"No fue penalti"
El 8 de julio de 1990 en el minuto 85 de la final Alemania-Argentina en Roma el ginec¨®logo mexicano Edgardo Codesal, ¨¢rbitro del partido, ayud¨® a parir un penalti inexistente contra Argentina que decidi¨® el Mundial. Con gesto grave y nervios de acero, el defensa izquierdo Andreas Brehme, que hoy tiene 45 a?os y entonces jugaba en el Inter de Mil¨¢n, tir¨® el penalti que casi consigui¨® parar el portero argentino Goycoechea. Alemania consegu¨ªa as¨ª su tercer t¨ªtulo mundial.
Pregunta. En la final del Mundial de 1990 marc¨® usted el penalti decisivo que supuso el 1-0 contra Argentina y el t¨ªtulo para Alemania. Ahora que ya ha prescrito, sea sincero. ?Fue penalti?
Respuesta. No. Hubo penalti antes, a Klaus Augenthaler. Pero el que yo marqu¨¦ no lo hab¨ªa sido.
"En el primer partido contra Costa Rica, los jugadores no se comunicaron entre s¨ª. Eso debe cambiar"
"El f¨²tbol se ha hecho m¨¢s r¨¢pido en Alemania, pero los jugadores no tienen buena formaci¨®n t¨¢ctica"
P. Usted, como defensa sabe que fue una entrada correcta.
R. S¨ª, claro, pero es peligroso hacerla en el ¨¢rea.
P. ?Qu¨¦ sinti¨® frente al bal¨®n antes de chutar? ?Pens¨® en algo particular?
R. Lo peor fue la espera de seis o siete minutos antes de que pudiera tirarlo. Los argentinos estuvieron discutiendo ese tiempo con el ¨¢rbitro y sacaron el bal¨®n del campo.
P. Eso le pone a uno nervioso.
R. S¨ª, pero cuando me met¨ª en el ¨¢rea me concentr¨¦ en el disparo.
P. ?Pens¨® 'tiro bajo y por la izquierda' o fue espont¨¢neo?
R. No, ya me hab¨ªa decidido por esa esquina antes de disparar.
P. ?Y por el pie tambi¨¦n? Usted jugaba igual con la derecha o la izquierda.
R. Los penaltis los lanzaba siempre con la derecha. Nunca con la izquierda.
P. ?Y el portero argentino Goycoechea no lo sab¨ªa?
R. No lo s¨¦. Tendr¨ªa que pregunt¨¢rselo a ¨¦l.
P. Usted sab¨ªa que ¨¦l era un buen portero que hab¨ªa parado cuatro penaltis en el Mundial.
R. S¨ª, un gran portero, sobre todo en los penaltis. Por eso me alegr¨¦ mucho de marcar.
P. ?Se le recompens¨® personalemente de alguna manera? Aparte de la gloria.
R. No, de ning¨²n modo. ?Por qu¨¦?
P. Ni idea.
R. Todo el equipo gan¨®. No s¨®lo un jugador.
P. Usted jug¨® en tres mundiales, M¨¦xico en 1986, Italia en 1990 y Estados Unidos en 1994. ?Podr¨ªa usted describir c¨®mo cambi¨® el f¨²tbol en ese tiempo?
