La UMA crea una fundaci¨®n para fomentar la inserci¨®n laboral con estudios del mercado
El n¨²mero de pr¨¢cticas remuneradas en empresas aumenta un 22% en los ¨²ltimos dos a?os
La Universidad de M¨¢laga (UMA) prosigue con su objetivo de estrechar lazos con el mundo empresarial malague?o. El pasado mes de abril se constituy¨® la Fundaci¨®n Observatorio Universidad-Empresa, cuyo objetivo prioritario es fomentar la inserci¨®n laboral de los estudiantes y en la que participan como patronos la C¨¢mara de Comercio y la Confederaci¨®n de Empresarios. Para lograr tal fin, esta fundaci¨®n ha encargado a una empresa que realice un estudio del mercado laboral en la provincia para determinar cu¨¢les son las demandas de conocimiento del mercado.
Cuando fije la demanda en los distintos sectores, la UMA adaptar¨¢ la formaci¨®n de los estudiantes a trav¨¦s de iniciativas que la fundaci¨®n brindar¨¢ a los universitarios, como cursos de postgrado o la creaci¨®n o modificaci¨®n de titulaciones para que se ajusten a la demanda real. Adem¨¢s, la UMA promover¨¢ m¨¢s becas de estudio e investigaci¨®n y programas de formaci¨®n continua.
Esta iniciativa refuerza la apuesta de la Universidad por acercar a los estudiantes al tejido productivo. Algo que se refleja en el incremento de los convenios de pr¨¢cticas remuneradas suscritos con empresas desde 2003. En este periodo se ha pasado de 1.018 a 1.603 convenios cerrados en 2005. Seg¨²n explica el vicerrector de Cooperaci¨®n Empresarial, Juan Jos¨¦ Borrego, alrededor de 2.400 estudiantes de los 10.000 matriculados en los ¨²ltimos cursos est¨¢n haciendo pr¨¢cticas remuneradas, lo que supone un 20% m¨¢s que en 2003 (1.978). Este es un matiz fundamental, puesto que si la empresa tiene que pagar por tener a un alumno en pr¨¢cticas, le exigir¨¢ m¨¢s y, como contrapartida, el estudiante tendr¨¢ que rendir cuentas, "lo que enriquece la relaci¨®n laboral, ya que un amplio porcentaje de empresas contrata al estudiante que ha formado", destaca el vicerrector.
Otro tipo de pr¨¢cticas, ¨¦stas no remuneradas pero imprescindibles para la formaci¨®n, son las docentes. Los 50 alumnos de la diplomatura de Podolog¨ªa se han beneficiado de este ellas. Desde marzo, la Escuela de Ciencias de la Salud cuenta con una unidad docente asistencial de Podolog¨ªa, similar a la que existe en la Hispalense y en la Complutense. En esta cl¨ªnica equipada los alumnos realizan sus primeros pinitos con pacientes reales. "Completan su formaci¨®n y adquieren un bagaje muy ¨²til para lograr un puesto de trabajo", explica Mar¨ªa Teresa Labajos, directora la Escuela. Bagaje que ayer demostraban ante el coordinador de la titulaci¨®n, Jos¨¦ Antonio Cervera, tres alumnos de primero de Podolog¨ªa.
Miguel ?ngel Canca prestaba sus pies a su compa?ero Eduardo Alonso, quien se afanaba con el instrumental para eliminar las durezas de la planta del pie bajo la mirada de su colega Cristina Mart¨ªnez. "Es vital para nosotros, porque si no, d¨®nde ¨ªbamos a realizar las pr¨¢cticas", indica el simulado paciente. Los tres se enfrentar¨¢n pronto con pacientes reales, venidos de la calle a tratarse a esta cl¨ªnica. "Se har¨¢n convenios con distintos colectivos, residencias de la tercera edad o clubes deportivos", explica Labajos. Los precios para los usuarios ser¨¢n los que tiene establecidos el Colegio de Podolog¨ªa "para no hacer competencia desleal a nadie".
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