Estado de sitio en Stralsund
El Gobierno alem¨¢n impuso un estado de sitio f¨¢ctico en la ciudad de Stralsund para impedir cualquier gesto o manifestaci¨®n que pudiese enturbiar lo m¨¢s m¨ªnimo la visita del presidente de EE UU, George Bush.
En una ciudad que parec¨ªa haber sido atacada con una bomba de neutrones, calles desiertas y ventanas cerradas, la visita de Bush adquiri¨® rasgos grotescos. Fue una mezcla de Bienvenido Mister Marshall, del director de cine espa?ol Luis Garc¨ªa Berlanga, y de las medidas de seguridad cuando en aquel Estado del este alem¨¢n gobernaba el dictador Erich Honnecker.
Durante la estancia de Bush en Stralsund, los derechos ciudadanos consagrados en el pre¨¢mbulo de la Constituci¨®n alemana quedaron suspendidos. Minutos antes de la llegada de Bush a la plaza del Mercado Viejo, un militante del grupo ecologista Greenpeace, no se sabe c¨®mo, consigui¨® encaramarse a una torre de la iglesia de San Nicol¨¢s y desplegar una pancarta con el texto: "?No a las centrales nucleares, no a la guerra, no a Bush!".
En cuesti¨®n de segundos los polic¨ªas consiguieron, en presencia de la canciller Angela Merkel que ya esperaba a Bush en la plaza, retirar una pancarta que no hac¨ªa m¨¢s que usar la libertad de expresi¨®n, un derecho constitucional en Alemania y en el Estado federado de Mecklenburgo-Antepomerania, despu¨¦s de la ca¨ªda del r¨¦gimen prusiano-estalinista hace ya m¨¢s de 15 a?os.
La plaza se hab¨ªa medio llenado con unos mil figurantes seleccionados con extremo cuidado para saludar a Bush y ofrecer ante las c¨¢maras las im¨¢genes de un ba?o de multitudes.
Entre los mil invitados hab¨ªa unos 300 soldados del Ej¨¦rcito alem¨¢n vestidos de civil. Para que no hubiese el menor riesgo, poco antes de la llegada de Bush los polic¨ªas se encargaron de quitar a los all¨ª congregados los palos que soportaban las banderitas.
Mientras, en las zonas alejadas del centro, tomado por miles de polic¨ªas, unos cientos de manifestantes se dedicaron a protestar contra Bush y la guerra. El diputado ecopacifista de Los Verdes Hans-Christian Str?bele dijo: "Bush pisotea cada d¨ªa los derechos humanos en Guant¨¢namo".
El grado de servilismo mostrado por el Gobierno alem¨¢n ante el amigo americano lleg¨® al extremo de que en el centro de prensa s¨®lo se emitieron en ingl¨¦s las palabras de Bush y Merkel. En su propio distrito electoral, la canciller Merkel, que habl¨® en alem¨¢n, s¨®lo pudo ser captada a trav¨¦s de la traducci¨®n en ingl¨¦s de una int¨¦rprete.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.