Hambre de f¨²tbol

Cesc F¨¤bregas (Arenys de Mar, Barcelona, 1987) dif¨ªcilmente se equivoca como futbolista y como persona si es que una cosa no tiene nada que ver con la otra. Acostumbra a elegir la mejor opci¨®n de pase en la cancha, con independencia del puesto que ocupe en la l¨ªnea de medios, y est¨¢ encantado de la vida con la decisi¨®n que tom¨® cuando era todav¨ªa un cadete azulgrana, cumplidos los 16 a?os, de abandonar el Bar?a y La Masia para fichar por el Arsenal.

"?Te equivocas! ?No hay nada mejor que el Bar?a!", recuerda que le reprochaban algunos de sus amigos. "Y yo me preguntaba con mi familia: ?y a mi quien me garantiza que voy a jugar en el Camp Nou?". Wenger le convenci¨® de que su futuro estaba en Londres y, desde entonces, las buenas noticias se han encadenado: ha disputado tres mundiales en cuatro a?os, fue finalista en la pasada Champions y desde el mi¨¦rcoles figura como el futbolista espa?ol m¨¢s joven en debutar en una Copa del Mundo.

"El primer partido es fundamental para marcar el territorio", dice el centrocampista

Julen Guerrero se estren¨® cuando ten¨ªa 20 a?os y seis meses, m¨¢s edad que Sergio Ramos, que cuenta con 20 y dos, y, por supuesto, que Cesc, que hace 41 d¨ªas que cumpli¨® los 19. "Me enter¨¦ despu¨¦s del partido", explica. "Estaba expectante porque el seleccionador ya hab¨ªa realizado dos cambios y hasta cinco jugadores calent¨¢bamos en la banda. Ten¨ªa muchas ganas de entrar y pens¨¦ que no iba a salir cuando el mister me llam¨®. Pude cumplir la ilusi¨®n de jugar un Mundial y adem¨¢s celebrar un gol".

Cesc tir¨® dos paredes con Puyol antes de que el central habilitara a Torres y cerrara la cuenta con Ucrania. "Una jugada, un tanto, un buen partido, y luego est¨¢ lo del r¨¦cord", recuerda. "Muy excitante y divertido". "Yo siempre pienso que voy a estar en la alineaci¨®n y si no aspiro a jugar un rato". El volante del Arsenal era pr¨¢cticamente titular desde su debut en el amistoso contra Costa de Marfil hasta que Xavi se recuper¨® plenamente. El futbolista azulgrana se cruzaba de nuevo en su camino.

Hab¨ªa dejado el Barcelona entre otras razones porque adivinaba precisamente que sus opciones de ser titular en la plantilla profesional eran limitadas por la presencia de Xavi e Iniesta. Ahora, sin embargo, acepta el reto de competir por un puesto al tiempo que comparte la amistad con sus excompa?eros. "He madurado y progresado de manera r¨¢pida", responde despu¨¦s de advertir de que ha pasado el d¨ªa libre en compa?¨ªa de Xavi, Iniesta, Puyol y Luis Garc¨ªa, los cinco internacionales formados en el f¨²tbol base barcelonista, conjuntamente con Reina.

"El m¨¢s popular, por los aut¨®grafos que nos ped¨ªa la gente, es Puyi. A los dem¨¢s no nos conocen tanto", admite Cesc, cinco veces internacional y el goleador y el debutante m¨¢s joven en la historia del Arsenal. "Tenemos una forma similar de entender el juego porque compartimos la misma escuela. Incluso Xabi Alonso nos cuenta tambi¨¦n que la tarea formativa de la Real es similar a la del Barcelona", comenta. "Albelda y Senna son diferentes y, por tanto, le van muy bien a la selecci¨®n porque de la suma sale un centro del campo compensado con garra y t¨¦cnica".

Finalista en el Mundial sub-17 contra Brasil y cuartofinalista en el Mundial sub-20 frente a Argentina, Cesc aspira ahora triunfar con la absoluta en Alemania. "El primer partido es fundamental para marcar el territorio. No es un sue?o pensar en la final. Me acuerdo que en la Copa del Mundo sub-17 nos benefici¨® mucho no ir de favoritos y ahora puede ocurrir una cosa parecida", relata. "La clave es que somos j¨®venes y tenemos hambre de f¨²tbol. Atacamos el bal¨®n desde atr¨¢s y los delanteros se desmarcan estupendamente, de manera que se generan espacios y los medios podemos tocar f¨¢cil el bal¨®n".

Cesc se ha convertido en un centrocampista universal que no concibe el f¨²tbol sin la posesi¨®n de la pelota. "El juego del Arsenal es muy veloz: se trata de llegar r¨¢pido al ¨¢rea mientras que el Bar?a tiene un punto de pausa y sus jugadores siempre aguardan el momento para pasar", argumenta. "La selecci¨®n puede ser un t¨¦rmino medio entre ambos. El signo de distinci¨®n del partido contra Ucrania, sin embargo, fue la constancia. No paramos un momento".