"El mercado pide un avi¨®n m¨¢s peque?o que el de Airbus"

Un a?o despu¨¦s de asumir las riendas de Boeing, Jim McNerney asegura que el gigante aeroespacial estadounidense ha enderezado el rumbo. Superados los esc¨¢ndalos (desde el trato de favor por parte del Pent¨¢gono hasta la dimisi¨®n del predecesor de McNerney, Harry Stonecipher, por su relaci¨®n con una empleada) el tercer primer ejecutivo de Boeing en menos de cuatro a?os explica por qu¨¦ la compa?¨ªa ha superado en pedidos a su competidora, la europea Airbus.

Jim McNerney (Providence, Estados Unidos, 1950) afronta este a?o la Feria Aeron¨¢utica de Farnborough, que arranca ma?ana en las afueras de Londres, con la tranquilidad de saber que el viento sopla de cola al gigante aeroespacial Boeing. Superada la era de los esc¨¢ndalos por espionaje y violaci¨®n del c¨®digo ¨¦tico en su unidad de defensa, la atenci¨®n del Air Show este a?o se dirigir¨¢ a sus cazas, el F18-F Super Hornet y el F15-E Strike Tagle, el helic¨®ptero AH64-D Apache Longbow, el avi¨®n de transporte militar C17 Globemaster III y los veh¨ªculos no tripulados ScanEagle y X45 N-UCAS.

"En seis meses decidiremos si estamos en condiciones de lanzar una versi¨®n mayor del B787"

"Las grandes aerol¨ªneas de EE UU y Europa tendr¨¢n que renovar sus flotas en dos o tres a?os"

"Al final, el cambio de gesti¨®n reforzar¨¢ a EADS y Airbus; encontrar¨¢n el camino correcto"

"No hemos estudiado con detalle la posibilidad de ensamblar aviones en China"

Pero donde McNerney se juega su reputaci¨®n como gestores en el negocio de la aviaci¨®n comercial, donde el consorcio europeo Airbus le arrebat¨® la supremac¨ªa hace dos a?os. Los n¨²meros cantan ahora a favor de Boeing, que en el primer semestre sum¨® 480 pedidos, frente a los 117 de su rival. Boeing exhibir¨¢ en Farnborough el interior de la cabina de su nueva creaci¨®n, el avi¨®n de pasillo ¨²nico B787 Dreamliner, la aeronave que mejor se vende en este momento, y presentar¨¢ el potencial de la nueva versi¨®n del m¨ªtico Jumbo B747.

McNerney, en una conferencia telef¨®nica con varios medios europeos, entre ellos EL PA?S, asegura sentirse c¨®modo con el rendimiento de la compa?¨ªa y se muestra comprensivo con los problemas de Airbus. Y aunque evita hacer sangre, espera poder arrebatarle el cetro este a?o. El presidente ejecutivo de Boeing explica que las aerol¨ªneas est¨¢n apostando por su visi¨®n y no ve el A380 como un competidor, porque su nicho de mercado es muy reducido.

Pregunta. Hace un a?o tomaba las riendas de Boeing con un objetivo claro: recuperar su imagen tras las infracciones del c¨®digo ¨¦tico y los casos de espionaje.

Respuesta. Mi prioridad era estabilizar la gesti¨®n de la compa?¨ªa. Se han realizado numerosos cambios administrativos, aunque la estrategia y las operaciones se han mantenido estables durante este periodo. Se trataba de dejar clara la cultura que valoramos en Boeing, de dedicar mucho tiempo a los empleados y a los clientes y de profundizar a la vez en la estrategia y finanzas del negocio.

P. Tras la desafortunada salida de Harry Stonecipher, ?c¨®mo est¨¢ la moral entre los gestores de la compa?¨ªa?

R. Creo que bastante bien, y esto se deriva, sobre todo, del ¨¦xito que est¨¢ teniendo nuestro negocio. Y no creo que se est¨¦ introduciendo una cultura de chivatos. Simplemente decimos a los empleados que, cuando vean algo malo, lo digan, porque queremos escucharlos.

P. ?Cu¨¢ndo cree que Boeing tomar¨¢ el liderazgo en el segmento de la aviaci¨®n comercial?

R. Los pedidos hablan por s¨ª solos y espero que continuemos liderando en el segundo semestre. Me siento muy bien por la aceptaci¨®n que est¨¢ teniendo nuestra l¨ªnea de productos. Es una buena mezcla de aviones de diferente dimensi¨®n. Y avanzamos a un buen paso, teniendo en cuenta el r¨¦cord de ventas que registr¨® la industria en 2005. No veo ning¨²n cambio dram¨¢tico en el mercado para los pr¨®ximos meses, que esperamos sea robusto. As¨ª que puedo decir que me siento c¨®modo con la estrategia.

P. ?Qu¨¦ hace que haya m¨¢s pedidos de aviones Boeing que de Airbus?

R. La raz¨®n fundamental es que nuestra visi¨®n del mercado est¨¢ siendo aceptada por los clientes. Y esa visi¨®n es de un avi¨®n m¨¢s peque?o, de largo recorrido, con dos motores, que ofrezca servicios punto a punto a los pasajeros y productividad a las aerol¨ªneas.

P. ?Cree que el A380 es una apuesta equivocada?

R. Lo llevamos diciendo desde hace mucho tiempo. La cuesti¨®n est¨¢ en saber si el mercado es lo suficientemente grande para ese avi¨®n. El A380 se dirige hacia un nicho que en nuestra opini¨®n no genera tantos pedidos como el B747. ?sa es la diferencia.

