Seis polic¨ªas de la comisar¨ªa de Centro, acusados de robo y de provocar una pelea

Seis agentes de la comisar¨ªa de Centro (con unos 540 polic¨ªas) est¨¢n acusados de participar en dos robos y en un altercado en la v¨ªa p¨²blica. Son tres sucesos distintos en los que han participado polic¨ªas de la escala b¨¢sica, que llevan poco tiempo en el cuerpo. Los incidentes ocurrieron en los dos ¨²ltimos meses y est¨¢n siendo investigados por jueces de plaza de Castilla y por la Unidad de Asuntos Internos de la Polic¨ªa. En un caso, un agente del turno de noche tuvo que disparar al aire junto a la Puerta del Sol para reducir a otros dos compa?eros que iniciaron una pelea cuando estaban fuera de servicio.

Uno de los primeros incidentes se produjo el pasado 6 de mayo, cuando dos agentes destinados a los radiopatrullas detuvieron a un menor y a un adulto de origen magreb¨ª. A los polic¨ªas les result¨® especialmente sospechoso que entre los dos llevaran cinco tel¨¦fonos m¨®viles. Sobre todo, porque dos terminales eran de ¨²ltima generaci¨®n, seg¨²n fuentes del caso.

Los agentes llevaron a los dos detenidos a comisar¨ªa para comprobar si realmente los m¨®viles les pertenec¨ªan. Cuando ambos fueron puestos en libertad, s¨®lo hab¨ªa tres m¨®viles. Faltaban los dos tel¨¦fonos m¨¢s caros, los de tercera generaci¨®n. Supuestamente hab¨ªan sido sustra¨ªdos por los agentes de radiopatrulla.

El hermano del menor acudi¨® a comisar¨ªa y demostr¨® que le hab¨ªa regalado a ¨¦ste recientemente el m¨®vil. Desde la emisora, se requiri¨® a los agentes para que volvieran a comisar¨ªa y se los entregaran a sus leg¨ªtimos propietarios. Los polic¨ªas se negaron porque estaban tomando unas copas. Ambos han sido acusados de apropiaci¨®n indebida y est¨¢n pendientes de que se ponga fecha al juicio, seg¨²n fuentes del caso.

Domicilio particular

Uno de los incidentes m¨¢s graves consisti¨® tambi¨¦n en un robo. Dos polic¨ªas, que igualmente pertenec¨ªan a los radiopatrullas, acudieron a un domicilio porque su due?o acababa de sufrir un robo en su vivienda. Seg¨²n fuentes policiales, los agentes dieron una vuelta por las calles aleda?as y localizaron a unos sospechosos.

Los agentes subieron con los supuestos cacos al domicilio de la v¨ªctima, pero ¨¦ste les dijo que no eran las personas a las que ¨¦l ha visto entrar en su casa. Cuando se marcharon, el hombre que hab¨ªa sido robado se percat¨® de que faltaban algunas joyas y de que tambi¨¦n hab¨ªan sido sustra¨ªdos d¨®lares norteamericanos que ten¨ªa.

La sorpresa lleg¨® m¨¢s tarde, cuando fue a denunciar los hechos a comisar¨ªa y aport¨® una grabaci¨®n en la que, supuestamente, se ve a los agentes apropiarse de los efectos que el denunciante echaba en falta en su casa. El caso est¨¢ en los tribunales.

Se da adem¨¢s la coincidencia de que uno de los imputados es familiar de un inspector jefe, seg¨²n fuentes del caso.

El tercer caso se produjo la madrugada del pasado 15 de junio, unas cinco horas despu¨¦s de que la selecci¨®n espa?ola le endosara cuatro goles a Ucrania en el primer partido de Espa?a en el Mundial de F¨²tbol de Alemania.

Sobre las cuatro de la madrugada, dos agentes del Grupo I de la comisar¨ªa de Centro, que estaban fuera de servicio, comenzaron a orinar detr¨¢s de la Puerta del Sol, en el edificio de la sede del Gobierno regional. De lo que no se dieron cuenta estos funcionarios es que cerca de ellos hab¨ªa un coche camuflado de su propia comisar¨ªa con dos polic¨ªas que estaban vigilando a unos delincuentes rumanos. Los agentes que estaban de vigilancia les preguntaron a las dos personas que estaba orinando que qu¨¦ estaban haciendo y que se marcharan de aquel lugar. Los otros, en lugar de deponer su actitud, adoptaron una actitud chulesca y les dijeron que iban a hacer lo que les diera la gana. "Y t¨², ?qui¨¦n co?o eres?", llegaron a increpar. Era visible que estaban ebrios o, al menos, con alguna copa de m¨¢s.

Pistola por el suelo

Los polic¨ªas de servicio mostraron sus placas y les advirtieron, de que si no se marchaban, podr¨ªan terminar detenidos. Lejos de identificarse y acabar con aquella situaci¨®n, los agentes fuera de servicio intentaron arrebatar la placa a sus colegas, por lo que se inici¨® una pelea. Un polic¨ªa de servicio, al ver el cariz que estaban tomando los acontecimientos, sac¨® su arma reglamentaria. Recibi¨® un fuerte golpe por parte de los contrarios y el arma cay¨® al suelo.

Los agentes pidieron refuerzos a sus compa?eros de noche, ya que los atacantes no ten¨ªan intenci¨®n de deponer su actitud. Uno de los oficiales que fue en ayuda se encontr¨® en la calle del Correo con dos pistolas en el suelo y con una trifulca entre los cuatro polic¨ªas. Adem¨¢s, los atacantes fueron hacia ¨¦l, por lo que sac¨® su pistola y efectu¨® un disparo al aire.

Los dos funcionarios del Grupo I de Centro fueron trasladados a la comisar¨ªa acusados de resistencia, atentado contra un agente y lesiones, entre otros delitos. Los acusados pidieron el habeas corpus (el detenido reclama que un juez le tome declaraci¨®n ante la sospecha de que ha sido arrestado ilegalmente), pero el magistrado de guardia lo rechaz¨®. Lo que ignoraban los acusados es que el altercado fue grabado por las c¨¢maras de seguridad de la sede del Gobierno regional.