Estabilizado, controlado, extinguido

Desde el jueves, la consejera de Interior, Montserrat Tura, ha vivido casi permanentemente en gabinete de crisis. Cuando consegu¨ªa desmantelar un centro de mando avanzado en un lado del Empord¨¤, ten¨ªa que trasladarlo de forma casi inmediata a otro punto de la comarca. Con calzado c¨®modo y tejanos, la consejera ha pasado los ¨²ltimos d¨ªas encerrada en ayuntamientos, centros de atenci¨®n primaria y cuarteles policiales, y rodeada de bomberos y de mapas. Con tantas horas de inmersi¨®n en la jerga incendiaria, ha logrado hablar con espontaneidad de conceptos casi po¨¦ticos, como el estr¨¦s h¨ªdrico y la ignici¨®n espont¨¢nea.

Su principal cometido l¨¦xico se centra en la distinci¨®n entre la "estabilizaci¨®n", el "control" y la "extinci¨®n" de un fuego. Se ha referido a estas nociones en sus comparecencias ante los medios de comunicaci¨®n y con tanta insistencia que quiz¨¢ conseguir¨¢ que abandonemos la distinci¨®n cl¨¢sica entre "apagado" y "encendido". As¨ª, los dos ¨²nicos de los cinco ¨²ltimos incendios que ayer se daban por extinguidos eran los de Cadaqu¨¦s y Sant Climent Sescebes. No hab¨ªa ninguno controlado (el fuego mortecino puede reavivarse). Los de Cistella, Ventall¨® y Capmany se daban por estabilizados a ¨²ltima hora, porque su per¨ªmetro no crec¨ªa.