La central nuclear Vandell¨°s II estar¨¢ parada un mes para cambiar los 104 tornillos del reactor

La central nuclear Vandell¨°s II inici¨® ayer una parada programada para sustituir los 104 tornillos (t¨¦cnicamente, split-pins) de los tubos gu¨ªa de las barras de control del reactor por otros nuevos fabricados con una aleaci¨®n m¨¢s resistente que la empleada en los originales. Est¨¢ previsto que la parada finalice el pr¨®ximo d¨ªa 26 de septiembre. La empresa suministradora de Vandell¨°s II ya hab¨ªa aconsejado el cambio de esas piezas hace tres a?os, despu¨¦s de que se detectaran problemas en centrales nucleares de dise?o similar instaladas en Estados Unidos.

La recomendaci¨®n de la suministradora, sin embargo, no se hizo con car¨¢cter de urgencia, por lo que la empresa explotadora de ¨¦sta y las otras dos centrales nucleares de la provincia de Tarragona hab¨ªa previsto hacer el cambio en 2008, aprovechando una de las paradas habituales para recarga de combustible de la planta, lo que les hubiera ahorrado unos dos millones de euros. Sin embargo, una aver¨ªa que se produjo el pasado marzo, al romperse uno de estos 104 tornillos, aconsej¨® adelantar la sustituci¨®n.

Las otras dos centrales nucleares de la provincia de Tarragona, Asc¨® I, que empez¨® a funcionar en 1984, y Asc¨® II (1986) funcionan con id¨¦ntica tecnolog¨ªa, por lo que la recomendaci¨®n de cambiar los split-pins que hab¨ªa hecho en su d¨ªa la suministradora era extensiva a los tres centros, si bien los plazos preve¨ªan comenzar por la m¨¢s antigua. As¨ª, Asc¨® I fue la primera en hacer la sustituci¨®n en el plazo previsto, aprovechando una parada por recarga. En Asc¨® II, se realizar¨¢ tambi¨¦n en una parada habitual por recarga en 2007, puesto que en ninguna de ellas se han producido aver¨ªas como la de Vandell¨°s II, que empez¨® a funcionar en marzo de 1988.

Los costes de los trabajos de sustituci¨®n de los tornillos ascienden a 2,5 millones de euros, pero a esta cantidad hay que a?adir otros dos millones correspondientes a la parada que se hace especialmente para realizar la operaci¨®n y que se podr¨ªan haber ahorrado de haber decidido aprovechar la parada por recarga.

Eugeni Vives, portavoz de la central, indic¨® que este hecho prueba que la empresa Asociaci¨®n Nuclear Asc¨®-Vandell¨°s II, encargada de la explotaci¨®n de las tres nucleares tarraconenses, da prioridad a la seguridad en la toma de decisiones, en contra de lo que suelen denunciar las organizaciones ecologistas. En concreto, Vives cit¨® a Greenpeace, que suele hacer un marcaje corto a las nucleares, una energ¨ªa que considera desaconsejable por su excesivo riesgo.

Asimismo, Vives afirm¨® que el desplazamiento, en marzo, de la pieza de uno de los tornillos hasta el generador de vapor responde al propio dise?o de la central nuclear, que prev¨¦ que cualquier pieza que pueda desprenderse quede atrapada en el mismo generador, donde puede ser detectada por el ruido que emite. El portavoz de la central a?adi¨® que el tornillo, pese al desprendimiento, segu¨ªa cumpliendo su funci¨®n, por lo que la seguridad no qued¨® mermada. Avala esta afirmaci¨®n el hecho de que el Consejo de Seguridad Nuclear haya permitido que Vandell¨°s II haya estado en funcionamiento hasta la medianoche del domingo al lunes, momento en el que se inici¨® la actual parada programada.