Doble anivesario del mel¨®mano
I?aki A?¨²a celebra 30 a?os del Festival de Jazz de Vitoria y 25 de la Semana de M¨²sica Antigua, ambas siempre bajo su direcci¨®n
Naci¨® en 1943 en el centro de su ciudad, en la Plaza de Espa?a de Vitoria, en un 21 de junio, y parece premeditada la fecha para un mel¨®mano, ya que en esa jornada d¨ªa se celebra todos los a?os el D¨ªa Europeo de la M¨²sica. "No creo que lo hayan puesto en mi honor", bromea I?aki A?¨²a, director del Festival de Jazz de Vitoria, que celebra este a?o sus tres d¨¦cadas con un cartel de lujo con Sonny Rollins y Paco de Luc¨ªa como figuras destacadas.
El ¨¦xito de la muestra responde a la pasi¨®n de A?¨²a por el jazz, que le inocul¨® su hermano mayor, Javier, quien, con Luis Abaitua, hac¨ªa en los 50 una emisi¨®n de jazz en Radio Vitoria.
Como los aficionados exclusivos de entonces, Javier A?¨²a estaba suscrito a las revistas francesas de culto: Jazz Hot, Jazz Magazine y Cahiers de Jazz. "Lo m¨¢s dif¨ªcil era conseguir los discos; afortunadamente, ten¨ªamos la suerte de que Abaitua, que estudiaba ingeniero en Suiza, nos prove¨ªa, lo mismo que mi hermano, que sol¨ªa acudir a Francia".
"A un m¨²sico le puedes hablar siempre de lo maravilloso que es, pero nunca de otros m¨²sicos"
A?¨²a pone fecha a los primeros conciertos de esta m¨²sica en la ciudad: "Con 17 a?os, me encuentro a Pep¨ªn Nieto [Jos¨¦ Nieto, Premio Nacional de M¨²sica y destacado compositor de bandas sonoras] tocando la bater¨ªa en un hotel durante las fiestas de La Blanca. Y entre los dos organizamos unas jam session con aquellos m¨²sicos de las orquestas que ven¨ªan a la ciudad que les gustaba el jazz. ?se fue el embri¨®n".
De aquellas veleidades juveniles a montar conciertos en serio hay un largo camino, durante el que nunca pens¨® que alg¨²n d¨ªa se dedicar¨ªa s¨®lo a ello. "Yo ten¨ªa mi negocio y s¨®lo hab¨ªa presentado a una banda de dixieland, cuando los de la Caja Provincial me llamaron 15 d¨ªas antes de la tercera edici¨®n y me pidieron que organizara algo, que los anteriores responsables no segu¨ªan". Se puso manos a la obra y llev¨® a Vitoria a formaciones catalanas como el grupo de Tete Montoli¨².
Ya en la cuarta edici¨®n present¨® a Oscar Peterson, "la primera vez que ven¨ªan m¨²sicos negros a tocar jazz a Vitoria", rememora.
Poco a poco, el festival va cogiendo empaque: Muddy Waters, Ella Fitzgerald, Jaco Pastorius,... "En principio, la oficina del festival estaba en mi casa y el tel¨¦fono era el m¨ªo, pero al final llega un momento en que tengo que dedicarle toda mi vida". Y se suceden las grandes figuras, como Miles Davis. "Recuerdo aquel concierto, la versi¨®n tan lenta y bluesy que toc¨® del Tutu permanece en la memoria de todos los que estuvieron all¨ª", comenta. Tras la actuaci¨®n, A?¨²a pas¨® al camerino a charlar con el trompetista. "Y tuve un peque?o encontronazo, porque a un m¨²sico le puedes hablar siempre de lo maravilloso que es ¨¦l, pero nunca de otros m¨²sicos. Y ah¨ª met¨ª la pata, porque le pregunt¨¦ qu¨¦ pas¨® con el pianista Thelonius Monk en una famosa grabaci¨®n [que hab¨ªa acabado muy mal] Y lo que coment¨® Miles es irreproducible".
Las amistades de A?¨²a con los m¨²sicos que llegan a Vitoria son conocidas. Muchas de ellas, fruto de la intensidad con que lleva las negociaciones: "Por ejemplo, me ha llevado tres a?os conseguir que este a?o toquen juntos Paco de Luc¨ªa y Winton Marsalis". Tambi¨¦n les mima. Son famosas las invitaciones gastron¨®micas con que les obsequia: "Una buena comida y un buen Rioja funcionan como una mano de vaselina; los m¨²sicos se quedan encantados y luego dan un concierto estupendo".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.