R. Se ha hecho m¨¢s r¨¢pido, pero la t¨¢ctica ha empeorado.
P. ?Significa que es cada vez m¨¢s aburrido?
R. Los jugadores no tienen buena formaci¨®n t¨¢ctica.
P. ?Se refiere a Alemania, o al f¨²tbol en conjunto?
R. Me refiero al f¨²tbol alem¨¢n.
P. Usted jug¨® tambi¨¦n en Italia y en Espa?a, en el Inter de Mil¨¢n y en el Zaragoza. ?C¨®mo fueron esas experiencias?
R. Sensacionales. Estuve rodeado de gente estupenda en los dos pa¨ªses. Fue muy bonito.
P. ?Y en Zaragoza?
R. Zaragoza me gusta mucho. Una ciudad muy bonita, gente simp¨¢tica y un gran equipo.
P. Usted se cas¨® all¨ª con una espa?ola
R. S¨ª, pero de eso hace ya 20 a?os.
P. ?Se han divorciado?
R. ?No!
P. ?Sigue usted con Pilar?
R. Claro. ?Es mi mujer!
P. Funcion¨®
R. S¨ª, muy bien incluso.
P. Usted volvi¨® a la Bundesliga, y fue campe¨®n con el Kaiserslautern a los 37 a?os. ?Es un r¨¦cord?
R. No s¨¦ si ser¨¢ alg¨²n r¨¦cord, pero es verdad.
P. Beckenbauer dice que los jugadores de hoy son demasiado formales, que no abren la boca. Cuando usted jugaba con Matth?us, ¨¦l le tir¨® un zapato en los vestuarios, y usted le gritaba. ?Es eso cierto?
R. Es normal, a veces nos grit¨¢bamos, pero le aseguro que no era nada grave.
P. ?Y comparte usted la opini¨®n de Beckenbauer?
R. Da la impresi¨®n de que ahora los jugadores se comunican poco entre s¨ª.
P. ?Y a qu¨¦ se debe?
R. Es cosa de ellos. Nadie puede obligarlos.
P. Como entrenador ?pudo usted corregir esto?
R. S¨ª, les dec¨ªa que deb¨ªan comunicarse y ayudarse unos a otros en el campo de juego. Funcion¨® bien.
P. Y funciona tambi¨¦n en la selecci¨®n alemana
R. S¨ª, claro. Deben comunicarse al m¨¢ximo.
P. ?Cree usted que la defensa de la selecci¨®n actual se comunica bien?
R. Durante el primer partido contra Costa Rica, no. Eso debe cambiar.
P. ?Qu¨¦ cambiar¨ªa usted? ?Utilizar¨ªa un l¨ªbero?
R. Hay que tener en cuenta qu¨¦ jugadores hay. Si debe haber un l¨ªbero, o defensa de cuatro, eso es decisi¨®n de Klinsmann.
P. ?Pero usted no lo excluye?
R. Eso es decisi¨®n de Klinsmann.
P. ?As¨ª que usted no piensa en las posibilidades alternativas?
R. En ning¨²n caso. Eso es cosa de Klinsmann.
P. ?Qu¨¦ la han parecido los primeros partidos del Mundial?
R. He visto partidos mejores, pero se han marcado muchos goles. Eso es lo mejor.
P. ?Cree usted que Klinsmann tendr¨¢ ¨¦xito o tendr¨¢ que regresar pronto a California?
R. Espero que llegue lejos, naturalmente, aunque no da la impresi¨®n de que el equipo baste para ganar la final. Pero Klinsmann hace muy bien su trabajo.
P. Pero se le discute mucho.
R. Sea como sea, a m¨ª me parece que lo hace muy bien.
P. ?Qu¨¦ perspectivas profesionales tiene usted, despu¨¦s de haber dejado el Stuttgart donde estaba de segundo entrenador, ayudando a Trapattoni?
R. He recibido propuestas de Turqu¨ªa que he rechazado. Y ahora estoy a la espera.
P. ?Le gustar¨ªa irse a Espa?a?
R. Claro que s¨ª. Hay jugadores magn¨ªficos. Me encantar¨ªa.
P. ?C¨®mo fue el trabajo como segundo de Trapattoni en Stuttgart?
R. Muy bien. Fue mi entrenador en el Inter. Una gran persona.
P. ?Qu¨¦ sali¨® mal?
R. ?bamos quintos y al presidente le parec¨ªa poco. Al final quedaron novenos. Eso demuestra que hicimos un buen trabajo. Estoy orgulloso de haber trabajado con Trapattoni. Aprend¨ª mucho de ¨¦l.
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