Ascensi¨®n y ca¨ªda de una Monarqu¨ªa doctrinaria

Escribe la historiadora Genoveva Garc¨ªa Queipo de Llano en el pr¨®logo de El reinado de Alfonso XIII: "Hasta 1926, el r¨¦gimen dictatorial [Miguel Primo de Rivera] apenas tuvo oposici¨®n. Esta fecha es decisiva, porque a partir de ella, Primo de Rivera intent¨® la institucionalizaci¨®n de su r¨¦gimen, cuesti¨®n en la que fracas¨® rotundamente, alcanzando este fracaso a la propia figura del monarca. No fue el rey, sino su propia indecisi¨®n y su carencia de capacidad para imaginar una salida al r¨¦gimen dictatorial las que explican que abandonara el poder en 1931. La ca¨ªda de la Monarqu¨ªa abri¨® un periodo cr¨ªtico en la historia espa?ola, cuya dificultad nac¨ªa, precisamente, de lo problem¨¢tico de un tr¨¢nsito en paz desde un r¨¦gimen dictatorial a otro de constitucionalismo liberal. Los v¨ªnculos entre el monarca y los miembros de los partidos conservador y liberal no se hab¨ªan roto de forma absoluta. Pero en ese momento no s¨®lo era necesario restablecer estos v¨ªnculos personales, sino tambi¨¦n imaginar una modificaci¨®n profunda de la vida pol¨ªtica nacional que ya sent¨ªa como irremediable, aunque para los pol¨ªticos no lo fuera de manera apremiante".

El volumen El reinado de Alfonso XIII, de la colecci¨®n La mirada del tiempo, que ma?ana presenta EL PA?S, comienza con una gran fotograf¨ªa de la familia real en el palacio de Oriente, realizada por Francisco Go?i en 1905. La ¨²ltima imagen, tambi¨¦n a doble p¨¢gina, es del 15 de abril de 1931, el d¨ªa siguiente de la proclamaci¨®n de la Segunda Rep¨²blica, en la que la reina Victoria Eugenia y sus hijos emprenden el exilio en un tren desde las cercan¨ªas de El Escorial. La foto es de D¨ªaz Casariego.