Misi¨®n de alto riesgo

La aportaci¨®n de hasta 6.900 soldados europeos, es decir, casi la mitad del total, a la ampliaci¨®n de la operaci¨®n militar de Naciones Unidas (FINUL) en L¨ªbano est¨¢ a la altura de las circunstancias ante una misi¨®n de alto riesgo para convertir en permanente el alto el fuego entre Israel y Hezbol¨¢. Italia, con 3.000, Francia, con 2.000, y Espa?a, con unos 1.000 soldados, aportar¨¢n la mayor parte de este esfuerzo, seg¨²n se decidi¨® ayer en Bruselas. El operativo ser¨¢ de entrada comandado por Francia, como antigua potencia colonizadora, y a partir de febrero pr¨®ximo, por Italia.

El considerable esfuerzo italiano busca compensar su pr¨®xima retirada de Irak. La presencia en Bruselas del secretario general de la ONU, Kofi Annan, ha animado a otros europeos que arrastraban los pies a aportar fuerzas, aunque entre ellos no figura Londres, pillado en la guerra equivocada de Irak. Ahora falta que Malaisia, Indonesia, Bangladesh, Nepal y, si Annan le convence, Turqu¨ªa, concreten su aportaci¨®n.

Hay que aplaudir que Espa?a se mostrara ayer dispuesta a enviar un millar de soldados, o m¨¢s, si fuera necesario, lo que constituye un contingente superior al barajado anteriormente. Pero es obligado que el Gobierno ofrezca una amplia explicaci¨®n de la misi¨®n y de sus reglas de funcionamiento para que el Parlamento apruebe, con el mayor consenso posible, la operaci¨®n exterior m¨¢s delicada emprendida por fuerzas espa?olas. Como m¨ªnimo, las tropas deben poder defenderse en caso de ser atacadas, en consonancia con las nuevas reglas para la FINUL.

A nadie se le escapan los riesgos. La guerra entre Israel y Hezbol¨¢ (en el marco de un L¨ªbano de fr¨¢gil unidad) se ha parado sin que Israel la haya ganado, lo cual en s¨ª es una victoria para el movimiento armado chi¨ª. Annan confirm¨® que la FINUL no tendr¨¢ como cometido desarmar a Hezbol¨¢, como pretend¨ªa Israel, pues tal objetivo debe alcanzarse mediante un proceso pol¨ªtico interno liban¨¦s. Tampoco, salvo en apoyo del Ej¨¦rcito liban¨¦s, se encargar¨¢ de evitar que por la frontera entre Siria y L¨ªbano entren armas. Si siguen entrando, nada garantiza que Israel no rompa el alto el fuego con ataques como los de d¨ªas pasados.

Hay prisas. Cuanto m¨¢s tarden en llegar estas fuerzas, m¨¢s se afianzar¨¢ Hezbol¨¢ en el sur de L¨ªbano y m¨¢s crecer¨¢n las presiones israel¨ªes para lanzar una segunda ofensiva. El despliegue multinacional en tres fases implica que un primer contingente de 4.000 efectivos llegue a L¨ªbano "en cuesti¨®n de d¨ªas, y no de semanas", se?al¨® ayer Annan. La FINUL puede contribuir a pacificar la situaci¨®n, pero una soluci¨®n s¨®lida y estable s¨®lo llegar¨¢, como indicaron en Par¨ªs Chirac y Merkel, tras un proceso pol¨ªtico en el que Europa puede tener un papel destacado. Aunque la UE no participe como tal en la FINUL, con la decisi¨®n de ayer y el despliegue, Europa habr¨¢ ganado en capacidad de intermediaci¨®n casi en la misma proporci¨®n en que la ha perdido EE UU en la zona.