De 'pic-nic' en el espacio
Vio 'Star Trek' de ni?a y so?¨® con viajar al espacio. Hoy la iran¨ª Anousheh Ansari se ha convertido en la primera mujer que har¨¢ turismo espacial.
De ni?a, en Teher¨¢n, Anousheh Ansari so?aba con viajar al espacio. Esa ilusi¨®n, que este mismo a?o o el pr¨®ximo puede por fin convertirse en realidad, surgi¨® cuando vio la primera pel¨ªcula de Star Trek. Despu¨¦s, nunca se perd¨ªa las frecuentes reposiciones de la famosa serie de Gene Rodenberry. No sab¨ªa entonces Anousheh que se ver¨ªa obligada a mudarse de Ir¨¢n a una de las potencias espaciales, EE UU. Hoy Ansari, a sus 39 a?os, ya es oficialmente la doble del turista espacial japon¨¦s Daisuke Enomoto, que debe viajar a la ISS este oto?o. Si el multimillonario Enomoto enferma, en su lugar volar¨¢ Ansari; de lo contrario tendr¨¢ que esperar hasta la primavera para convertirse en la primera mujer que va a hacer turismo al espacio.
Doce a?os ten¨ªa Anousheh en 1979, cuando el Sha fue depuesto por la revoluci¨®n isl¨¢mica. El padre de la futura millonaria perdi¨® su trabajo despu¨¦s de que el r¨¦gimen de los ayatol¨¢s cerrara su negocio de vinos. Con un gran talento para las ciencias, especialmente las matem¨¢ticas, Anousheh no ten¨ªa ninguna perspectiva en un r¨¦gimen fundamentalista que pon¨ªa serios obst¨¢culos a la libertad de las mujeres y a sus ambiciones de convertirse en profesionales. As¨ª las cosas, Anousheh decidi¨® emigrar a tierras m¨¢s tranquilas, tolerantes y libres, y sus padres le dieron su bendici¨®n porque ten¨ªan una pariente en Virginia del Norte. A los 17 a?os, con un ingl¨¦s balbuceante, Anousheh lleg¨® a Estados Unidos, donde estudi¨® ingenier¨ªa el¨¦ctrica y computaci¨®n en la Universidad George Mason. En el nuevo pa¨ªs Anousheh conoci¨® a Hamid Ansari, un a?o mayor que ella, hoy su marido y socio.
Los Ansari fundaron en 1993 Telecom Technologies, firma en la que invirtieron el equivalente a cerca de 40.000 euros. A principios de nuestro nuevo siglo, la compa?¨ªa val¨ªa ya m¨¢s de 471 millones y decidieron venderla. Cuatro a?os atr¨¢s, Anousheh Ansari fue una de las dos ¨²nicas mujeres aparecidas en la prestigiosa revista Fortune en la lista de los 40 m¨¢s exitosos empresarios menores de 40.
Este a?o Ansari pas¨® los ex¨¢menes m¨¦dicos para poder volar al espacio y estuvo varias semanas entren¨¢ndose en la Ciudad de las Estrellas, el legendario centro de preparaci¨®n de los cosmonautas rusos ubicado en los alrededores de Mosc¨². Adem¨¢s de las t¨ªpicas pruebas para poder soportar las sobrecargas del lanzamiento y despu¨¦s la ingravidez en la ISS, Anousheh tambi¨¦n ha tenido que aprender a disparar para estar preparada por si de regreso la nave cae en las estepas y tiene que defenderse de los animales salvajes.
Pero Anousheh Ansari no es una reci¨¦n llegada a la esfera espacial. No en vano el Premio X -cuyo objetivo era incentivar la industria espacial en el sector privado- lleva su apellido. Anousheh es tambi¨¦n fundadora de Protea, una compa?¨ªa que ha firmado un acuerdo con Space Adventures, la empresa norteamericana de turismo espacial que trabaja con Agencia Federal Espacial de Rusia.
Enomoto, que debe viajar en la nave Soyuz TMA-9 en septiembre pr¨®ximo, se convertir¨¢ en el cuarto turista espacial, despu¨¦s del californiano Dennis Tito (2001), el surafricano Mark Shuttleworth (2002) y el estadounidense de Nueva Jersey Gregory Olson (2005). Si todo va bien, Ansari viajar¨¢ a la ISS la primavera pr¨®xima y, como sus predecesores, deber¨¢ pagar cerca de 16 millones de euros. Y si desea realizar un paseo espacial ya estando en la ISS, los rusos est¨¢n dispuestos a negociar el coste de ese servicio adicional.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.