Turismo barato
Los datos ahora conocidos sobre la actual temporada tur¨ªstica no son adversos. Eso ya es una buena se?al, dado el elevado grado de madurez de esa industria en Espa?a y las perturbaciones que el entorno ha generado, poco propicias a la movilidad de las personas. En los siete primeros meses del a?o han sido m¨¢s de 33,3 millones los visitantes extranjeros, un 5,3% m¨¢s que en el mismo periodo del ejercicio anterior, seg¨²n la Encuesta de Movimientos Tur¨ªsticos en Frontera (Frontur). En julio llegaron 7,7 millones de turistas, un 3% m¨¢s que en julio de 2005. Brit¨¢nicos, alemanes y franceses est¨¢n a la cabeza. Si el aumento de las entradas ha coexistido con una situaci¨®n de sus respectivas econom¨ªas no muy favorable, es de esperar que las posibles mejoras en las mismas se traduzcan como m¨ªnimo en el mantenimiento de esa tendencia.
Ahora bien, que aumenten las entradas de visitantes no es suficiente para que la principal industria del pa¨ªs mantenga la vitalidad necesaria. Es preciso que los que entran gasten m¨¢s. Y eso no est¨¢ ocurriendo en la misma proporci¨®n. El sector tur¨ªstico debe mejorar su oferta de forma que la calidad de las visitas aumente suficientemente y con ella los ingresos. Los datos conocidos sobre el uso intensivo de aerol¨ªneas de bajo coste son tambi¨¦n muy elocuentes. Es la v¨ªa a¨¦rea la principal entrada de turistas a nuestro pa¨ªs. Y en esos primeros siete meses, los embarcados en compa?¨ªas baratas con destino a Espa?a aumentaron un 15,4%.
No hay que esperar a disponer de los datos definitivos de la balanza de ingresos tur¨ªsticos para confirmar las conclusiones que una parte importante del propio sector, a trav¨¦s de las cifras que aporta peri¨®dicamente Exceltur, ha venido ofreciendo en los ¨²ltimos meses: la necesidad de mejoras significativas en la oferta con el fin de aumentar los ingresos y, no menos importante, reducir las amenazas de otros destinos m¨¢s baratos. Algunos de estos ¨²ltimos, en pa¨ªses pr¨®ximos a Europa, pero con mayor exposici¨®n a riesgos geopol¨ªticos, disponen de ese mismo binomio sol-playa en el que sigue asent¨¢ndose casi exclusivamente las ventajas comparativas de nuestro mercado. As¨ª lo han apreciado algunos de los principales operadores empresariales espa?oles, invirtiendo intensamente en algunos de esos pa¨ªses, a los que precisamente acuden cada vez m¨¢s los propios turistas espa?oles.
Los gastos de los espa?oles en ese concepto no dejan de aumentar y los de los visitantes se mantienen. Un balance que invita a que los propios empresarios del sector, con el apoyo de la Administraci¨®n, se plantee de una vez por todas una verdadera reflexi¨®n estrat¨¦gica. Eso significa mejorar sustancialmente la oferta, haci¨¦ndola m¨¢s respetuosa con el medioambiente y con las exigencias de visitantes con mayor renta, y, desde luego, a diversificarla. Alejarse, en definitiva, de ese patr¨®n tradicionalmente amparado en el turismo barato.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.