?Qui¨¦n desaf¨ªa a Newton?
M¨¢s de una vez se ha dicho que tal o cual jugador de la NBA desafiaba las leyes de Newton en sus entradas a canasta. Quien ha usado esta expresi¨®n se refiere a la acci¨®n de la gravedad sobre el jugador, que de alguna forma parece ser mitigada, pero no por una excepcional capacidad de salto, que dif¨ªcilmente superar¨¢ a la de los atletas de salto de altura o la de algunos bailarines, sino por algo que hacen en sus entradas que parece prolongarles el vuelo. Los astronautas, cuando necesitan practicar la ausencia de gravedad se suben a aviones especiales que realizan loopings y durante unos segundos consiguen este efecto. ?Acaso los jugadores de baloncesto usar¨¢n una estrategia parecida? O por el contrario, ?el autor se refiere simplemente a una ilusi¨®n ¨®ptica provocada sobre el espectador?. Y si es as¨ª, ?en qu¨¦ consiste la ilusi¨®n?
El jugador de baloncesto, durante la entrada a canasta, describe un movimiento parab¨®lico, pero a diferencia de la famosa bola de un ca?¨®n o de una pelota que lanzamos, el jugador se mueve durante el vuelo (m¨¢s le vale, si no quiere recibir un tap¨®n). Su trayectoria parab¨®lica no la describe una parte concreta de su anatom¨ªa, como por ejemplo los pies, manos o cabeza, sino un punto, que no podemos ver, aunque s¨ª podemos calcular su posici¨®n, que llamamos centro de gravedad. ?ste describe una trayectoria que est¨¢ perfectamente determinada, sabiendo cu¨¢nta velocidad ten¨ªa al despegar, con qu¨¦ ¨¢ngulo lo hizo y a qu¨¦ altura llegar¨¢ respecto a la de partida. Entonces ?de d¨®nde nace la ilusi¨®n? Pues de que alguna parte de su cuerpo, por ejemplo la cabeza, puede permanecer a la misma altura durante un trecho del vuelo. Para conseguirlo, basta doblar (flexionar) durante el ascenso las extremidades inferiores y extenderlas durante el descenso, o si se hace con las extremidades superiores, levantarlas al inicio del vuelo y bajarlas al final. Como casi siempre, es f¨¢cil de decir y dif¨ªcil de hacer, a¨²n teniendo mucha fuerza explosiva, que nos permita aguantar m¨¢s tiempo en el aire. Pero, ?de cuanto tiempo estamos hablando? En un salto muy potente, en el que el centro de gravedad se llegara a levantar medio metro, el vuelo de nuestro jugador escasamente perdurar¨¢ seis d¨¦cimas de segundo. Nada, que como en los buenos juegos de magia, la ilusi¨®n se crea con movimientos r¨¢pidos y precisos.
Por desaf¨ªo se entender¨ªa hoy el problema del recorrido m¨¢s r¨¢pido en la ca¨ªda de unas bolas entre 2 puntos, usando diferentes trayectorias en la pendiente (la braquist¨®crona), que plante¨® en su ¨¦poca el matem¨¢tico suizo Johann Bernoulli ante la Royal Society y que solucion¨® de forma elegante el f¨ªsico ingl¨¦s. Pero ning¨²n deportista ha desafiado ni desaf¨ªa las leyes de Newton, precisamente porque las usan y juegan con ellas creando ilusi¨®n en los espectadores. Ahora, la selecci¨®n espa?ola ha cumplido con lo esperado y cada partido ganado en esta ¨²ltima fase va a despertar mayores dosis de ilusi¨®n. Qui¨¦n sabe si nos espera una final en la que nuestros jugadores puedan desafiar en juego al equipo americano.
Xavier Aguado J¨®dar es biomec¨¢nico de la Facultad de Ciencias del Deporte, Universidad de Castilla-La Mancha.
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