P. Se ve que no tiene intenci¨®n de hacer un avi¨®n m¨¢s grande. ?Est¨¢n considerando entonces extender el fuselaje del B747-8?

R. No hemos tomado una decisi¨®n sobre agrandar el B747-8. Este avi¨®n no compite directamente con el A380, aunque habr¨¢ algunas compa?¨ªas que consideren las dos opciones. Son aviones muy diferentes. El de Airbus es mucho mayor. La ¨²ltima versi¨®n del jumbo es una extensi¨®n del avi¨®n que hemos tenido durante a?os y que se ha vendido muy bien. Es mucho m¨¢s peque?o y ligero que el A380, con probablemente 100 asientos menos.

P. ?Y se puede esperar una versi¨®n m¨¢s grande del B787?

R. Estamos recibiendo peticiones para un tipo de configuraci¨®n m¨¢s grande y las consideramos seriamente. Quiz¨¢ en seis meses podamos decir hasta qu¨¦ punto estamos en condiciones de lanzar una versi¨®n mayor. Pero antes debemos entender lo que quieren nuestros clientes.

P. ?Cu¨¢l es su an¨¢lisis de la crisis en EADS y Airbus?

R. Odio comentar los problemas de otros, sobre todo cuando son competidores. Ya tengo bastante trabajo con preocuparme por Boeing. Pero estos cambios de gesti¨®n pasan en todas las compa?¨ªas y suelen ser por una buena raz¨®n. Al final, reforzar¨¢ a EADS y a Airbus. Encontrar¨¢n el camino correcto.

P. ?Tiene conocimiento de que se est¨¦n cancelando pedidos del A380?

R. No conozco a nadie, aunque se est¨¢ hablando mucho del asunto.

P. ?Hasta qu¨¦ punto est¨¢ seguro de que no habr¨¢ retrasos en las entregas del B787?

R. El desarrollo de un nuevo avi¨®n es dif¨ªcil. No hay excepciones. Siempre hay riesgos de calendario que gestionar. Es la naturaleza del negocio. Nuestro objetivo es realizar la primera entrega a mediados de 2008 y nos sentimos c¨®modos con esa fecha. El ensamblaje del primer avi¨®n se realizar¨¢ a final de a?o y la primera prueba de vuelo tendr¨¢ lugar a mediados de 2007.

P. ?C¨®mo manejan los nuevos materiales compuestos de este avi¨®n?

R. Conocemos este material bastante bien y estamos sorprendidos con su desarrollo. Es cierto que tuvimos problemas cuando intentamos una cuarta manera de fabricar el fuselaje, que es la g¨¦nesis de un art¨ªculo aparecido en la prensa. El hecho es que tres de esas pruebas funcionaron. Por eso, aunque perdamos por un poquito, ser¨¢ notablemente mejor y m¨¢s eficiente en el consumo de combustible.

P. La atenci¨®n se centra en el potencial de mercado en Asia. Sin embargo, en EE UU est¨¢n American Airlines, Delta y United Airlines, que no compran aviones desde hace cinco a?os, y que en alg¨²n momento deber¨¢n renovar sus flotas.

R. Es cierto, representa una gran oportunidad. El r¨¦cord de pedidos que tuvo la industria durante los dos ¨²ltimos a?os se logr¨® sin la participaci¨®n de las grandes aerol¨ªneas de EE UU y Europa. Por eso creo que en alg¨²n momento tendr¨¢n que renovar sus flotas, quiz¨¢ en dos o tres a?os. Estamos en conversaciones con todas ellas y tendr¨¢n que decidir cu¨¢ndo es el mejor momento.

P. Airbus est¨¢ considerando abrir una planta de ensamblaje en China para el A320. ?Est¨¢n estudiando algo similar?

R. Nuestra conclusi¨®n es diferente. Pensamos que la mejor v¨ªa es usar la industria china como socios en el desarrollo y la producci¨®n de componentes para los aviones. Eso reducir¨¢ los costes. Podr¨ªamos ensamblar los aviones en China, pero seguramente tendr¨ªamos que lidiar con algunas reglas gubernamentales. Pero tampoco es algo que hayamos estudiado en detalle.

P. ?C¨®mo va el litigio ante la OMC que enfrenta a Boeing con Airbus?

R. Nuestra posici¨®n es consistente. El punto de choque est¨¢ en las ayudas al lanzamiento que recibe Airbus para el desarrollo de sus aviones. M¨¢s all¨¢ de eso, me gustar¨ªa llegar a un acuerdo negociado en el que las dos partes cedamos y recibamos algo. Creo que se puede lograr. Pero como hombre de negocios, estar metido en un litigio entre gobiernos es un poco frustrante. Aunque parece que las dos partes est¨¢n empezando a acelerar las discusiones.

P. ?Hay alguna divisi¨®n de la compa?¨ªa que quiera reforzar?

R. Quiero que todas sean fuertes. El negocio de la aviaci¨®n comercial rinde muy bien. Tambi¨¦n el de aviones militares y otras plataformas en el ¨¢mbito de la defensa. Y pienso que el segmento espacial lo estamos reconstruyendo tras un par de a?os de dificultad. Ah¨ª es donde tenemos que hacer m¨¢s.