Partidos por puntos

Desde ayer, tambi¨¦n las formaciones pol¨ªticas est¨¢n obligadas a respetar estrictamente su circulaci¨®n por las redes del inter¨¦s general del pueblo, o sea, de la soberan¨ªa nacional. Qu¨¦ solemnidad. Y adem¨¢s de la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico, con la que se la juega cada quien, se las tendr¨¢n que ver con las urnas, con las que se la juegan l¨ªderes, militancias, promesas y hasta dep¨®sitos en para¨ªsos no tan perdidos, como algunos quisieran. Salen con doce puntos -aunque m¨¢s de uno quiz¨¢ filipino- y el cronista hace votos porque a¨²n los conserven boyantes, que ya ser¨ªa una filigrana. Pero con tanto tr¨¢fico de listas, de facciones, de pactos, de morros, de sospechas, de acelerones por audiencias y juzgados, el cronista se malicia que haya p¨¦rdidas y p¨¦rdidas irreparables. De entrada, en sus "hojas de ruta", en sus arrebatos y particularmente en sus gestiones, eso de las manos libres, que ha sido, para quienes manejan el poder, una pr¨¢ctica frecuente, aunque a lo zaino, les puede dejar el carn¨¦ como una sopa de convento. Y el cintur¨®n de seguridad, en el esca?o de las Cortes y en las bancadas municipales, no solo para que no se descerebren sus se?or¨ªas y los respetables regidores, sino para que no resulten ni con un rasgu?o aquellos que los han aupado donde est¨¢n y que les apoquinan mensualmente un generoso salario. Como quiera que estas nuevas medidas afrontan, de una parte, la reducci¨®n o desaparici¨®n del creciente riesgo de endeudamiento de los valencianos, y, de otra, el hecho de ventilar pol¨ªtica y judicialmente ciertos socavones que se han tragado caudales del com¨²n, bueno ser¨ªa que el presidente Camps, a instancias de Gloria Marcos, coordinadora general de EU, no se empecinara en encubrir la presunta conducci¨®n negligente y temeraria de quien le precedi¨® en el cargo: que ruede por la derecha, pero sin excesos ni extremos. Para el PP saltarse un sem¨¢foro en rojo, puede costarle la mayor¨ªa. Y, hasta ahora, se los ha saltado impunemente. Si prospera -que parece que s¨ª- el pacto entre EU, el Bloc y otros partidos valencianistas y ecologistas, puede que el PP termine en un cochecito de pedales. Ciertos s¨ªntomas delatan su preocupaci¨®n y nerviosismo. El PSPV guarda, al respecto, un impecable y discreto silencio, aunque no desde?a hipot¨¦ticos acuerdos postelectorales, sin perder de vista los paneles de la demoscopia, mientras observa una prudente velocidad de crucero, conocedor de sus limitaciones. Ayer el BNV repost¨® argumentos en el debate acerca del inicio de las negociaciones con EU, en su Consell Nacional, como algo m¨¢s de dos semanas antes lo hizo EU, que se pronuncio favorablemente. Enric Morera, secretario general de la formaci¨®n, se ha mostrado partidario de propiciar un cambio en la Generalitat con la herramienta del pacto auton¨®mico. Joan Rib¨® le ha dicho al cronista que "EU mantendr¨¢ lo que tiene y repartir¨¢ lo que se pueda ganar" y tambi¨¦n que "este pacto es la llave que tal vez abra las Cortes a una nueva mayor¨ªa". Circulen, pues, con mucho ojo. El PP est¨¢ a punto.