La quiebra de Varig complica el triste regreso

Ricardinho, Robinho, Luisao, Mineiro Cicinho, Cris, Fred y Moracir Sant'Anna, el preparador f¨ªsico, volaron anoche, desde el aeropuerto de Francfort al de Sao Paulo. Hoy, a la una del mediod¨ªa, con destino al de Tim Jobim, en R¨ªo de Janeiro, viajar¨¢n Parreira, Zagallo, sus ayudantes y el lateral Gilberto. El resto de los componentes de la selecci¨®n march¨® en avi¨®n privado, como Ronaldo o Ronaldinho, que ayer por la ma?ana llegaron a Espa?a. Mientras, unos 10.000 brasile?os, incluidos cientos de periodistas, entre ellos la cadena O'Globo, -uniformados con camisetas verdes o sea, los m¨¢s de 197 periodistas uniformados con camisas de ese color que identifican en la distancia a los trabajadores de ese peri¨®dico- siguen en Alemania. Lo malo es que a muchos, a todos los que pusieron rumbo al sexto t¨ªtulo con un vuelo de Varig, les invade cierta angustia: no saben cuando podr¨¢n abandonar Alemania. La compa?¨ªa aerea Varig quebr¨® la pasada semana.

"Lo peor no es llorar. Lo peor es no poder dejar de hacerlo", aseguraba un seguidor brasile?o en el vest¨ªbulo de un hotel de Francfort, con las maletas preparadas para volver a casa. El sue?o del hexacampeonato deber¨¢ esperar al menos cuatro a?os m¨¢s, hasta Sur¨¢frica. Entonces, Brasil volver¨¢ a intentarlo. Ayer, de vuelta a la dura realidad, con el equipo eliminado, a Joao Leite, un millonario de Florian¨®polis, le preocupaba m¨¢s bien poco abandonar todo eso. "Sab¨ªa que ten¨ªa un vuelo de Varig abierto para volar desde M¨²nich. La l¨ªnea regular ha sido suspendida. Me han dicho que me sirve el billete para volar desde Francfort, pero no me lo creo, claro" comentaba en el Hotel Sheraton la noche del s¨¢bado. ?l no tiene problema. Tiene dinero para volar con cualquier compa?¨ªa, pero sabe que hay bastantes compatriotas angustiados.

Oficialmente, portavoces de Varig aseguran que todo el que haya pagado un billete volver¨¢ a casa. La Confederaci¨®n Brasile?a est¨¢ tranquila y por medio de un portavoz, ha reconocido: "Lo ¨²ltimo que van a hacer es dejar a un jugador en tierra. Si est¨¢n intentando vender la compa?¨ªa, la publicada ser¨ªa negativisima". La torcida aboga porque Varig, patrocinador de la federaci¨®n, deje a Parreira castigado en Alemania, pero parece poco probable. Por si acaso, Waldir Peres, ministro de Defensa, ya ha ofrecido aviones H¨¦rcules de las Fuerzas A¨¦reas para repatriar a los aficionados si Varig falla. La reacci¨®n ha sido inmediata y numerosos humoristas se han hecho eco del asunto, asegurando: "Si viajan con nuestros aviones, no llegan a casa, te lo aseguro", le dec¨ªa, en una tira c¨®mica un piloto del ejercito a uno de Varig, lloroso por la quiebra, en un dibujo colgado en Internet.

De los 61 aparatos de la flota aerea de Varig, al parecer s¨®lo est¨¢n operando 19, seg¨²n informaciones aparecidas en diversos portales de Internet. Al menos 16 estar¨ªan estropeados, unos 20 en paro para evitar ser embargados si terminan pisando suelo de Estados Unidos por culpa de las deudas que Varig ha contra¨ªdo con la empresa Boeing, y una cifra no cuantificada no podr¨ªa volar por falta de combustible. Este ¨²ltimo aspecto ha sido desmentido por fuentes de la compa?¨ªa, que ha sido puesta en el mercado por el juez que atiende el caso de su quiebra.

Varig, que en su d¨ªa pag¨® a Romario para que celebrara sus goles simulando el vuelo del avi¨®n, est¨¢ en quiebra y Brasil, eliminada; la torcida llora, las maletas est¨¢n hechas y no hay vuelos para dejar Alemania. Y lo peor, ya se sabe, no es llorar; lo peor es no poder dejar de hacerlo.