Hor¨®scopo miserere
No crean que no estaba deseando zambullirme en la realidad, es decir, en la materia de que se forjan nuestros mi¨¦rcoles -las revistas del coraz¨®n-, no para olvidar otras querencias sino, sencillamente, para recordarlas y amarlas mejor. Qu¨¦ ganas de Beirut me han entrado, por ejemplo, ante el embarazo de la Campanario, que debi¨® de fraguarse -por as¨ª decirlo: con este calor me parece un esfuerzo superior, de Vulcano para arriba- cuando yo me estaba sacando el visado.
Pero si es por embarazos, las revistas supuran maternidad y pre?amientos, hasta el punto de que una posmenop¨¢usica como yo, al leerlas, se ha puesto en el asunto un viejo tap¨®n de An¨ªs del Mono que conservo desde que iba de pic-nic a Atapuerca con mis contempor¨¢neos. No sea que estas f¨¦rtiles sean contagiosas, me dije. Por lo dem¨¢s, sigue habiendo mujeres que van a ver c¨®mo matan toros para mostrar su felicidad junto a sus flamantes ¨²ltimos modelos de labios y marido (la nieta de Franco), y sigue habiendo amor entre Eugenia y Gonzalo. ?Qu¨¦ m¨¢s se puede pedir? Hay un frenes¨ª de mujeres en biquini, de mujeres de compras, de pr¨ªncipes que folgan y de folgantes que principian.
Ruiz-Gallard¨®n tiene un hor¨®scopo impagable, y eso que se imprimi¨® cuando se desconoc¨ªa su disposici¨®n a acatar la ley 'casagays'
Es as¨ª, con las revistas en el regazo, c¨®mo aprende una relativismo y vuelta al ruedo, aparte de a hacerme un bolso como el de Marta Ch¨¢varri cosi¨¦ndole unos parches de percal a mi viejo capazo ibicenco.
Es por esto por lo que he decidido dedicarme a lo que m¨¢s me interesa en estos instantes: el hor¨®scopo, pardiez.
?El hor¨®scopo! Ver¨¢n, como adicta a la revista Vanity Fair que soy -aunque nunca le perdonar¨¦ haber nombrado elegante del a?o a Condoleezza Chanel n¨²mero Fox-, leo de rodillas su hor¨®scopo todos los meses del a?o. En el correspondiente a julio me dijo que iba a tener, mira t¨², un mes movidito, y que ya estaba bien de tanta misantrop¨ªa, que a ver si tomaba el aire. Lo tom¨¦, vive el cielo. Digamos, pues, que me ha dado -y espero que el espl¨¦ndido mensual me lo perdone y no me pase factura- por buscar fechas de nacimiento de personajes significativos, y por adaptarles su hor¨®scopo para agosto de V. F. El resultado, mal me est¨¢ el decirlo, carece de desperdicio.
Vamos a ver: Hasan Nasral¨¢, secretario general de Hezbol¨¢, es virgo y, seg¨²n Vanity Fair: "Dios sabe que puedes tener algo de suerte al tratar de localizar a la mofeta que est¨¢s convencido crea un ambiente apestoso en tu vida". No me digan que la astronom¨ªa carece de sentido. ?O era la astrolog¨ªa? ?O la aerofagia?
Ehud Olmert, primer ministro israel¨ª, es m¨¢s equilibrado -libra-. He aqu¨ª el pron¨®stico para agosto: "Si adoptaras una visi¨®n del mundo m¨¢s filos¨®fica, no te alterar¨ªa tanto ver lo liado que est¨¢ el mundo estos d¨ªas". Ruiz-Gallard¨®n tiene un hor¨®scopo sagitario impagable, y eso que se imprimi¨® cuando a¨²n se desconoc¨ªa su disposici¨®n a acatar la ley casagays: "Con tantos mensajes conflictivos atraves¨¢ndote la cabeza, deber¨ªas sentir alguna compasi¨®n por la gente a la que una vez consideraste hip¨®crita porque predicaban una moral que no respetaban de puertas adentro". Huyyyyyyy. Lo m¨¢s simp¨¢tico es que su hor¨®scopo coincide con el de Jos¨¦ Bono. No s¨¦ por qu¨¦.
Acebes y Simancas, ambos c¨¢ncer y ambos sosos, tienen un hor¨®scopo cr¨ªptico: "Debes saber que tu jard¨ªn seguir¨¢ dando frutos y que siempre encontrar¨¢s all¨ª alimento para salir adelante". Parece de Bienvenido, Mr. Chance. En cambio, el de don Mariano Rajoy, aries, ¨¦se s¨ª que es desconcertante: "?ste ha de ser el m¨¢s apasionante momento del a?o para ti". Puede que la causa sea do?a Esperanza Aguirre, capricornio fatal: "Si no fueras tan civilizado, te soltar¨ªas el pelo y te entregar¨ªas al amor libre".
Por ¨²ltimo he de confesar que Ariel Sharon y yo compartimos el mismo signo: piscis. Viene a decir que debemos ser m¨¢s sociables, m¨¢s asequibles. Y no s¨¦ c¨®mo interpretarlo, la verdad.
En todo caso: ?gracias, Vanity Fair!
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