Los ecologistas denuncian que la fiebre urban¨ªstica amenaza todo el litoral
Greenpeace calcula que se est¨¢n construyendo 1,5 millones de viviendas en la costa espa?ola
A veces parece que en la costa espa?ola no cabe un alfiler, pero seg¨²n Greenpeace est¨¢ en marcha la construcci¨®n de al menos 1,5 millones de nuevas viviendas. En su informe anual sobre las costas espa?olas, la organizaci¨®n ecologista subraya que la fiebre urban¨ªstica en el litoral sigue desbocada -este a?o se han concedido el doble de licencias que el a?o anterior- y amenaza todo el litoral, que cuenta con 286 "puntos negros". Despu¨¦s de recorrer los 8.000 kil¨®metros de costa que ba?an el pa¨ªs, Greenpeace considera que "ninguna Administraci¨®n pone coto a tanto desm¨¢n".
Costas indefensas, enfangadas de aguas residuales y ahogadas en cemento y ladrillo. Es el diagn¨®stico de urgencia que ofrece Greenpeace en su ¨²ltimo informe sobre el litoral espa?ol. El informe hace hincapi¨¦ en la pobreza de medios para frenar la contaminaci¨®n en un sector amenazado por la fiebre especuladora. La organizaci¨®n ecologista recuerda que el litoral espa?ol "se encuentra muy lejos de cumplir los requisitos que impone la directiva europea sobre depuraci¨®n de aguas residuales. Ciudades como Ferrol, Algeciras o Benalm¨¢dena carecen de depuradora", sostiene Mar¨ªa Jos¨¦ Caballero, responsable de Costas de Greenpeace. Pero estas carencias no son privativas de un pu?ado de poblaciones. Forman parte de una realidad com¨²n que engloba a 99 localidades con vertidos contaminantes en su litoral. Un paisaje discontinuo "en el que el 13% de las aguas residuales urbanas e industriales se vierten al mar sin ning¨²n tipo de depuraci¨®n", denuncia Caballero. Precisamente es esta basura arrojada al mar, junto a otros factores, lo que explica el anunciado aumento de medusas en el Mediterr¨¢neo.
La Comunidad Valenciana y Andaluc¨ªa son las que menos cuidan su costa "Y Murcia avanza tambi¨¦n en una senda peligrosa. A pesar de que su parte sur tiene tramos no urbanizados, su Gobierno est¨¢ impulsando planes de inter¨¦s regional en zonas protegidas".
Greenpeace se?ala 286 puntos negros que amenazan con desfigurar completamente la costa. La Comunidad Valenciana concentra 57 puntos negros, Galicia 46 y Andaluc¨ªa 40. El 90% de estos puntos negros lo constituyen agresiones urban¨ªsticas. "Nos vendemos a base de sol y playa, sin incidir en la contaminaci¨®n", afirma Caballero. "Por eso pedimos que no se aprueben planes urban¨ªsticos sin cubrir antes sus necesidades de depuraci¨®n".
En Destrucci¨®n a toda costa 2006, t¨ªtulo del informe, los autores denuncian un crecimiento urban¨ªstico "desaforado" que se extiende hasta el litoral gallego. El informe se?ala que en el ¨²ltimo a?o se ha duplicado el n¨²mero de viviendas previstas en la costa. Greenpeace ha contabilizado la aprobaci¨®n de 1.479.000 nuevas viviendas, la mayor¨ªa de ellas (1.200.000), en la Comunidad Valenciana, Andaluc¨ªa, Murcia y Galicia. Al mismo tiempo, rechaza la creaci¨®n de 303 nuevos campos de golf, "convertidos en herramienta de la especulaci¨®n", sostiene Caballero, "al estimarse que las viviendas en este entorno se revalorizan entre un 14 y un 40%", a?ade. Lo curioso es que "los males del Mediterr¨¢neo" y "la marbellizaci¨®n llegan a Galicia. Al amparo de la ley del Suelo aprobada en el periodo Fraga se han proyectado 600.000 nuevas viviendas, una desmesura. La Xunta anunci¨® que revisar¨¢ los planes, pero a¨²n no lo ha hecho", sostiene Caballero. Sobre los 116 nuevos puertos deportivos proyectados o en ampliaci¨®n, Greenpeace pide una moratoria mientras no existan documentos de planificaci¨®n auton¨®micos visados por el ministerio de Medio Ambiente.
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