EE UU, Europa y los pa¨ªses emergentes buscan contrarreloj un acuerdo en la OMC
Si no hay avances este fin de semana, no habr¨¢ tiempo para cerrar los cap¨ªtulos pendientes
Ministros y altos representantes de los 149 pa¨ªses que integran la Organizaci¨®n Mundial de Comercio (OMC) se re¨²nen este fin de semana en Ginebra para intentar alcanzar un acuerdo que permita rebajar las subvenciones agr¨ªcolas y los aranceles comerciales. En la batalla comercial el mundo se ha dividido en tres grandes regiones: Estados Unidos, la Uni¨®n Europea y el Grupo de los 20 formado por los pa¨ªses emergentes que encabezan China, India y Brasil. Si no hay un avance significativo este fin de semana, no habr¨¢ tiempo para cerrar los cap¨ªtulos pendientes.
La guerra es a contrarreloj, porque el Gobierno de una de las partes, EE UU, s¨®lo tiene mandato del Congreso para negociar hasta mitad de 2007. El objetivo es favorecer el crecimiento econ¨®mico con la palanca de la reducci¨®n de derechos aduaneros. La eliminaci¨®n de todos los aranceles y una disminuci¨®n de los costes comerciales del 1% mejorar¨ªan el bienestar mundial en 170.000 millones de d¨®lares (135.000 millones de euros). Estas ganancias dar¨ªan un impulso a todas las regiones del mundo, aumentando el crecimiento en m¨¢s del 2% en varias, seg¨²n la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y Desarrollo Econ¨®mico.
Pero la reducci¨®n de subvenciones y aranceles supone un abierto enfrentamiento entre los distintos pa¨ªses que concurren a esta batalla con fuerzas muy desiguales y posiciones a veces contradictorias. Con el objetivo de ligar la liberalizaci¨®n comercial al desarrollo, en 2001 se iniciaron las negociaciones de la Ronda de Doha. Durante estos ¨²ltimos a?os, los avances en las distintas reuniones han sido m¨ªnimos, pero se han conformado tres grandes grupos de pa¨ªses que han identificado sus intereses y lanzado sus propuestas y demandas.
Ahora el director general de la OMC, Pascal Lamy, considera que los pa¨ªses "ya no pueden prolongar m¨¢s las decisiones, sino quieren poner en riesgo el proyecto". La representante de Comercio de EE UU, Susan Schwab, quit¨® relevancia a las prisas y se?al¨® que lo importante era "un buen acuerdo".
Enrique Bar¨®n, presidente de la Comisi¨®n de Comercio del Parlamento Europeo, advierte de que "ha llegado la hora de la verdad". "Si fracasa la ronda, se multiplicar¨¢n los acuerdos bilaterales, que son mucho menos beneficiosos para los pa¨ªses menos desarrollados", se?ala un alto funcionario de la OMC.
En este momento las principales ofertas y demandas de los tres grupos que est¨¢n encima de la mesa son las siguientes: Estados Unidos est¨¢ dispuesta a rebajar sus subvenciones agr¨ªcolas cerca del 60%.
Pero este porcentaje no es satisfactorio para los dem¨¢s pa¨ªses porque se aplica sobre las subvenciones autorizadas y no las efectivas. En la pr¨¢ctica la rebaja te¨®rica puede suponer un aumento real de las subvenciones. As¨ª ofrece rebajar los 47.000 millones de d¨®lares de subvenciones anuales autorizadas hasta los 22.000 millones, cuando las ayudas efectivas a los agricultores en 2005 fueron s¨®lo 19.000 millones de d¨®lares. El problema es especialmente sangrante en algunas ayudas como las del algod¨®n.
A la UE se le pide que rebaje m¨¢s las tarifas aduaneras. La ¨²ltima oferta de Bruselas implica eliminar todas las subvenciones agr¨ªcolas europeas a partir de 2013 y una reducci¨®n global de aranceles del 39% (hasta el 60% las m¨¢s elevadas). EE UU exige que aumente la rebaja global hasta el 60% y el Grupo de los 20 se conformar¨ªa con el 54%.
El G-20 (China, India, Sur¨¢frica y Brasil, entre otros) se resiste a rebajar sus aranceles de productos industriales hasta un m¨¢ximo del 15% (frente al 18%-30% actual) si no logran contrapartidas que les permitan aumentar sus exportaciones agr¨ªcolas y de productos manufacturados.
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