Zapatero pide a Rajoy "altura de miras" y que se avenga a pactar el Estatuto de Andaluc¨ªa

El Estatuto de Andaluc¨ªa ha empezado ya su andadura en las Cortes al ser aprobado anoche con los votos a favor de todos los grupos parlamentarios excepto los del Partido Popular. A las 22.10, 187 diputados votaron s¨ª, frente a 136 noes del Grupo Popular. El proyecto de reforma ha sido tomado en consideraci¨®n para que comience su tramitaci¨®n a partir del mes de septiembre. El Estatuto sali¨® anoche aprobado con el voto de los "insolidarios y ego¨ªstas nacionalistas", ironiz¨® el portavoz del PNV en este debate, Aitor Esteban. Ayer votaron a favor de la tramitaci¨®n PSOE, CiU, ERC, PNV, IU-ICV, Cha, BNG y EA, con lo que es el tercer Estatuto tomado en consideraci¨®n, tras el valenciano y el catal¨¢n, ya que el texto llegado del Parlamento vasco, el plan Ibarretxe, no fue admitido a tr¨¢mite. Zapatero pidi¨® al l¨ªder del PP, Mariano Rajoy, que se aviniera al consenso durante la tramitaci¨®n del Estatuto y Rajoy, tras un discurso de gran dureza y votar no, tambi¨¦n habl¨® de consenso.

Duran se felicita de que Catalu?a haya servido siempre para marcar la pauta de otros Estatutos de autonom¨ªa

Rajoy acusa a Zapatero de "debilitar" al Estado, "romper" todos los consensos y carecer de una "idea de Espa?a"

El presidente asegura que el Estado tendr¨¢ capacidad de intervenir en la pol¨ªtica del agua

Todos los portavoces, a excepci¨®n de Zapatero, aludieron profusamente al Estatuto de Catalu?a

El presidente del Gobierno afirma que la esencia del modelo auton¨®mico es la "cooperaci¨®n" con el Estado

Pero sobre el texto andaluz gravit¨® durante todo el debate la sombra intensa del Estatuto de Catalu?a, ya que todos los oradores, a excepci¨®n del presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, se extendieron en comparar, glosar, resaltar o atacar el Estatuto de Catalu?a. En el discurso del l¨ªder del PP, Mariano Rajoy, la referencia catalana fue constante y le sirvi¨® para lanzar un dur¨ªsimo ataque, muy personal, contra el presidente del Gobierno. "El Estatuto de Catalu?a les ha obligado a huir hacia delante para no reconocer un fracaso manifiesto. Y se han propuesto hacer lo mismo con el Estatuto de Andaluc¨ªa que, as¨ª, se convierte en la gran coartada de su incompetencia catalana". El l¨ªder del PP cit¨® 17 veces a Catalu?a. La dureza de Rajoy, que vino a continuaci¨®n, contrast¨® con el discurso inicial y tambi¨¦n final, del jefe del Gobierno, nada agresivo, con apelaciones al progreso de Andaluc¨ªa y a la necesidad de la reforma estatutaria para dar un salto en su desarrollo.

Zapatero pidi¨® a Mariano Rajoy un esfuerzo para atender la demanda de los andaluces que "llaman a la puerta" de las Cortes. "Podemos atenderles juntos. Se requiere, eso s¨ª, algo de generosidad, mucha altura de miras y tambi¨¦n un poco de memoria". Zapatero recomend¨® al PP que no se equivoque como ocurri¨® en 1980, cuando la derecha no aprob¨® el Estatuto. "La reincidencia en el error puede resultar comprensible en los comportamientos individuales, pero no tiene disculpa en responsables pol¨ªticos". El presidente se?al¨® que Andaluc¨ªa tiene "una aspiraci¨®n ante la que no cabe responder con portazos o con desplantes".

En este primer debate, el jefe del Ejecutivo adelant¨® que algunos aspectos cambiar¨¢n para salvaguardar los poderes del Estado. Se refer¨ªa a la potestad sobre el r¨ªo Guadalquivir. Andaluc¨ªa participar¨¢ "decisivamente" en la pol¨ªtica de gesti¨®n y uso del agua en su territorio pero se mantendr¨¢n las capacidades de intervenci¨®n del Estado". Zapatero pidi¨® que nadie se empe?e en leer los Estatutos en clave de "si restan o suman competencias al Estado, porque la esencia del modelo auton¨®mico es la cooperaci¨®n".

Pero el l¨ªder del PP no se refiri¨® al agua ni a aspectos concretos del Estatuto -actitud que le reprocharon los dem¨¢s portavoces-, aunque s¨ª lo tild¨® de inconstitucional, y aprovech¨® vech¨® para acusar a Zapatero de continuar con el proceso de "debilitamiento del Estado". "Usted, se?or Zapatero, no puede defender una idea de Espa?a porque no la tiene". Y continu¨® las descalificaciones ante la mirada grave de Zapatero y de la delegaci¨®n parlamentaria andaluza, que no esperaban un discurso tan duro como el de Rajoy. "Usted ha roto todos los consensos y entendimientos de este pa¨ªs", prosigui¨® Rajoy, para relacionar despu¨¦s los Estatutos catal¨¢n y andaluz. "Ustedes han fusilado m¨¢s de cien enmiendas del Estatuto de Catalu?a", se?al¨® Rajoy. A qu¨¦ viene, pregunt¨®, "el prurito nacionalista" de llamar a Andaluc¨ªa "realidad nacional". A su juicio, con esta reforma Andaluc¨ªa se convierte en "la hermana peque?a de Catalu?a". A¨²n as¨ª, Rajoy llam¨® al PSOE al consenso y a "hacer juntos" un nuevo Estatuto. Pero no hay contienda si no hay, al menos, dos partes en liza. Y Zapatero no quiso pelea.

Las r¨¦plicas duras quedaron p ara el presidente del Grupo Socialista, Diego L¨®pez Garrido, que pidi¨® respeto para Andaluc¨ªa y que dejara de "catalanizar" el Estatuto andaluz, llevado de su "catalanofobia". L¨®pez Garrido pidi¨® respeto para los ciudadanos de Catalu?a y Andaluc¨ªa, que son realidades diferentes, en tanto que el l¨ªder de IU, Gaspar Llamazares, constataba que Rajoy, pero no s¨®lo, pelea con "una sombra", la de Catalu?a.

Pero en el debate, para sorpresa de los invitados y representantes del Parlamento de Andaluc¨ªa, se continuaba hablando de Catalu?a. El portavoz de CiU, Josep Antonio Duran Lleida, se alegr¨® de que en el Estatuto andaluz figuren elementos de Catalu?a e invit¨® al PP a que echara un vistazo a los Estatutos vigentes, votados por el PP, para apreciar la huella del Estatuto catal¨¢n. El portavoz de ERC, Joan Puigcerc¨®s, aprovech¨® para arremeter contra el pacto de Zapatero con CiU.

Hubo algunos conatos de trifulca pero el presidente del Congreso, Manuel Mar¨ªn, consigui¨® que las aguas no salieran de su cauce. Fue durante la intervenci¨®n del representante socialista del Parlamento andaluz, Manuel Gracia, que acus¨® a Rajoy de "despreciar y hacer burla" del trabajo del Parlamento andaluz.