Los primeros madrile?os llegaron hace 500.000 a?os
Los restos paleontol¨®gicos hallados en la M-30 adelantan 1.500 siglos los asentamientos humanos
Madrid tuvo a sus primeros pobladores hace unos 500.000 a?os. Hasta ahora, la edad fijada para los primeros asentamientos era de unos 350.000 a?os. Lo que ha permitido retrasar la fecha 1.500 siglos han sido los restos paleontol¨®gicos del pleistoceno hallados durante las excavaciones que dirige la Direcci¨®n General de Patrimonio, que depende de la Consejer¨ªa de Cultura y Deportes, en las obras de reforma de la M-30.
El equipo de arque¨®logos y ge¨®logos especializados en paleontolog¨ªa de Patrimonio, que supervisa los trabajos de campo que desde hace casi dos a?os se realizan en el per¨ªmetro de la M-30, explic¨® ayer a EL PA?S los descubrimientos m¨¢s importantes. "Ninguna obra de la capital ha sido de esta envergadura por el ritmo de los trabajos y el espacio tan amplio donde se produc¨ªan. En poco tiempo y con enormes movimientos de tierra hemos obtenido gran cantidad de informaci¨®n y creemos que no se ha perdido nada", explic¨® una responsable de Patrimonio. Como el resto de los profesionales, ¨¦sta ha preferido mantenerse en el anonimato para destacar el trabajo en equipo.
El grupo est¨¢ formado por 16 equipos arqueol¨®gicos -formados por entre 5 y 10 personas, con capacidad de aumentar hasta los 35 en caso de una intervenci¨®n urgente- coordinados por una comisi¨®n cient¨ªfica, formada por cinco investigadores de diferentes universidades, as¨ª como un equipo t¨¦cnico de siete miembros. Estos ¨²ltimos supervisan, estudian, clasifican, y dan las indicaciones de d¨®nde deben excavar los arque¨®logos a pie de obra.
Una de las labores m¨¢s importantes de este equipo t¨¦cnico ha sido la de predecir d¨®nde deb¨ªan hacerse las excavaciones. Para ello, elaboraron un estudio hist¨®rico, que completaron con el an¨¢lisis geol¨®gico de la zona. "?sta ha sido una de las novedades de la obra: la incorporaci¨®n de la geolog¨ªa como ciencia predictiva sobre el patrimonio", explican. Es decir, los t¨¦cnicos elaboraron un mapa de las zonas donde potencialmente hab¨ªa restos arqueol¨®gicos y, a partir de ¨¦l, han ido organizando las catas. Patrimonio ha dise?ado un plan de divulgaci¨®n de los hallazgos de la M-30, que contempla una publicaci¨®n y una gran exposici¨®n cuando acabe el trabajo de campo, a finales de a?o. "Tardaremos dos a?os m¨¢s en procesar y estudiar los restos", dicen. "Un mes de campo significan ocho meses de despacho". A finales de este a?o, est¨¢ previsto un avance: una muestra en el museo de San Isidro permitir¨¢ ver los restos m¨¢s importantes. ?stos son algunos de ellos:
Hace 9 o 15 millones de a?os. Microvertebrados
Seg¨²n los t¨¦cnicos de Patrimonio, una de las ventajas de la obra de la M-30 ha sido poder excavar y hacer catas a enorme profundidad. En Legazpi, donde se construyen los t¨²neles del by-pass sur, las catas han llegado hasta los 70 metros. En esta zona han sido encontradas poblaciones de microvertebrados del terciario (hace entre 9 y 15 millones de a?os) de los que no se ten¨ªa conocimiento.
Hace 9.500 a?os. Yacimiento epipaleol¨ªtico
Dos zonas de catas, una de ellas a¨²n en excavaci¨®n, situadas junto a la A-3 (la autov¨ªa de Valencia), han permitido encontrar restos de ¨²tiles l¨ªticos y varios hogares que corresponden a los ¨²ltimos cazadores-recolectores. "Es un hallazgo de mucha relevancia porque en toda la meseta no hay yacimientos de este periodo. En cambio, s¨ª hay muchos en la cornisa Cant¨¢brica y en Levante", recalcan en Patrimonio.
Tambi¨¦n aclaran que al ser pueblos n¨®madas es dif¨ªcil encontrar asentamientos como los hallados en la M-30, donde al haberse encontrado varios hogares los t¨¦cnicos explican que el asentamiento fue m¨¢s o menos permanente. En esta zona se han tomado muestras org¨¢nicas para datar los restos con carbono 14, adem¨¢s de hacerse moldes de los hogares para estudiarlos en profundidad.
Imperio Romano. Una villa bajo La Riviera
La presencia romana en la capital es bastante escasa y poco documentada, por lo que el hallazgo de una villa romana hace indicar que hubo establecimientos agr¨ªcolas junto al r¨ªo en este periodo. Los restos arqueol¨®gicos est¨¢n en una franja muy peque?a acotada por las pantallas de la actual calzada de la M-30, junto al puente de Segovia. "Suponemos que hay m¨¢s debajo de la sala La Riviera, la calzada actual y las casas que hay al lado", aseguran los arque¨®logos.
Lo estudiado hasta el momento permite afirmar que hubo una superposici¨®n de construcciones romanas. Adem¨¢s, el hallazgo de estucos pintados y cer¨¢micas de buena calidad indican que el due?o de la villa era de importancia. En el mismo yacimiento han sido encontradas monedas.
