'El grito' s¨®lo tiene una arruga
La protecci¨®n de los cuadros robados de Munch costar¨¢ cuatro millones de euros
Los dos cuadros de Edvard Munch, El grito y Madonna, est¨¢n ya en el museo de donde fueron robados pero se tardar¨¢ un tiempo, "tal vez meses", seg¨²n la opini¨®n de Ingebj?rn Ydstie, experta del Museo Munch, en poder ser exhibidos al p¨²blico, en raz¨®n de algunos da?os que deber¨¢n ser reparados. En declaraciones formuladas al diario Aftenposten, Ingebj?rn Ydstiee indic¨® que Madonna es el m¨¢s da?ado de los cuadros, presentando dos rasgu?os en la parte inferior izquierda, y un agujero del tama?o de una moneda de veinte coronas noruegas, un par de cent¨ªmetros aproximadamente. El grito, por su parte, tiene una peque?a arruga en uno de los ¨¢ngulos, como consecuencia de un golpe que sufri¨® cuando los ladrones hu¨ªan en un coche que los esperaba en las inmediaciones del museo.
'Madonna' presenta un agujero de dos cent¨ªmetros y rasgu?os en la superficie
Cuando se exhiban lo har¨¢n con las m¨¢s modernas medidas de seguridad porque la Comuna de Oslo ya ha invertido cerca de cuatro millones de euros en instalar la tecnolog¨ªa necesaria. Los cuadros estaban valorados en unos 750 millones de coronas (aproximadamente 75 millones de euros), aunque dado el car¨¢cter excepcional de las piezas resulta dif¨ªcil otorgarles un precio de mercado. La pol¨¦mica ahora se centra en saber si la polic¨ªa negoci¨® con uno de los ladrones encarcelados.
La noticia de la recuperaci¨®n de las obras ha suscitado un sentimiento de alivio. El recuerdo de las graves carencias en la preservaci¨®n de las piezas puestas en evidencia con el robo permaneci¨® como una carga adicional para los responsables. Y la opini¨®n popular no dej¨® de se?alar la irritante paradoja de que uno de los pa¨ªses m¨¢s ricos del planeta no hab¨ªa hecho las inversiones necesarias para protegerlas. Es por ello que la Comuna de Oslo invirti¨® posteriormente unos cuatro millones de euros en la instalaci¨®n de las tecnolog¨ªas m¨¢s sofisticadas de seguridad.
En el robo del 22 de agosto de 2004 participaron tres asaltantes, dos de ellos, Petter Tharaldsen y Bj?rn Hoein, fueron capturados. El tercero, que esperaba en las proximidades del museo al volante de un Audi en el que huyeron, sigue libre. Tal como sucede en estos casos, junto con la condena se exigi¨® a los autores del robo una indemnizaci¨®n por el valor estimado de los cuadros en favor de la Comuna de Oslo.
El otro centro de inter¨¦s que preocupa tiene relaci¨®n con las circunstancias que precedieron a la recuperaci¨®n de los cuadros. Un tema sobre el que ya se ha disparado la pol¨¦mica porque, seg¨²n diversas evidencias, la recuperaci¨®n habr¨ªa sido el fruto de una "negociaci¨®n" entre un delincuente condenado a una larga reclusi¨®n por el asalto a un banco en el que result¨® muerto un polic¨ªa, y las autoridades nacionales, representadas en este caso por la polic¨ªa, que se descarta que hubiera actuado sin el aval de instancias superiores. Seg¨²n dicha informaci¨®n, David Tosca, presunto cabecilla del asalto a NOKAS, el banco nacional noruego de la ciudad Stavanger, habr¨ªa ofrecido a trav¨¦s de su abogado proporcionar a la polic¨ªa las pistas para la recuperaci¨®n de los cuadros. Sobre qu¨¦ solicitaba a cambio de su oferta, las versiones no coinciden. Seg¨²n algunas ped¨ªa una reducci¨®n de la condena de 19 a?os que pesa sobre ¨¦l. Se tratar¨ªa de una t¨¢ctica de pedir mucho para obtener algo. Ese algo, en la versi¨®n m¨¢s veros¨ªmil, ser¨ªa la de predisponer en su favor a la opini¨®n p¨²blica, algo que sin duda ya ha logrado, y tambi¨¦n a las instancias directamente vinculadas a su situaci¨®n para obtener un r¨¦gimen carcelario m¨¢s laxo.
Ninguno de los implicados en la presunta negociaci¨®n, el abogado de David Tosca y el del Estado, quisieron siquiera comentar la existencia de tales tratos, y tampoco la polic¨ªa respondi¨® sobre el particular, en su comparecencia ante los periodistas el pasado jueves para dar cuenta de la recuperaci¨®n de los cuadros. No s¨®lo no los mostraron sino que no brindaron ning¨²n detalle acerca de d¨®nde y c¨®mo se hab¨ªa logrado llegar hasta ellos.
Respecto a la versi¨®n de una disminuci¨®n de la condena, la exigencia mayor que habr¨ªa formulado el abogado del preso, el presidente del sindicato que agrupa a los polic¨ªas, Arne Johannessen, fue categ¨®rico ayer al expresar que "una rebaja de la pena es inaceptable", considerando que Sigve Klungland, polic¨ªa y miembro del sindicato, result¨® muerto en el asalto. No se pronunci¨® en cambio sobre las otras condiciones que habr¨ªa puesto el abogado defensor. Con tales antecedentes, la convicci¨®n generalizada de los medios en sus ediciones de ayer es de que las negociaciones existieron y que algunas de ellas, presumiblemente las menos irritantes, probablemente han sido aceptadas y una vez que el inter¨¦s y la euforia de estos d¨ªas comience a decaer se llevar¨¢n a la pr¨¢ctica.
Un dato que confirma estas presunciones es que el pr¨®ximo lunes un tribunal de Oslo comenzar¨¢ a tratar la apelaci¨®n sobre las condenas por el robo del banco. Una coincidencia entre este hecho y la aparici¨®n de los cuadros que no ha pasado inadvertida. Es posible que m¨¢s adelante pudiera considerarse una rebaja de la condena.El valor de las dos obras se calcula en unos 75 millones de euros
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