Aznar+negociaci¨®n con ETA

La foto fue tomada el 3 de marzo de 2006, durante la convenci¨®n que llev¨® a cabo el PP para encarar el futuro. Sin embargo, Aznar aprovech¨® su intervenci¨®n para hacerse un pasado. Vino a decir que ¨¦l nunca se hab¨ªa referido a ETA con el nombre de Movimiento Vasco de Liberaci¨®n. Que nunca dijo que si los terroristas dejaban las armas sabr¨ªa ser generoso. Que de su boca no sali¨® la frase "Estoy dispuesto a tomar todas las iniciativas que fuesen necesarias si vi¨¦semos que pod¨ªa entenderse o pod¨ªan darse pasos positivos para que esa situaci¨®n de cese de violencia diese lugar a un proceso definitivo de paz". Que jam¨¢s pronunci¨® la siguiente oraci¨®n compuesta: "Estoy dispuesto a ser generoso si es necesario, a ser comprensivo si eso ayuda al final del terrorismo". Tampoco afirm¨® nunca que "por la paz y por sus derechos pondremos lo mejor de nuestra parte para hacerla definitiva con la ayuda y la esperanza de todos".

Hay cuatrocientas mil referencias, se dice pronto, sobre todos estos hechos que jam¨¢s sucedieron

Tampoco Mariano Rajoy declar¨®, en relaci¨®n al acercamiento de presos, que el Gobierno hab¨ªa hecho un gesto conforme a la voluntad y el deseo de que llegara la paz. Ricardo Mart¨ªn Flux¨¢, a la saz¨®n secretario de Estado para la seguridad, no dijo en ning¨²n momento que en ese proceso "no podr¨¢ haber nunca vencedores ni vencidos". Durante el Gobierno del PP no se produjeron 311 excarcelaciones de etarras, 64 de las cuales correspond¨ªan a terroristas condenados por asesinatos m¨²ltiples a penas superiores a 20 a?os, cuando no a 200 o 300. Entre septiembre de 1998 y septiembre de 1999 el PP no orden¨® el acercamiento de m¨¢s de 120 presos de ETA a c¨¢rceles del Pa¨ªs Vasco. Tampoco permiti¨® ni estimul¨® el regreso de m¨¢s de 300 exiliados. En la reuni¨®n del Gobierno con ETA en Z¨²rich, que l¨®gicamente nunca se produjo, nadie se dirigi¨® a los terroristas para decirles "No venimos a la derrota de ETA".

Si usted entra en un buscador cualquiera de Internet y escribe "Aznar+negociaci¨®n con ETA", le salen casi cuatrocientas mil referencias. Cuatrocientas mil referencias, se dice pronto, algunas muy documentadas, sobre todos estos hechos que jam¨¢s sucedieron. Se trata de un caso ¨²nico en la historia de la humanidad, si exceptuamos el ¨¢mbito de la teolog¨ªa, que ha producido millones de libros acerca de un ser al que nadie ha visto y sobre cuya existencia no existe prueba alguna.

Acudieron a la convenci¨®n del PP 3.000 militantes que aplaudieron a su jefe natural (qued¨® muy claro que Rajoy era un suced¨¢neo), porque los 3.000 estaban de acuerdo en que Aznar no hab¨ªa negociado con ETA, no hab¨ªa llamado a la banda asesina Movimiento Vasco de Liberaci¨®n, no hab¨ªa asegurado que sabr¨ªa ser generoso si abandonaban las armas, no hab¨ªa excarcelado, ni aproximado presos, no hab¨ªa dicho que no habr¨ªa vencedores ni vencidos, etc¨¦tera.

Llama la atenci¨®n que Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar y Mariano Rajoy, las dos primeras figuras del acto, tuvieran que sentarse en el suelo, como si no hubiera sitio para ellas en una convenci¨®n sobre el futuro. Pero qui¨¦n necesita un futuro con un pasado tan brillante, tan limpio, tan sin m¨¢cula, que dir¨ªa el extinto Carrero Blanco. Viva todo.