El Rey pide a Kirchner m¨¢s compromiso con las empresas espa?olas

El Rey hizo ayer el llamamiento m¨¢s claro posible que puede hacer el jefe del Estado para que Argentina cumpla sus compromisos con las empresas espa?olas. En el brindis del almuerzo que ofreci¨® al presidente argentino, N¨¦stor Kirchner, don Juan Carlos constat¨® que el pa¨ªs austral ha logrado superar su grave crisis, record¨® que los espa?oles no han vacilado en mantener all¨ª sus intereses ni en los momentos m¨¢s dif¨ªciles, y pidi¨® "el mayor empe?o" para preservar los "importantes lazos econ¨®micos" bilaterales.

Argentina se resiste a precisar la entrada en vigor de la revisi¨®n de tarifas seg¨²n la inflaci¨®n

Kirchner correspondi¨® con expresiones gen¨¦ricas de amistad, de agradecimiento al apoyo espa?ol durante los a?os fat¨ªdicos de la dictadura militar y de coincidencia en torno a proyectos como la Alianza de Civilizaciones.

La importante delegaci¨®n que le acompa?a, en la que figuran cuatro ministros, dej¨® claro entretanto en varias reuniones de trabajo dos puntos fundamentales: que el Gobierno de Buenos Aires no da fechas precisas para cumplir su promesa de revisar las tarifas de las empresas espa?olas de servicios que operan en Argentina, y que adem¨¢s desea renegociar la devoluci¨®n del pr¨¦stamo de 1.000 millones de d¨®lares concedido por el Gobierno del Partido Popular en 2000 para sostener el peso.

La cuarta visita de este presidente argentino a Espa?a, que culmina hoy en la reuni¨®n con el presidente Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, presente en el almuerzo de ayer, ha arrancado as¨ª con un tono claramente contradictorio sobre el eje de interpretaci¨®n trazado previamente por el Ejecutivo espa?ol. Con su estabilidad monetaria, su inflaci¨®n controlada y su dinamismo exportador, la crisis argentina es ya cosa del pasado, dice el mensaje que se quiere transmitir al invitado. Espa?a, primer inversor extranjero en el pa¨ªs del Plata, ha hecho en estos a?os muchos gestos de apoyo, y ya es hora de que el Gobierno argentino d¨¦ los pasos que le corresponden. "No se puede cargar toda la pol¨ªtica antiinflacionista sobre los hombros de las empresas de servicios", puede o¨ªrse en medios gubernamentales que conocen las fatigas de Gas Natural, Endesa y Telef¨®nica por mejorar sus tarifas.

Don Juan Carlos expuso ayer con particular precisi¨®n ese mensaje. "Podemos afirmar, con admiraci¨®n y con orgullo, que Argentina ha logrado superar en muy pocos a?os la grave situaci¨®n de crisis en que se vio sumida a comienzos de esta d¨¦cada. Ese orgullo y admiraci¨®n se sienten intensamente en Espa?a, porque los espa?oles siempre hemos estado y siempre estaremos al lado de Argentina, en los buenos momentos y en los m¨¢s dif¨ªciles", dijo.

"A esta envidiable interrelaci¨®n, se a?aden hoy nuevos intercambios, importantes lazos econ¨®micos y nuevas generaciones de empresarios y profesionales que se han establecido en nuestros respectivos pa¨ªses", prosigui¨®. "?ste es un elemento de crucial importancia para nuestras relaciones que juntos hemos de cuidar con el m¨¢ximo empe?o", resalt¨®.

Los temas en litigio se trataban casi a la misma hora en un encuentro del ministro de Econom¨ªa, Pedro Solbes, con su hom¨®loga argentina, Felisa Micelis. No hubo informaci¨®n sobre lo conversado, con el argumento de que hab¨ªa que esperar a la reuni¨®n que hoy mantendr¨¢n en La Moncloa los dos l¨ªderes. Pero s¨ª trascendieron suficientes indicios de que las dos diferencias fundamentales se mantienen.

Argentina se resiste a dar fechas para la entrada en vigor de unas revisiones de tarifas que liga a la evoluci¨®n de la coyuntura econ¨®mica, y en concreto a la inflaci¨®n. En el caso de la deuda, las divergencias son igualmente sustanciales.

El pa¨ªs austral es el primer deudor de Espa?a, con cerca de 1.300 millones de d¨®lares consolidados, adem¨¢s de los 630 millones de d¨®lares que est¨¢n en el Club de Par¨ªs, el consorcio internacional de renegociaci¨®n de impagados, donde Argentina tiene 6.300 millones de d¨®lares. La mayor parte de la deuda bilateral deriva de la l¨ªnea de cr¨¦dito por 1.000 millones de d¨®lares que el Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar concedi¨® al entonces presidente Fernando de la Rua, para apoyar la operaci¨®n de blindaje del peso que lanz¨® el FMI en 2000. Y es ah¨ª donde radican los problemas actuales.

Buenos Aires sostiene que tambi¨¦n los 835 millones de d¨®lares desembolsados al amparo de dicha l¨ªnea tienen que negociarse en el Club de Par¨ªs, lo que implica, de entrada, una quita de entorno al 30%. Al parecer, Kirchner pide ahora el apoyo de Espa?a en esa negociaci¨®n multilateral y ofrece a cambio negociar bilateralmente un tramo de algunos millones de d¨®lares, siempre que Madrid ampl¨ªe su oferta actual de canjear 60 millones de deuda por programas de educaci¨®n. El Gobierno entiende que los 835 millones no est¨¢n en el Club de Par¨ªs y deben ser resueltos bilateralmente. No contempla, por ello, ning¨²n otro tipo de acuerdo.

Al margen de estas conversaciones oficiales, el presidente Kirchner recibi¨® ayer en el palacio del Pardo a una larga lista de empresarios espa?oles, de cuya identidad y objetivos no inform¨® la delegaci¨®n argentina.