la pol¨ªtica de los respectivos gobiernos aut¨®nomos: los ¨ªndices bajan cuantas m¨¢s acciones espec¨ªficas de prevenci¨®n y control llevan a cabo ¨¦stos, y cuando dichas pol¨ªticas cuentan con el consenso de empresarios y sindicatos.

Las que peor han hecho los deberes, como Castilla-La Mancha, Baleares o Pa¨ªs Vasco, tienen una incidencia de siniestralidad (accidentes por cada 100.000 trabajadores) m¨¢s alta que la media espa?ola.Todas las comunidades desarrollan planes y actuaciones espec¨ªficos en materia de salud laboral y seguridad en el trabajo. Pero las intensidades son distintas. La comunidad manchega y Extremadura, ambas socialistas, son las ¨²nicas que no tienen planes de acci¨®n preferente, orientados a marcar las empresas de mayor siniestralidad.

"Muchas empresas incumplen la ley. S¨®lo el 4% de las que han registrado alguno cumplen la normativa. Actuar sobre todas es pr¨¢cticamente imposible, pero s¨ª se puede sobre un n¨²mero m¨¢s reducido. Sabemos que la mitad de los accidentes se concentran en 50.000 empresas; hay que ir a por ellas", explica Joaqu¨ªn Nieto, secretario confederal de Medio Ambiente y Salud Laboral de CC OO. Esta es la filosof¨ªa de los planes de acci¨®n preferente, que emprendi¨® Arag¨®n en 1998 y a la que ha seguido el resto de comunidades. Hoy es la segunda autonom¨ªa con un ¨ªndice de siniestralidad menor.

Catalu?a lleva haciendo lo mismo desde 2005, con un presupuesto de 100 millones de euros hasta 2008. Seleccion¨® a 845 empresas, con casi 220.000 trabajadores, que en 2004 concentraron el 18% de los accidentes laborales. En febrero pasado, lanz¨® una iniciativa pionera: envi¨® cartas a las 5.000 con m¨¢s accidentes adjunt¨¢ndoles una lupa con el siguiente mensaje: "Su empresa no tiene un peque?o problema, su empresa tiene un gran problema". El correo inclu¨ªa un manual para identificar y evaluar los riesgos laborales.

Un problema "de todos"

La ¨²ltima campa?a es un anuncio televisivo que identifica a los patronos como los principales culpables de esta lacra, lo que suscitado las cr¨ªticas de algunas patronales, como Cecot, que entiende que es un problema "de todos". Desde 2005, Catalu?a ha reducido el ¨ªndice de incidencia un 10,45% y se ha situado por debajo de la media nacional. En dos a?os, ha ingresado 17,4 millones en sanciones impuestas por incumplir la normativa de prevenci¨®n, que revierten exclusivamente en m¨¢s acciones protectoras, como en Canarias.

Andaluc¨ªa, en cambio, cuyo ¨ªndice de siniestralidad rebasa el del conjunto de Espa?a, acaba de lanzar una campa?a de sensibilizaci¨®n entre los trabajadores. Se centra en los pol¨ªgonos industriales y en las grandes f¨¢bricas.

Nieto destacar Navarra como otra de las comunidades que "se ha tomado en serio" los planes de acci¨®n preferente. En paralelo, el Gobierno aut¨®nomo, uno de los que cuenta con m¨¢s t¨¦cnicos de prevenci¨®n por 100.000 trabajadores, desarrolla un plan espec¨ªfico para la identificaci¨®n y declaraci¨®n de enfermedades profesionales, lo que evita que acaben derivando en accidentes.