Siglo XV. Puente de Segovia
El hallazgo de un pilar con tajamar y el arranque de dos arcos de medio punto de lo que fue el antiguo puente de Segovia o puente segoviana (a unos 95 metros al norte del actual) ha permitido estudiar esta construcci¨®n medieval anterior al actual puente de Segovia que fue la primera construcci¨®n hidr¨¢ulica de la capital y de la que apenas hay documentaci¨®n. "Se les cay¨® sucesivamente y hay indicios de diferentes reconstrucciones", explica uno de los arque¨®logos.
Siglo XV Puente de Toledo
Del puente precursor del actual puente de Toledo aparecieron seis pilas (aguas abajo de la actual pasarela) con el arranque de los arcos. "Sufri¨® distintas reconstrucciones. Se les ca¨ªa continuamente", explica un arque¨®logo. "Porque la distancia entre los arcos era inferior a la necesaria y cualquier avenida los arrasaba". La construcci¨®n es diferente a la del actual puente de Toledo, pues no constan pilas de madera, que son las que mantienen la estabilidad de la construcci¨®n. Eso permite avanzar la hip¨®tesis de que probablemente su inestabilidad llev¨® a la idea de construir un nuevo puente, m¨¢s monumental.
Los t¨¦cnicos han observado que se produjo un enterramiento natural del puente provocado por el r¨ªo, donde se fueron acumulando arenas. Y lo achacan a dos posibles fen¨®menos: que hubiera un ciclo mayor de r¨ªo o que la ganader¨ªa deforestara la cabecera del r¨ªo, lo que provoc¨® la erosi¨®n de todo el ¨¢rea.
Siglo XVII Real Canal del Manzanares
Durante el reinado de Carlos III comienza a ejecutarse el proyecto ut¨®pico de conectar Madrid con Portugal por v¨ªa fluvial. La intenci¨®n era hacer navegable el r¨ªo Manzanares -al que ser¨ªa inyectada agua desde el Guadarrama- hasta el Tajo. Y el objetivo de esta empresa no era otro que potenciar el comercio y el traslado de mercanc¨ªas por esta v¨ªa fluvial. Pero el plan decay¨® porque se hundi¨® la presa del Gasco y lo hizo inviable. Nunca se recuper¨® porque dos siglos despu¨¦s comenz¨® a desarrollarse el ferrocarril en Espa?a.
Cerca de la glorieta de Pir¨¢mides, bajo el paseo de Yeser¨ªas, ha sido encontrada la cabecera del canal y, junto al puente de Praga, restos de lo que fue el embarcadero. "Se pensaba que el canal estaba destruido por el desarrollo urbano de la capital", explican desde Patrimonio. "Una parte discurre hoy bajo la calzada actual de la M-30".
La direcci¨®n general tiene previsto desmontar los restos arqueol¨®gicos y reconstruirlos en superficie, en lo que el alcalde Alberto Ruiz-Gallard¨®n llama la alfombra verde. Ayuntamiento y Comunidad prev¨¦n exponer estos hallazgos en el futuro parque de las riberas del Manzanares, cuando quede soterrada la M-30.
Siglo XIX. Pont¨®n de San Isidro
Un cimiento y la balizada del que fue pont¨®n de San Isidro han sido localizados aguas arriba del estadio Vicente Calder¨®n, bajo el paseo de Yeser¨ªas. Esta construcci¨®n hidr¨¢ulica es de escaso inter¨¦s arquitect¨®nico, seg¨²n los t¨¦cnicos de Patrimonio, pues no ten¨ªa m¨¢s que unos pilares, probablemente con un paso de madera en la parte superior.
"Probablemente no ten¨ªa ni arcos", apuntan. No se ha podido excavar m¨¢s all¨¢, porque los restos est¨¢n bajo la calzada y el puente actual de San Isidro.
Siglo XIX. Lavadero del puente de Toledo
La excavaci¨®n de mayor superficie de toda la obra de la M-30 ha sido la del lavadero de Policarpo Herrera, que funcion¨® hasta el siglo XX. Encontrar los restos ha permitido advertir diferentes fases de remodelaci¨®n del edificio y usos que se desconoc¨ªan, como el tratamiento de la lana.
Finales del siglo XIX. Horno
La excavaci¨®n junto al puente de Praga sac¨® a la luz un horno comunal de pan, del que no existe documentaci¨®n hist¨®rica. "Por eso no hemos podido anticiparnos a la obra y ha sido seccionado por una pantalla de la obra actual", se lamentan los t¨¦cnicos. "Inicialmente pudo ser una estructura relacionada con el agua, como un molino, porque los muros son demasiado altos para un horno", explican. "Pero luego se reutiliz¨® y, en fechas recientes pudo usarse como habitaci¨®n".
Patrimonio tambi¨¦n cita un yacimiento neol¨ªtico (4.000 a?os antes de Cristo) en el nudo de O'Donnell; y la antigua casa de empleados del palacio de Los Vargas, junto al Campo del Moro, como alguno de los mejores hallazgos.
Diferentes ¨¦pocas. F¨®siles en la Casa de Campo
Hasta 1.500 restos de f¨®siles de diferentes animales han aflorado en los t¨²neles junto a la Casa de Campo. "Lo m¨¢s caracter¨ªstico son los restos de faunas con hispanotherium, un tipo de rinoceronte sin cuerno, m¨¢s gr¨¢cil, alto y con piernas m¨¢s largas", explica una ge¨®loga-paleont¨®loga. Tambi¨¦n hay ejemplares de ciervos, b¨®vidos, anquiterium (un caballo m¨¢s peque?o y con tres dedos), tortugas, suidos (similar al cerdo y el jabal¨ª) y ant¨ªlopes.
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