El techo de la familia

Laura Garc¨ªa, de 26 a?os, mide 1,82 metros, nueve cent¨ªmetros m¨¢s que su padre y siete m¨¢s que su madre. Esta familia madrile?a es una prueba de que la gen¨¦tica se supera al amparo de la buena alimentaci¨®n, la buena salud y el ejercicio f¨ªsico. "Siempre hice mucho ejercicio en el colegio desde que era peque?a. Aparte de gimnasia, hac¨ªamos voleibol y baloncesto. Nunca he sido buena en el baloncesto, a pesar de la altura", deja claro.

Garc¨ªa, licenciada en Derecho y m¨¢ster en Periodismo, se est¨¢ preparando las oposiciones para el Cuerpo Diplom¨¢tico. Ya ha superado la primera prueba; le quedan tres. La pr¨®xima, en septiembre. Su padre, Mart¨ªn Garc¨ªa, periodista de 61 a?os, tuvo su primer trabajo cuando estaba "en el preuniversitario", el curso equivalente al ¨²ltimo del bachillerato actual. Pero desde ni?o, ayudaba todos los veranos en las labores del campo, en Le¨®n. Su padre era labrador y med¨ªa alrededor de 1,66 metros. Cuando Garc¨ªa era peque?o la alimentaci¨®n "era muy b¨¢sica, garbanzos, patatas, alubias y un poquito de leche...". Con 12 a?os se traslad¨® a Oviedo para continuar sus estudios y, adem¨¢s de empezar a practicar deporte, su alimentaci¨®n mejor¨®, asegura.

Su hija, Laura, durante toda su infancia y adolescencia comi¨® en el comedor de su colegio, una alimentaci¨®n variada y normal, asegura. La madre de Laura Garc¨ªa se llama Rita Alzaya. Con 1,75 metros de estatura, tambi¨¦n es alta para su generaci¨®n; tiene 55 a?os. Tambi¨¦n lo era su padre, que ahora tendr¨ªa m¨¢s de 80 a?os y med¨ªa 1,75. Era abogado, como tambi¨¦n lo es Rita, que comenz¨® a trabajar a los 23 a?os. Su madre mide 1,66. "Hasta los 16 a?os, com¨ª en el colegio. Era una comida muy mala, muy poco sazonada, poco sabrosa. Yo creo que com¨ªa poco...", se r¨ªe Alzaya. De ejercicio, "lo normal, la gimnasia en la escuela". Aparte de Laura, tiene otra hija, Sandra, de 28 a?os, que mide 1,78.