El 'grand slam' de los tramposos

Mientras en otros deportes, como el tenis o el golf, se habla en los ¨²ltimos a?os de la posibilidad de que sus mejores jugadores, Tiger Woods, Phil Mickelson o Roger Federer, por ejemplo, sean capaces de lograr el grand slam, la victoria consecutiva en los cuatro torneos llamados grandes de sus deportes, el ciclismo cuenta desde ayer con un r¨¦cord similar, pero, tristemente, en negativo, para sus tres grandes competiciones por etapas, el grand slam de los tramposos: los ganadores de la ¨²ltima Vuelta, Roberto Heras (positivo por EPO), el ¨²ltimo Giro, Ivan Basso (investigado por su implicaci¨®n en la Operaci¨®n Puerto), y el ¨²ltimo Tour, Floyd Landis (positivo por testosterona), est¨¢n implicados en asuntos de dopaje.

Esta constataci¨®n dej¨® ayer hundido en la miseria al mundo del ciclismo. Y, a la vista de ella, la cadena de televisi¨®n alemana ZDF anunci¨® que se pensar¨ªa muy seriamente si continuar¨ªa transmitiendo el Tour los pr¨®ximos a?os. "Pagamos para televisar una prueba deportiva, no un show que muestre las exhibiciones de la industria farmac¨¦utica", afirm¨® ayer un redactor de la cadena germana. Ya ni el viejo argumento del mundillo del ciclismo de que al ser el deporte m¨¢s controlado es el deporte m¨¢s castigado puede sostenerse en pie: pese al aumento de los controles en todas las disciplinas, pese a que todo el deporte profesional se desarrolle en la delgada l¨ªnea que separa la trampa de lo l¨ªcito, ninguna otra especialidad, exceptuando quiz¨¢s la halterofilia, ha visto a tantos de sus campeones tan sistem¨¢ticamente desacreditados. "Esta es la peor noticia que pod¨ªa recibir el ciclismo", coincidieron en sus reacciones la mayor¨ªa de las fuerzas vivas del ciclismo mundial, que comprobaron una vez m¨¢s, perplejos, la m¨¢xima que convierte en sospechosa cualquier demostraci¨®n de superioridad ciclista.

Roberto Heras gan¨® la Vuelta 2005 con una exhibici¨®n de fuerza personal y colectiva en la gran etapa de Pajares, un ataque de todo el Liberty en el descenso de un puerto; el l¨ªder, Menchov, aislado, la apoteosis en el alto asturiano. Pocas semanas despu¨¦s, el laboratorio de Madrid anunci¨® un resultado positivo por EPO en un control pasado por el fabuloso bejarano en la ¨²ltima contrarreloj, una etapa que recorri¨® a m¨¢s de 54 kil¨®metros por hora. Pocos meses despu¨¦s, el director de su equipo, Manolo Saiz, era detenido por la Guardia Civil en compa?¨ªa de Eufemiano Fuentes. Las investigaciones posteriores mostraron indicios de dopaje organizado y generalizado en el Liberty.

Ivan Basso gan¨® en mayo pasado el Giro. Lo hizo de una forma incontestable, dominando a su antojo las etapas m¨¢s duras, dejando a sus rivales las migajas. Segundo result¨® sorprendentemente el valenciano Jos¨¦ Enrique Guti¨¦rrez, corredor del Phonak de Landis, corpulento rodador que super¨® en la mayor¨ªa de las subidas a los m¨¢s livianos escaladores. Pocas semanas despu¨¦s, la documentaci¨®n incautada por la Guardia Civil en la Operaci¨®n Puerto mostr¨® la implicaci¨®n de ambos corredores, Basso y Guti¨¦rrez, en pr¨¢cticas dopantes que inclu¨ªan la autotransfusi¨®n de sangre organizadas por Eufemiano Fuentes.

Floyd Landis gan¨® el Tour 2006 con un ataque el 20 de julio que hizo recordar a las gestas de Chiappucci, Gaul, Coppi o Merckx, un ataque ¨²nico al d¨ªa siguiente de un tremendo desfallecimiento, lo nunca visto en el siglo XXI. Siete d¨ªas despu¨¦s, su equipo anuncia que ha sido controlado positivo por una alta tasa de testosterona.